Solo una noche [Pailita] Saga bandidos 1

||Capitulo veintisiete||

"Luces apagadas
No estás aquí abrazándome
Cuento cada lágrima que
baja por mi mejilla
En lugar de ovejas Sueños malos
Puede que no signifiquen nada
Pero tu no pareces necesitar nada
Intenté vivir en blanco y negro pero soy tan azul
Me gustaría decirlo en serio cuando
digo que te he superado
Pero eso sigue sin ser verdad."
Billie Eilish.

Carlos' POV:
Necesitaba esto. Necesitaba un descanso. Respirar otros aires y déjame llevar por mi tierra. Extrañaba el frío de la mañana y el calor de la noche por la cocina a leña de mi tía. El olor a pan recién hecho de mi mamita, me mataba.

Hace dos semanas que estaba en Punta Arenas y no me quería ir. Les juro que mi casa estuvo todos los días llena por mi familia, y eso me hace apreciar más el cariño que me tienen. Iba a ver al Seba cada vez que podía, porque sé que cuando me vaya será difícil verlo seguido. De hecho ahora estaba con el.

—Ya hemos hablado mucho de mi. Cuéntame una weá tuya poh.—Me dijo con un chasquido de dedos.

—Tshaa... que andai' vio' oh.—Le dije cagao' de la risa.

—Vo' estás enganchao' No te hagai' el weón.—Me dijo serio el Sebita. Era cierto, todavía andaba medio bajoneao', pero no se lo iba a demostrar a mi gente. Na' que ver la weá poh.  De hecho ayer supe de la Sarah, resulta que el Cister  fue a Miami y se encontró con ella en la disco,me dijo que se veía bien, y que está viviendo con su hermana, cosa que me dejaba bastante tranquilo. No saber dónde estaba viviendo me estresaba un poco.

—Na' Sebita. Yo estoy enfocao' en otras weás. No tengo tiempo pa' eso.—Le dije dándole unas palomitas en su espada. Aunque no se lo dijera mucho, me encantaba estar con el, obvio que me lata daba verlo así, pero es la realidad que le tocó y yo se que él se esfuerza caleta por salir lo antes posible, es por eso que le tengo un regalo.

—Ajá...—Este se las cachaba todas. Pero no le iba a decir tampoco, no porque no quisiese si no porque entre menos piense en ella, más fácil será olvidarla. Ella ya se fue, comenzará otra vida allá y conocerá personas. Hombres sobre todo, se me aprieta la mandíbula de solo pensarlo.

—Hermanito, te tengo que contar una weá'.—Comenté cambiando de tema. Este estaba comiendo unas papitas que le traje.

—Pero no te asustí' sipo. Si no es nada malo.— Le dije al notar que se estaba preocupando. El siempre me aconseja y me anima en todas mis weas, aunque sea de lejos.

—Di luego la weá.—Dijo impaciente.

—Daré un show en la cárcel Seba.—Se le desfiguró la cara, cosa que me pareció raro, pensé que le gustaría la idea.

—No te gustó la idea.—Le dije entrañado.

—No es eso...—Dijo alborotando su cabello.

—Es solo que es peligroso hermano, la cosa ya no está como antes.—Comentó preocupado.

—Sebita. No te preocupes... No me va a pasar nada. Los guardias nos protegerán, a mi y a los bailarines.—Le dije relajado. Ayer pasamos por la escuela donde estudié de chico, e hicimos un casting para el show, ya que necesitaba bailarines.

—Yo se que aunque te diga que no, lo harás igual. Porque saliste bien terco, pero hagan todo con cuidado.—Me dijo tranquilo. Mire la hora y me dije.

— Sebita me tengo que ir, pero volveré dentro del rato para la prueba de sonido. —Me levante y me despedí.

En la casa de mi tía, almorcé y hablé con los cabros, para afinar los últimos detalles. Estaba súper emocionado por eso. Yo se que habían cometido errores graves, pero si podía hacer algo para mejorar su día, lo haría.

—Mi sangre, ya tenemos todo listo. Tenemos que ir nomás ahora. Lo único si es que el show se hará en la plaza.—Dijo apenado el Gera. Hice todo lo posible para hacerlo dentro, pero con todo el material que tenemos que llevar, nos dijeron que no ya que podría ser muy arriesgado tanto para ellos, como para los cabros. Más tarde hablaría con el Sebita.

—Vamos nomás. Con que escuchen los temitas me conformo.—Les dije haciendo sonar mis manos. Cantaría varios temas nuevos y el repertorio de las viejas. Además repartiría canastas familiares para todo el que vaya. No se habla mucho de esto, pero en Punta Arenas hay mucha pobreza.

—¡¿Como lo están pasando?!—Les grité. La plaza estaba repleta de gente disfrutando del Show, no sabía si se sabían mis canciones o no pero me encantaba ver a familias completas felices por pasar un momento juntos. Habían traído hasta carteles, peluquitos que tanto me encantaban.

—Antes de terminar quiero agradecerle a mi hermano, por apoyarme en todas mis weas...—Dije con la voz temblorosa. Me emocionaba cuando hablaba de él, y me encantaba contar su historia como ejemplo de vida.

—Sin ti hermano y mi mamita... Esta weá no hubiese funcionao' Te amo Sebita.—Continué secándome mis lágrimas. Y la gente empezó a gritar.

—"Se-bi-ta"."Se-bi-ta".— Y por detrás empezó a sonar "Na Na Na".

El show fue una locura. Llevamos a unos humoristas, y a unos freestylers para entretener al público antes que yo saliera. Pero aparecía de vez en cuando.

—Hijo, mira quien vino.—Dijo mi mamá emocionada Caminando con mi hermano mayor, el Cesar.

—Cesar weón, tanto tiempo.—Le dije abrazándolo dándole unas palmadas en la espalda. No lo veía hace años, igual que a mi otros dos hermanos más. Ellos ya están casados y tienen a su familia.

—Bien hermanito, contento poh...—Y seguimos hablando por un rato más. Me  contó que estaba bien, con su familia.

Estas han sido dos semanas maravillosas junto a mi gente y a las personas que quiero. Mi mamita, mi mamita es pulenta, siempre apañando en todas mis ideas. Ya mañana volvería a la realidad, pero con las pilas recargadas pa' lo que se viene.

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Este capítulo lo iba a subir el 23 pero sentí que estaba medio fome, así que viene con dos capis más. Feliz navidad. Besos.