Una leona y una serpiente.
Enemigos de sangre.
Un amor prohibido.
Una historia totalmente diferente.
"𝘚𝘰𝘭𝘰 𝘭𝘢 𝘭𝘶𝘯𝘢 𝘴𝘢𝘣𝘦 𝘭𝘰𝘴 𝘮𝘰𝘮𝘦𝘯𝘵𝘰𝘴 𝘲𝘶𝘦 𝘩𝘦𝘮𝘰𝘴 𝘷𝘪𝘷𝘪𝘥𝘰 𝘺 𝘭𝘢𝘴 𝘷𝘦𝘤𝘦𝘴 𝘲𝘶𝘦 𝘩𝘦 𝘴𝘶𝘴𝘱𝘪𝘳𝘢𝘥𝘰 𝘱𝘰𝘳 �...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
- No quería inflarla, pero perdí el control – comentó Harry mientras caminábamos por los pasillos del tren buscando algún sitio para sentarnos.
- Genial – respondió Ron.
- Oye no es divertido Ron – le fulminé con la mirada – Harry tuvo suerte de que no le expulsaran.
- Suerte de que no me arrestaran – aclaró Harry
- Aun así fue genial – Ron se rio, rodé los ojos porque con él no se podía hablar algo serio.
- Ven, aquí hay lugar – le indiqué a Harry al mismo tiempo que le señalaba un cubículo donde se encontraba una persona sentada durmiendo, pero por la apariencia puede que sea un nuevo profesor de Hogwarts
- ¿Quién será él? – preguntó Ron mientras se sentaba a lado mío.
- El profesor R.J. Lupin – respondí
- ¡Sabes todo! – exclamó el pelirrojo, mira a Harry - ¿Por qué lo sabe todo?
- Está escrito en su valija Ron – le respondí cansada, porque ya me estaba cansando la actitud de él cuestionándome todo lo que digo
- ¿Creen que esté dormido? – preguntó Harry mientras le miraba.
- Eso parece, ¿Por qué? – respondí mientras le miraba extrañada, porque si Harry decía eso es que nos quiere decir algo importante que nadie debe escuchar.
- Tengo que decirles algo – se levantó, cerró la puerta y se volvió a sentar – Desde que llegué al Caldero Chorreante, Fudge me trató extrañamente bien y al final me dijo que me cuidara y que no estuviera solo, sin embargo, eso lo noté muy extraño, y no fue hasta que hablé con tu papá Ron, que supe el motivo de todo. Él me comentó que Black aún sigue siendo un fiel sirviente de Voldemort y eso le lleva a pensar que yo soy el único obstáculo para que Voldemort regrese al poder, por ese motivo él escapó de Azkaban para encontrarme y matarme.
- A ver si entendí – habló Ron pausadamente tratando de procesar todo lo que nos acaba de decir Harry – ¿Sirius Black escapó de Azkaban para encontrarte?
- Sí
- Pero van a atraparlo, todo el mundo está tras él – comenté para que el ambiente bajara un poco la tensión.
- Seguro – respondió Ron – aunque nunca nadie había escapado de Azkaban y es un asesino maniático y peligroso.
- Gracias Ron – le dijo sarcásticamente Harry, mientras que yo lo miraba mal.
Harry y Ron después de esa conversación decidieron cambiar de tema y hablar de Quidditch, mientras yo bajaba mi mirada al libro que tenía en mis manos, donde se encontraba una carta muy importante que me había llegado hace una semana.