22.Kylian

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[Narra el Dibu]

Había llegado el momento de irme a cenar con Amelie, de nuevo. La verdad es que no tenía tantas ganas de ir, pero creo que se la debía, no me había comportado muy bien con ella.

Me fui sin despedirme, no le contesté los mensajes, tampoco quería rechazarla así sin más, además, ella era una persona muy agradable, no se merecía que la tratara así.

Tenía un poco de dudas sobre cómo se iba a tomar Kylian el hecho de que yo iba a volver a salir con ella, pero no dijo demasiado.

Aunque cuando nos vimos con ella él mostró expresamente su desaprobación, ahora que me había ido él ni siquiera me miró, cómo si no le importara, quizás él realmente no tenía sentimientos románticos por mí, y yo me estaba haciendo el perseguido, no estaba seguro, quizás simplemente no le gustaba.

Pero supongo que tarde o temprano lo iba a entender, mientras tanto, solo hice lo que tenía que hacer, tomé un taxi y me fui hacia la casa de Amélie.

Al final ella había decidido que quería cocinar para mi, y así impresionar me con sus habilidades culinarias.

...

Llego a su casa, y para mí sorpresa, ella estaba esperando en la puerta, supongo que estaba entusiasmada.

Tenía puesto un jumper jardinero con terminación en pollera, y una camisa debajo. A pesar de que era algo un poco más casual le quedaba bien, pero a este punto no tenía mucha importancia para mí, me daba igual...

Apenas pago el taxi ella me da un gran abrazo, para después agarrarme del brazo y llevarme hacia su casa.

...

-Emiliano ¿Te gustaría tomar un poco de vino? -pregunta la francesa.
-Nunca le dije que no a alguien que me hizo esa pregunta-le respondo en broma.
-De verdad estoy feliz de volverte a ver, por un momento pensé que ya no me ibas a hablar más... -me dice, mientras me acerca la copa de vino.
-Perdón... Si te soy sincero, la verdad es que no sabía que decirte- me disculpo, avergonzado.
-Está bien, no pasa nada, y no tenes que preocuparte tanto por cómo actuar conmigo- dice sonriendo.

Su respuesta me había hecho sentir aún más culpable, porque la razón por la que no le había respondido no era porque estaba inseguro sobre cómo actuar frente a ella, era más sobre la falta de interés por mí parte... Todos mis pensamientos estaban dedicados a alguien más... y ni siquiera la había podido rechazar correctamente.

-Cambiando de tema, no sé que habrás almorzado, pero preparé una tarta, espero que te guste- dice Amélie, acercando me un plato.

Para mí sorpresa, estaba muy rico, nunca había conocido a una persona que cocinara así de bien.

-Wow, de verdad está muy bueno ¿En serio lo hiciste vos? -le pregunto.
- Sí, ¿No te había contado? Soy cocinera, amo mucho mí trabajo, y bueno, tiene la gran ventaja de que puedo preparar cosas para las personas que me gustan... -

La comida estaba riquísima, pero lo último que dijo hizo que me atragantara, no me sentía cómodo con eso.

Aún así pasamos la noche igual que la otra vez, negar que ella era divertida sería mentir.

Después de terminar de comer ambos lavamos los platos juntos, y cómo todavía era temprano, decidimos ver una película.

Supongo que la película estaba bien, era romántica, aunque no acostumbraba a ver ese tipo de películas.

Pero de un momento a otro, mientras seguíamos viendo la película, ella se empieza a acercar demasiado a mí, empieza a acariciar mi pierna y entonces dice:

-Emiliano... Me gusta mucho estar contigo... -en voz baja.

Luego de pronunciar esas palabras rápidamente pega sus labios a los míos, y cuando hizo eso, en lo único que pude pensar fue en Kylian.

De inmediato la tome de los hombros y separé su cuerpo del mío. Me levanté del sillón y reaccioné mal, casi cómo si hubiese cometido el peor de los pecados.

Aunque pueda verse feo, casi como un reflejo, froté mis labios con la palma de mi mano, intentando limpiarlos. Era una estupidez, porque anteriormente habíamos hecho más que besarnos, pero ahora no quería que me tocará.

-¿Qué te pasa? -le pregunto enojado.
-¿A mí? Fuiste tú el que reaccionó mal de golpe ¿qué pasó? -
-Yo... -me doy cuenta de que probablemente estaba actuando mal, y ella tenía razón - Dios, perdón... Esto no va a funcionar-
-¿pero por qué decis eso? Pensé que teníamos química... -cuando dice esas palabras me doy cuenta de que tenía que asincerarme con ella, incluso conmigo mismo.
-Necesito... Perdón. Necesito respirar un momento-

Entonces me dirijo al balcón de su casa, necesitaba respirar un momento. Todo esto me había dejado los pelos de punta.

Había aceptado venir, pero yo no quería esto, en primer lugar había aceptado por la culpabilidad que sentía por haberla ignorado, y aunque en esa vez que cenamos juntos pensé que ella era linda... Aunque en algún momento pensé en eso...

Todo eso que había pensado se veía como una estupidez, porque ahora, aunque fuese difícil de confesar, para mí, nadie se comparaba a Kylian...

Me costaba entender cómo alguien podía ser tan lindo, podría pasar el día entero solo, viéndolo, estar con alguien más no tenía sentido.

No quería que nadie más me tocara, tampoco que me besara, ni siquiera quería pasar el tiempo con alguien más, quería dedicarle cada uno de mis segundos a Kylian.

Él era lo único que ocupaba mis pensamientos día y noche, lo único que parecía tener sentido para mí era pasar el resto de mis días junto a él.

Casi cómo un volcán de sensaciones, mis sentimientos colapsaron en ese momento, mis deseos, mis inseguridades...

Y realmente era difícil de entender para mí, pensé que él me iba a corresponder, pero cuando me fui él ni siquiera me miró. Quería que me dijera que me quedara, yo no quería venir, quería quedarme con él... Pero quizás, no sé, yo le estaba molestando...

Y aunque todo eso me tenía confuso, en realidad no importaba, porque había algo de lo que estaba seguro, a mí me gustaba Kylian, él es el único a quién quiero ver, con quién quiero estar, y tenía que ser sincero con ella...

Continuará...

la copa es tuya, igual que mi corazón ["Dibu" Emiliano Martínez x Kylian Mbappé]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora