Al Revés [Furry Yaoi] [Terminada]

Romper vínculo.

[Helio]
Estoy en casa siendo ya de noche, estoy molesto y triste por lo que he visto con Hilal, al menos parece que no notó que estuve ahí.

Nunca lo creí capaz de engañarte, me estaba usando solo para tener relaciones, a mí que le di todo hasta un nuevo hogar, casi me parece una mentira, una pesadilla lo que ha sucedido.

Pero la vida real no es un camino lleno de rosas, tarde o temprano ese lado bueno acaba para afrontar la realidad.

Hilal entra en mi habitación mientras yo estoy acostado, me acuesto de lado para no darle la cara:
— ¿No deberías de primero tocar la puerta?

Suena confundido:
— Dormimos juntos, creí que no te molestaría que no lo hiciera. Bueno, debo decir que aunque siento miedo me siento más tranquilo, tal vez pueda dormir en paz hoy.

¿Cómo se atreve a decirme eso? Bueno, no sabe que lo he descubierto y debería de quedarse así, aunque hay cosas que no puedo ignorar:
— Es mejor que durmamos separados el día de hoy, no me siento bien.

Se sienta a mi lado mientras le doy la espalda a lo que me da suaves caricias:
— ¿Qué sucede? ¿Te puedo ayudar en algo?

Quito su mano:
— Ya te dije que no estoy bien, es algo personal y deberías de irte a tu habitación.

[Hilal]
Me desconcierta la actitud de Helio, ¿qué fue lo que lo puso así? Necesitaba que me abrazara en este momento por lo sucedido, pero no creo que sea el momento indicado de hacerlo.

Me voy a mi habitación triste sin saber qué le sucede a mi lobote. Cuando estoy acostado abrazo a mis peluches pensando en Helio, no puedo hacer nada si no quiere que me acerque.

Pasa el fin de semana, estos días ha estado muy raro Helio. Al comer se veía enojado, se iba a caminar o se encerraba en sí habitación.

Sus madres hablaron conmigo preguntando si nos habíamos peleado, aunque lo único que pude responder es que estaba igual de confundido de ellas.

Intentaron hablar con él, pero también se negó a decir algo que más que no estaba bien. Ya estando de camino a la escuela mira por la ventana con cara de enfado:
— ¿Aún no estás listo para hablar?

Da un quejido:
— No tengo nada que hablar contigo.

No puedo evitar llorar un poco:
— Me duele que estés así.

Por primera vez me dirige la mirada, solo que lo hace con enojo:
— No creo que te importe tanto.

Me quedo impactado por su respuesta, su madre loba lo mira enojada por el retrovisor solo por un momento:
— Helio, esa no es manera de hablarle a Hilal, no te ha hecho nada, pídele perdón ahora.

Tras un suspiro pide perdón, pero aun así vuelve a mirar por la ventana, llegamos a la escuela y adelanta su paso, su madre me habla:
— Hilal, hoy de nuevo vamos a tratar de hablar con él, disculpa, nunca se había comportado de esa forma.

Trato de sonreír:
— Descuide, voy a tratar de arreglar las cosas con él, después de todo es mi novio y yo lo amo.

Da una suave caricia en mi mejilla extendiendo su brazo:
— Gracias por amar así a mi hijo, que tengan buen día.

Le agradezco y trato de alcanzar a Helio, cuando llego al aula veo que ya se ha sentado al lado de alguien más, yo me siento en mi lugar.

Quisiera que me dirigiera la palabra para saber qué puedo hacer por él.

[Helio]
Tampoco puedo estar a su lado, estos días ni siquiera he podido verle por el enojo que tengo.

No he podido concentrarme en nada que no sea lo que miré el sábado, tengo que aclarar las cosas.

En cuanto llega el descanso llego de manera directa con el profesor Ryan:
— Disculpe, ¿me puede permitir un momento?

Me mira con una sonrisa, no debe saber que yo soy el novio de Hilal:
— Por supuesto.

[Ryan]
Un joven lobo de una actitud furiosa contenida quiere hablarme, ¿qué es lo que querrá?

Nos vamos a un lugar a solas para hablar tranquilamente:
— ¿En qué le puedo ayudar?

Cierra sus puños:
— ¿Qué... qué relación tiene usted con Hilal?

Oh, ya me acuerdo de este joven, debe de ser la pareja de ese chico, es la hora de demostrarle lo que puedo hacer:
— Pues tenemos una relación íntima para ser honesto, dice que no es lo mismo un niño que un verdadero hombre, no tengo idea de a qué se pueda referir con eso.

Me toma por la camisa tratando de golpearme, pero no lo hace, después me empieza a soltar mientras va cayendo de rodillas llorando:
— ¿Cómo pudo...? ¿Cómo pudo hacerme esto después de todo lo que hemos pasado?

Trato de fingir empatía:
— ¿Eres algo de ese chico?

Golpea el piso:
— Ya no más...

Le doy palmadas en su espalda:
— Lo siento mucho, no sabía que decía eso porque tenía pareja, pensé que lo decía porque le gustaban mayores ya que nunca me mencionó que había alguien, pero no quiero hacerle daño, mejor me alejo de él, no quiero lastimar a uno de mis mejores estudiantes.

Se pone de pie limpiando sus lágrimas:
— Descuide, ese hombre ya no tiene nada que ver conmigo, haga lo que quiera con él, ya no me importa.

Se va muy decepcionado, eso me hace estar feliz con lo que he provocado, ese niño sabrá que yo no estoy jugando.

Ya quiero ver cómo de desencadena todo este desastre, es un pequeño placer saber que siempre iré un paso adelante, quiso sentir que la presa se podía volver depredador, no tenía idea de cuánto se estaba equivocando.

[Helio]
Tengo el corazón roto después de saber la verdad, le agradezco a ese profesor por ser sincero conmigo, incluso se demostró comprensible con mi situación.

No le voy a desear el mal a Hilal, solo que no voy a seguir siendo su pareja, ya no tiene caso seguir juntos si en verdad no siente nada por mí.

Vuelvo al salón más deprimido, Hilal trata de acercarse:
— Helio, ¿qué te pasó? Te ves más triste de lo que...

Me pongo un tanto agresivo:
— ¡No te acerques! ¿No te ha bastado todo lo que hiciste?

Parece confundido, pero entiendo que pueda ser bueno ocultando lo que está pasando, aunque debe de dolerle más que ya he descubierto lo que estaba pasando.

[Hilal]
Me fui a mi lugar dolido de la manera en que me ha tratado, nunca pensé que sería capaz de hablarme así.

No puedo concentrarme en las clases con lo que ha sucedido, cuando se terminan las clases Helio sale con prisa, se supone que volvemos caminando y aun cuando me ha hablado de esa forma, pero aun así quiero regresar a si lado.

Debemos de estar juntos en las buenas y en las malas.

Una vez que lo logro alcanzarlo apresurando mis pasos, lo jalo de su camisa:
— Helio, quise respetar tu espacio, pero ya me preocupaste demasiado, ¿qué es lo que te pasa?

Me toma las manos con fuerza:
— ¿Cómo puedes ser tan cínico? Ya sé todo lo que ha sucedido, me he enterado de tu pequeña aventura con el profesor, te vi como te dio un beso ya que te había seguido el sábado. Lo que quiero decir con todo esto es que hemos terminado, ya no somos novios.