Capítulo 41

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Declaro inaugurados los últimos capítulos de La casa del Gym

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No seré tu primer amor, pero si la mejor de tus historias.

Polo Ferreira.

Dilan Hidalgo

Un intenso nerviosismo se apoderó de mi. Me encontraba en frente de Polo, mi amor del pasado, mi Polo de toda la vida. No sabría explicar con claridad todo lo que sentía exactamente en estos momentos, ¿enojo, resentimiento, alegría?. Solo sabía que estaba muy cansado y lo que más deseaba en estos momentos era poder darme un baño.

─¿Cómo estás?─ continuó, tratando de acercarse pero lo detuve colocando la palma abierta de mi mano delante.

─Estoy muy bien ¿y tú?─ inquirí lo más tranquilo y natural posible.

Polo me observó de arriba a abajo, completamente confundido, meditabundo─. Estás diferente─ musitó.

Esbocé una cálida sonrisa─. Soy diferente Polo, el Dilan de hace un año murió en este mismo aeropuerto.

─Pero...─ una voz chillona, que no perdía ese acento francés y que tanto me gustaba lo interrumpió.

─Mon amour─ dijo Colette antes de abrazarme─. Joder, hay que ver lo fuerte que estás─ rió.

─Supongo─ llevé una mano a mi nuca.

─Estoy muy feliz de que hayas vuelto─ añadió.

─Estamos─ terció María Isis.

─Amor─ Kyle se acercó y juntó nuestros cuerpos agarrándome por la cintura─. ¿No me presentas a tus amigos?─ dijo refiriéndose a los recién llegados.

─A, claro, Kyle ellos son Colette y Polo, mi amiga y...mis amigos.

─Tu ex ¿verdad?─ miró al chico.

─Si─ contestamos Polo y yo al unísono.

La situación no pudo volverse más incómoda, di gracias a María por romperlo.

─Chicos deben estar muy cansados, será mejor que nos vayamos ya.

─Si─ dijo Kyle─. Es lo mejor─ pasó un brazo por mi hombro y no se por qué pero me resultó gracioso.

Polo no dijo nada más, solo se marchó, escuché que realizó una llamada a un tal Peter, pero me daba igual.

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