Cuando tienes un sueño por cumplir lo haces sin importar los obstáculos, era el destino que los junto, ella quería ser una gran heroína y el un gran héroe ambos teniendo esas metas. Para lograr ayudar a los demás, siempre con una gran fe y una gran...
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《 T1: E5 - Las medidas para los uniformes 》
Era otro día, la verdad solo faltan dos días para mi ingreso a la U.A mañana será el dia de examen de admisión y mi ventaja es que mañana será mi descanso por ser una recomendada.
Salí de mi habitación al cambiarme con una ropa cómoda, para ir y ayudar a mi abuela con los nuevos medicamentos que llegaron el día de ayer por la tarde.
Baje de las escaleras y me dirigí a abrir la puerta trasera de la tienda.
Kaori- Buen día, Abuela. -La salude y ella me sonrio.
Abuela- Buen día, Kaori. -Me dijo y me acerque a ella por suerte no estaba atendiendo a ninguno pero si que veía a una pareja en busca de algún medicamento por los dos pasillos pequeños de allí.
Kaori- Déjame ayudarte con los productos.
Abuela- Esta bien, están detrás mío.
Mi abuela me extendió las cajas poniéndolas encima de la barra así tomarlas y abrirlas mientras que revisaba cuales eran.
Después de eso, me encontraba ya ordenando esos productos en sus sectores, mientras que escuchaba a mi abuela atender a los clientes.
Estaba muy distraída que no me di cuenta el transcurso de las horas. Y es que eran tres cajas con medicamentos tanto como jarabes, gotas para los ojos, oídos, etc.
Cuando tomo una caja de jarabe y la pongo en su lugar, siento que alguien me toca el hombro, giro confundida creyendo que era mi abuela pero me sorprendi al ver que era el mismo hombre de mirada aburrida y cansada.
Me hizo levantarme de golpe sorprendida.
Kaori- S-Señor... ¿q-que necesita?. -Le respondí nerviosa. Claro, luego de que mi abuela me dijera que ese mismo Señor había sido el que le entregó el sobre de la U.A no podía estar más nerviosa.
Hombre- Eres Kaori Yoshimura, ¿no es así?. -Asenti con nervios y temblorosa.- Bien, yo soy Shota Aizawa, trabajo en la U.A, pero vine personalmente con una costurera para tomarte las medidas para tus nuevos uniformes.
Abrí mi boca sorprendida y vi de reojo que mi abuela al llegar escucho la presentación de el hombre y lo que quería.
Abuela- ¡Claro, venga sigame!. -Le dijo mi abuela algo emocionada y amable.
Yo observo como mi abuela invito a Aizawa-san a la casa y detras de el iba una mujer como un poco menor que mi abuela. Me dirigí hasta la entrada de la tienda para cerrarla e ir a que me tomen las medidas.
Corrí hasta la puerta detrás de la tienda y la abrí para entrar a mi casa.
Me encamine por el pasillo pequeño para girar a mi izquierda.
