Guerra de diamantes

Capítulo 64. 💎

Regresaron a la casa y Lali fue junto a su hijo. Lo cargo acercándolo a su pecho. Amaba estar cerca de él, Bruno y Peter eran lo más importante para ella. Sonriendo giro a ver a Euge que la miraba con una sonrisa, pero notaba la tristeza en su rostro. Lali sabía lo que estaría sintiendo. Ya que sí ella perdiera a su hijo, todo su mundo se vendría abajo. Se acercó a Eugenia y le acerco al bebé.

— Puedes cargarlo. — dijo.

— ¿Estás segura?

— Claro. Eres su tía, no tienes que pedirme permiso para cargar a tu sobrino.

Eugenia sonrío emocionada y tomó al pequeño entre sus brazos. Aunque lo había cargado antes, no era siempre y saber que Lali estaría de acuerdo que ella cargaba a Bruno. La hacia emocionarse. Lo miro con una emoción, el bebé la miraba con una sonrisa.

— Serás una buena madre cuando tengas uno. — Eugenia miro a Lali. — perdón no quise....

— Entiendo lo que quisiste decir. La verdad antes no deseaba ser madre, pero ahora todo es diferente. Sí deseo ser madre, pero todo a su tiempo. Bruno es un hermoso niño, se parece tanto a ti, como a Peter.

— Yo siento que se parece más a Peter. — dice acariciando su delicada mejilla. — todavía no me creo que hayamos hecho esto.

— Peter y tú hacen una gran familia.

— Con Nico lo haces también. — Euge sonrío. — ¿lo amas de verdad?

— Sí. Nico es todo para mí, la verdad no pensé que amaría a alguien más, pero así fue. Nico me hizo sentir que si puede haber amor a pesar de todo.

Estuvo un rato más con el pequeño ya que Lali recibió una llamada. Mirar a Bruno le hacía sentir con ganas de ser madre. Sólo que se tomaría su tiempo. Bruno quedó dormido en su pecho y ella empezó a cerrar los ojos hasta quedar profundamente dormida en el mueble.

Lali entro a la sala y sonrío al ver la escena y tomo una foto. Estaban arreglando sus diferencias y eso le emocionaba. Escucho la puerta de la entrada abrirse y Peter entro en la sala y miro también la escena.

— Hola amor. — le dio beso. — me sorprende ver qué están dormidos.

— Eugenia se nota que ha cambiado mucho. — dijo. — me alegra no haberme seguido llevando por el odio.

— También me alegra amor.

— ¿Cómo te fue?

— Pues Nico nos dio la noticia que me dejaría al mando de la empresa. — Lali lo miró sorprendida. — yo también puse esa cara. Dijo que lo suyo no era estar a cargo de una empresa naviera, si no de sus hoteles. Dijo que yo era el indicado de llevarla. Así que me dejó al mando de todo, solo vendría cuando hiciéramos juntas, pero todo lo relacionado me lo dejaría a mí.

— La verdad me sorprende. Me alegra que también Nico dejó atrás su venganza.

— La verdad entiendo su odio, nunca creí que mi madre le haría algo así. — Peter sintió un nudo en la garganta. — saber el daño que le causó a mi hermana, solo porque no le gustaba Nico por su orígenes. Nunca imaginé que ella hubiera hecho tanto daño. También. Saber lo que te hizo.

— Ya amor. No dejemos que los recuerdos no arruinen el momento. Tu madre ya no está más, lo mejor es que la recuerdes con los buenos momento.

— Tienes razón. — la abrazó. — ¿Como te sientes con lo de mañana?

— Me siento nerviosa y extraña. Ver la película de Gastón y saber que no está más aquí.... ¿Crees que me hubiera perdonado por lo que le hice?

— Claro que sí, amor. Gastón era un buen hombre, nunca fue alguien que dejara que su odio lo tomara, sé que si no hubiera muerto, nos hubiera perdonado y aceptado que nuestro amor es muy fuerte.