Al Revés [Furry Yaoi] [Terminada]

Entre hermanos.

[Hilal]
Al fin papá a llegado a casa, como siempre saluda a Jack con mucha alegría, a mí a penas y me ha notado. Bueno, ya es costumbre.

Solo quiero que me ordene hacer lo que sea que necesite para después retirarme. Piensa un momento las cosas antes de hablar:
— Bueno, no hay mucho que hacer el día de hoy, ¿quieres hacer algo, Jack?

Al menos parece que me darán un tiempo a solas, si solo le pregunta a él supongo que yo no hago falta.

Esperando a que responda hace una pregunta que deja helado a papá:
— Antes de cualquier cosa, ¿dónde está mamá? Ya lleva mucho fuera de casa.

Mi padre no sabe que responder, espero que por lo menos me de las gracias después de esto:
— Ella ha salido de viaje, tuvo una emergencia. No dijo nada para no preocuparte, solo supe porque me encargó que hoy... Lavara el baño, si, eso me ha pedido hacer hoy. No dijo cuánto tardará, solo nos queda esperarla.

Mi padre se ve aliviado, pero mi hermano se molesta:
— ¿Por qué no me dejaste hablar con ella? Como siempre solo piensas en ti, bueno, esperaré a que vuelva a llamar o llegue.

Papá me mira enojado, no sé si está actuando o si en verdad se ha molestado:
— Deberías de tener más consideración con tu hermano. Ya que se ha aclarado eso, ¿quieres algo hijo?

Jack lo piensa un momento:
— Sí, vamos por un helado mientras que Hilal lava el baño.

Papá le da unas palmadas en la espalda sonriendo, siempre es más feliz al lado de él que del mío:
— Muy bien, ¿quieres manejar? Si quieres ve al auto, te alcanzo en un momento, voy por dinero.

Mi hermano sale algo emocionado, yo solo me doy la vuelta para ir por las cosas para lavar, mi padre me detiene:
— Hilal, espera.

No lo miro a los ojos, solo hacia un lado:
— ¿Necesitas que haga algo?

Tarda un poco en decir algo:
— Tú, ¿sabes lo de tu madre?

Cierto, creo que bajo los efectos del alcohol no debe de recordar nada de lo sucedido:
— Sí, me lo dijiste estando ebrio. También fui quien esa vez limpio todo y te cuidó, sé que no quieres que Jack se entere de nada, por eso también te he ayudado ahora.

Lo miro por un momento y también él ha desviado su mirada, se nota algo apenado:
— Bueno... Supongo que... Ya sabes lo que quiero decir, no te atrevas a decir nada, solo deja así las cosas. Llegaremos en un rato.

Se va, es lo más cerca que ha estado de decirme, ¿gracias ó lo siento? De cualquier forma, lo ha intentado, es un avance supongo.

Después de pasar un buen rato lavando el baño mi padre y hermano han llegado, solo guardo las cosas, antes de irme mi hermano me toma del brazo:
— Hilal, ¿podemos hablar?

Hago que me suelte:
— Sí solo quieres presumir que lo que comiste te ha encantado y que yo no fui no me interesa.

Se nota serio:
— No, de hecho, perdona por solo irme así, creo que fue porque estaba enojado. ¿Puedes ir a mi habitación?

Mi papá se acerca admirando a mi hermano:
— Es bueno saber que al menos uno de mis hijos se esfuerza por estar bien en la casa.

Sin decir más solo vamos a su habitación, nos sentamos a la orilla de su cama:
— ¿Qué es lo que quieres hablar?

Baja su mirada:
— ¿Por qué mamá prefiere hablar contigo y no conmigo?

Vaya, parece que eso le ha afectado:
— No es la gran cosa, no es que ella me quiera, solo buscan que haga todo en esta casa. No te preocupes, siempre serás el favorito para ambos.

Me voltea a ver:
— ¿Yo el favorito? Creo que estas mal, siempre has sido el favorito de ellos, todo el tiempo sobre ti, te dejan salir a cualquier lado, aún cuando fue para pedirte algo mamá se dirigieron a ti. Todo el día estoy con cosas de la universidad, tienes más tiempo para estar aquí.

No puedo evitar reír un poco:
— ¿No estarás hablando en serio? ¿Crees que llevas una mala vida? Se nota que nunca te ha tocado estar en mi posición, además, saber la verdad aplastante.

Se molesta:
— Por supuesto que estoy hablando en serio, no te burles de mí, ¿y de que verdad hablas?

Solo desvío la pregunta:
— ¿Qué no lo ves? Tan acostumbrado estás a recibir todo de nuestros padres que necesitas que toda su atención esté sobre ti. Recuerdo que de niños siempre iban a cobijarte, mamá te cantaba y dormías tranquilo... Yo a veces los esperaba, pero solo decían que pagara las luces. Si había truenos fuertes podías dormir con ellos, a mí me regresaban a la habitación para que aprendiera a dejar de temer por todo. Siempre has estado por delante de mí, tus logros, tus cumpleaños, tu simple existencia es algo que a nuestros padres hacen felices, yo siempre tengo que hacer de todo en esta casa.

Pone su mano en mi hombro:
— No lo había visto de esa manera, ahora que lo dices, creo que siempre fue de esa forma. Estaba tan metido en mi mundo que nunca noté cuántas veces te hicieron a un lado para cuidar de mí. Encima tienes que tolerar todas las cosas que te hago, ¿por qué nunca dices nada de esto?

No me molesto en fingir una sonrisa, solo sigo serio:
— ¿Crees que de algo serviría? Aún que lo intente no voy a lograr nada, deberías de dejar las cosas así.

Siento que me abraza, es raro, nunca lo había hecho:
— Per-perdón Hilal, nunca he sido un buen hermano para ti, siendo un hermano mayor debería de ayudarte de vez en cuando y no he hecho más que complicarte la vida con bromas tontas.

Aun cuando esto pueda parecer conmovedor para mí no lo es, tal vez ya es demasiado tarde para esto:
— Por mucho tiempo esperaba algo así, ahora que sucede... No lo sé, es raro sentirlo.

Se separa de mí:
— Tienes razón, he tardado mucho en hacerlo, ¿te parece si después hacemos algo juntos? Quizá no te agrade del todo mi compañía, pero deberíamos de intentar algo.

Está en lo cierto, no me agrada mucho estar con él:
— Puede ser, por ahora solo deja que descanse, he tenido días movidos, muchas emociones. Ha sido mucho para mí.

Me sonríe:
— Lo que quieras hermanito, ve y descansa.

Me retiro sin saber que decirle, solo estando en la puerto me giro a verlo un momento:
— Gracias, Jack.

[Jack]
Vaya, no había notado lo triste que puede ser mi hermano, nunca le he dedicado el tiempo que se merece, aun cuando se encarga a veces de ayudarme.

Incluso me ha cubierto, como en aquella ocasión que llegué a las dos de la mañana, ya que nuestras voces no eran tan diferentes solo tomó mi lugar para convencer a mis padres de que estaba dormido en casa, no tengo idea de cómo se las arregló para eso.

Después estuvo despierto para abrirme la puerta a escondidas, al amanecer lo levantaron temprano para hacer labores en casa y ni siquiera le di las gracias, pobre de mi hermano, quiero arreglar las cosas con él.