Al Revés [Furry Yaoi] [Terminada]

Incómodo.

[Helio]
Me siento un poco nervioso, podría decirse que tendré mi primera cita con Fénix, pero no son nervios de emoción como cuando fui al Fest-Can con Hilal, me siento raro en estos momentos.

Creo que debería de intentar poner de mi parte, es obvio que el lince está muy emocionado por poder salir juntos. Es lo que tanto había esperado, pero no puedo evitar estar pensando en el husky, tal vez en verdad si sentía algo por mí, pero no comprendí que para él aun es difícil expresar lo que siente.

Miro a un lado de mi cama, ahí está el peluche que gané para él, quizá pueda ser una excusa para verlo luego.

Mis madres me han dejado salir, antes de ir mi madre jaguar me abraza:
— Es bueno que al fin hayas arreglado las cosas con ese chico, la verdad me pareció lindo desde el momento que vino a casa para ayudarte, sé que podría ser alguien bueno en tu vida.

Eso de verdad no lo esperaba, ellas estaban esperando a que mi novio fuera Hilal:
— En realidad... no es Hilal con quien estoy saliendo, creo que no les mencioné que mi novio es Fénix, el lince.

Se ponen un poco serias, mi madre loba trata de sonreír:
— En todo caso, solo tú sabes lo bien que te sientes a su lado, así que no podemos hacer más que respetar tu decisión.

Al parecer ninguna de las dos esperaban que mi novio fuera el lince:
— Gracias, bueno, voy tarde. Nos vemos después.

Siento que no tomé la mejor decisión, aunque puede que solo sea por una mala impresión mía, tal vez pasando más tiempo al lado de Fénix pueda sentir más amor.

Quedamos en que ambos nos veríamos en un restaurante, por ello me he arreglado de una manera decente, espero que no esté cometiendo algún error.

Cuando llego al lugar, veo que en la entrada de aquel restaurante ya está el lince esperándome, creí que al verlo mi corazón se llenaría de alegría, pero la verdad es que lo siento como antes cuando llegaba y solo era un amigo al que quería.

Como era evidente, al verme se llena de alegría y corre para abrazarme. También lo abrazo, trata de darme un beso que por mero reflejo evito:
— ¿Pasa algo? Parece que olvidaste que era tu novio.

Niego suave con la cabeza dando una leve sonrisa:
— Disculpa, es que esto de tener novio es nuevo y de verdad sentí que no era correcto, aunque ya lo mencionaste, somos pareja.

Un poco a la fuerza correspondo el beso, se mira más tranquilo, más yo no lo estoy del todo.

Al entrar veo a alguien, me acelera un poco el corazón, quise acercarme para confiar que fuera Hilal, más cuando voltea puedo ver que no es él, aunque es un husky de pelaje blanco con confección similar a la de él, tiene ojos oscuros, los de Hilal son grises.

Fénix lo ha notado:
— Parece que habías visto a alguien, creí que estarías a punto de acercarte a saludar.

Río leve tratando de estar calmado:
— Descuida, estoy distraído el día de hoy, no me tomes mucho en cuenta.

Ya que Fénix había reservado una mesa para los dos solo fuimos a con una recepcionista quien nos dirigió a nuestra mesa.

Al sentarnos veo a los ojos al lince, más no sé qué decirle, mi mente está en otro lado, aún pensando en la reacción de Hilal.

[Fénix]
Noto que Helio ha estado extraño, ¿qué le sucede? Se veía tan feliz de ser mi novio, pero ahora hace como si le diera igual lo nuestro.

Eso me hace sentir mal, tomo sus manos, eso hace que se enfoque más en mí:
— No puedes seguir ocultando que algo sucede, cada vez lo haces más evidente, ¿qué es lo que te tiene pensando? Lo que sea no nos permite tener una tarde agradable, se supone que deberíamos de divertirnos y pasarla bien, platicar, reír, lo que sea.

Un mesero llega para ofrecernos el menú, después de darle las gracias y se haya retirado Helio suspira:
— Perdona que no esté actuando como debería, simplemente mis pensamientos y sentimientos son tantos que no puedo estar tranquilo.

Eso me pone serio, creo saber qué sucede:
— Me hieres con eso, es por ese estúpido perro de nuevo, ¿verdad? Estabas tan feliz cuando me pediste que fuera tu novio y ahora casualmente estás pensando las cosas, no soportaste la reacción que tuvo y ahora me vas a decir que lo nuestro fue un error... ¿no es así?

Eso hace que mis ojos se pongan llorosos, se levanta para poner una silla a mi lado y sentarse conmigo dándome un abrazo:
— Lo que menos quiero es lastimarte, has sido lindo conmigo, por supuesto que aprecio todo esto, pero no estoy en mis mejores días. Por cierto, deberías de dejar de expresarte así de Hilal, no te ha hecho nada.

Encima lo defiende:
— Deja de protegerlo, ya no le tomes interés, ahora debería de ser yo quien esté delante de cualquier persona, ¿cómo esperas que me exprese? Lo admito, tengo celos de él, porque desde un principio te has interesado en acercarte cuando conmigo no fue así.

Besa mi mejilla:
— Solo digo que no debes de comportarte de esa manera, además, no deberías de tener celos porque el jamás querrá algo conmigo.

Hago que me suelte:
— ¿Estás conmigo porque él no quiso? Me haces sentir ahora como una segunda opción.

Se levanta molesto, nunca lo había visto así:
— No tendrías porque dudar de mí, ¿o sí? Mi mundo no tiene que girar a tu alrededor aún si somos novios, puedo tener amigos, pensar en cosas que son difíciles, tener mi vida propia, no todo serás tú. Deja de hacerte una víctima en esto, ya te dije que no te quiero lastimar, que te amo, que solo estoy distraído, ¿qué más quieres de mí?

No puedo soportar que me haga esto por lo que rompo en llanto levantándome también:
— ¿Sabes qué? Hablamos luego, ahora estás siendo muy grosero conmigo. Ya no tengo hambre, quédate si quieres, pero no me sigas.

Me voy rápido del lugar, aunque le dije que no me siguiera en verdad me hubiera gustado que hubiera salido detrás de mí.

[Helio]
Creo que no estamos listos para ser novios, fue muy apresurado.

Ahora todo el mundo me está viendo, no sé qué hacer con tadas las miradas que estoy recibiendo, creo que fui muy duro con Fénix. Lleno de vergüenza me regreso a casa tras cancelar la reservación.

Al llegar a casa solo veo a mamá loba, ella me abraza algo preocupada:
— ¿Estás bien? Llegaste muy rápido, ¿te ha plantado?

Niego con las orejas hacia abajo al igual que estar decaído:
— No es eso... Solo que me di cuenta que... Fénix no era con quien debía estar, pasamos un momento muy incómodo, y siendo que los dos somos muy energéticos ahora explotamos de tal manera que solo nos enojamos. Quiero estar en mi habitación, ¿puedo?

Besa mi mejilla y me da suaves caricias:
— Claro que puedes, si necesitas algo me avisas.

Asentí dando gracias, me voy a mi habitación. Me recuesto mirando al techo pensando sobre lo sucedido. Tomé decisiones sin esperar un poco más y he arruinado todo.

No sé de qué manera lo deba de hacer, pero tengo que terminar con el lince porque mi relación con Fénix no va a llegar lejos, creí que podría aprender a amarlo, pero eso no va a suceder, mi mente y corazón no han olvidado a Hilal.