Lamento.

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[Raimundo]
No puedo dejar de pensar en Hilal, estoy en mi habitación, estoy castigado en casa, también suspendido, así que no hay mucho que pueda hacer.

No puedo evitar pensar en el pesado, en todo lo que me ha traído hasta este punto, los recuerdos a veces solo son sueños que parecen irreales, otras veces solo son pesadillas que nos atormentan.

Hace años ese husky era solo uno más del montón, tan parecido a los demás niños, hasta que un día se cansó de actuar de manera tan positiva.

Recuerdo que estaba llorando, era un día lluvioso, los demás solo lo hacían de lado lo que lo llevó a la desesperación, pude escucharlo ya que estaba cerca:
— Ya no quiero nada con nadie, nadie quiere ser mi amigo.

Quería acercarme a él, para ese entonces James ya era mi amigo:
— ¿Qué haces? Si sigues ahí te vas a mojar y después a enfermar.

En ese entonces creí que podría ser su amigo, después de todo necesitaba a alguien a su lado:
– ¿No crees que deberíamos hacer algo?

Recuerdo la expresión del oso, confundido de mi pregunta:
— ¿Del inadaptado? Seríamos la burla de todos si llegáramos a ser amigos de él.

Para ser niños todo era más sencillo:
— Vamos a entrar al equipo de fútbol, no hay nadie que nos diga algo al ser famosos con eso. Incluso podría ser bueno para ese niño.

Con la lluvia se habían formado varios charcos, quise llegar de una manera amistosa saltando en aquellos charcos.

Creí que eso le haría gracia, más con los saltos que daba empecé a salpicar por todas partes, di un salto muerto cerca lo que hizo que lo mojara, todos pensaban que se trataba de una broma.

En realidad no era lo que todos pensaban, más muchos se rieron de él, empezaron a verme como alguien "genial", ya que ese sentimiento efímero me puso en lugar alto antes los demás.

Eso me hizo fingir que en realidad era mi plan, el oso se me acercó:
— Buena esa amigo, por un momento creí que en verdad querías ser amigo de ese perdedor.

Eso hizo llorar más a Hilal:
— Eres alguien muy malo Raimundo, ¡te odio!

Salió corriendo de ahí, los demás me llevaron a su lado para felicitarme por mi "broma", yo solo quería acercarme.

Desde ese momento me fue llenando más hacerle sufrir con alguna broma, pero esta vez ya era intencional. Me hizo sentir tan especial ante los demás que no me detuvo hacerlo una y otra vez.

Sin embargo, todo eso fue cambiando con el tiempo. Todos me empezaron a respetar ya fuera por la persona que era o por miedo, pero Hilal era el único que no le importaba quien fuera, siempre siguió su propio camino, no estaba conmigo por interés o algo parecido.

Tal vez fueron mis bromas lo que lo haya alejado, a la vez eso le dio algo diferente al resto. Hubo una ocasión especial, era uno de nuestros primeros bailes, para ese entonces la diferencia entre nosotros no era mucha hablando físicamente.

Lo que sucedió es que había resbalado y el pantalón se me había roto, fue una gran vergüenza para mí, él fue el único que lo había visto, eso me tenía triste, aún así tomó mi mano he hizo que fuera con él.

Estando en los baños cuidó que no hubiera nadie:
— Espero no arrepentirme de esto, vamos a los baños uno al lado de otro, yo te paso mi pantalón y te lo pones, tú me das el tuyo y ese voy a usar, al final del baile me lo devuelves y listo.

Eso fue de admirar para mí, aunque le había hecho daño en el pasado no le dio importancia a eso, solo miró que había una persona que necesitaba de ayuda.

Así lo hicimos, ¿qué hizo yo? En cuanto entramos le hice evidente que el pantalón que era mio estaba roto, se burlaron de él por lo que no pudo disfrutar esa tarde estando solo sentado.

Aun así con amabilidad regresó conmigo para devolverle su pantalón, estuve a punto de darle las gracias, pero me sentí tan mal que ya no pude esperar a que él saliera del baño, solo me fui sin decir más.

Desde ese momento me di cuenta que Hilal era un buen hombre, alguien que quería a mi lado. He engañado a todos haciendo creer que he salido con chicas para pasar el rato, más nunca he hecho nada con ninguna. Incluso la "fiesta" que tuvimos hace poco cuando me regresé del parque acuático solo miraba a los demás diciendo que no había alguien a mi altura.

En todo momento Hilal estaba en mi mente, me siento un poco sucio aceptando que he tenido fantasías con él mientras estoy a solas.

Cuando nos volvimos novios quería cumplir cada una de esas fantasías que tenía, como siempre solo estaba cometiendo errores. El simple hecho de recordar su cara llena de temor en cada escenario que tuvimos solo me hace reflexionar en todas las cosas malas que hice.

En cualquier momento me pudo decir que ya no quería estar conmigo, pero trató de soportar todas las bajezas que le hacía. Nunca sabré el motivo de ello, pero lo que sé es que sólo yo tuve la culpa de orillarlo a lo que estuvo a punto de hacer.

Al menos tuve la oportunidad de tenerlo entre mis manos, lastima que no supe aprovechar el tiempo que lo tuve. Me confíe de que era mi novio, pensando que así sería desde ese momento en adelante que se me olvidó algo que era importante, que debí de seguir enamorándolo.

Al ser mi primer novio solo estaba acelerando todo, no es como esas historias donde se enamoran a primera vista y aunque tienen problemas tienen un final feliz. La vida es más que solo eso, es estar con alguien para comprender sus sentimientos, lo que piensa, sus molestias, yo solo estaba enfocado en mi propia satisfacción.

Hay muchas cosas que pude mejorar al ver esas alertas sobre lo mal que se llegaba a sentir, pero estaba cegado por lo que yo sentía, esa emoción como al estar en los vestuarios al verlo vulnerable y casi desnudo al igual que yo, ó en el auto, nunca le pregunté si estaba listo para tener relaciones, solo lo reclamé como si fuera un objeto.

Nunca encontraré a alguien que sea tan auténtico como lo es Hilal, a él no le importa encajar con los demás, muy diferente de mí que gracias a ser reconocido me volví propenso a la opinión de los que me rodean.

Su hubiera sido más como él tal vez hubiera durado más tiempo de novio con Hilal, fui muy grosero.

Todas estas cosas son detalles que pienso mejorar para mi siguiente relación, pero ahora no, no puedo sacarlo de mi corazón, eso lleva tiempo.

Daría lo que fuera por tenerlo de nuevo entre mis manos, no con el fin de hacerle lo que estuve a punto de hacer, sino que esta vez tratarlo con cariño, abrazarlo una vez más, besar su frente haciéndolo sentir tranquilo como esos momentos en que lo sentaba en mis piernas, más eso ya no va a volver.

A veces somos demasiado tontos como para alejar a alguien que amamos, todos somos muy irónicos de no valorar a alguien grandioso hasta que le perdemos.

Mi gran pérdida, es Hilal.

Al Revés [Furry Yaoi] [Terminada]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora