🚔.5.🚔

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Jungkook había estado hablando con Ben durante gran parte de la noche, Yoongi prefirió no decirle nada cuando a la mañana siguiente se levantó con los ojos hinchados y ojeras marcadas.

Los hermanos tenían un carácter parecido y eran bastante reservados con respecto a su vida privada, aunque normalmente siempre salían las cosas a la luz. Se tomaban su tiempo y ambos sabían que tarde o temprano hablarían de lo que les preocupaba o de lo que ocurría.

Por el momento Jungkook no le preguntaba sobre Jieun, así que Yoongi tampoco le preguntaría qué estaba pasando con Ben.

Desayunaron en silencio y el menor salió de la casa con el mayor a pesar de que aún no entraba a clases, quería pasarse a ver si el gimnasio estaba abierto para inscribirse y poder asistir a la tarde noche, si era posible.

Los hermanos se despidieron en la esquina de la calle que daba al gimnasio que Boyoung le enseñó ayer y Yoongi se quedó un rato mirando cómo se alejaba su hermano, soltó un suspiro y se marchó antes de que el chico entrase en el lugar.


Cuando Jeon Yoongi entró en la comisaria pareció que varios se callaban de repente, fingió no darse cuenta y tras un escaso saludo se dirigió al fondo del edificio, justo donde compartía oficina con un par de agentes más que no estaban.

Se sentó en su silla, abrió el archivador que tenía sobre la mesa y leyó los últimos casos y la orden del día. No había demasiado por hacer, así que podría tomárselo con tranquilidad, así no sentiría la presión de los demás mirándolo por la cristalera cuando ya no tenía nada que hacer y no iba a ver a Jieun en un descanso.

Hacía un año que la comisaría había sido reformada y varias de las paredes gruesas se habían cambiado por enormes cristales, que si bien tenían cortinas, no se solían usar.

Según los de arriba era para que hubiese mejor ambiente de equipo, a Yoongi le pareció una reverenda estupidez.

Miró hacia fuera mientras esperaba que se cargara el programa recién abierto y vio que sus compañeros seguían hablando como antes de que él llegara, al girar su cabeza hacia la izquierda pudo ver que del despacho del comisario salía Seungyeon sonriente y con ambas manos sujetas hacia adelante, Kim Namjoon estaba sonriente y llevaba un sobre color crema en la mano.

Ambos miraron en su dirección y la chica agachó la cabeza, se despidió del jefe y se marchó hacia quién sabe dónde. Namjoon entró en el despacho de informática y cerró la puerta tras él, Yoongi lo saludó y volvió su vista a la pantalla, donde el programa ya había cargado.

—Oí que tu hermano había regresado.—Dijo sentándose a un lado de la larga mesa del pelinegro, dejando una pierna apoyada en el suelo.

—Ajá.—Se limitó a responder el más pálido mientras tecleaba.

—Espero que no suponga un problema con Song Kang como anteriormente, ya todos sois adultos.

Yoongi tomó aire y se sacó las gafas para dejarlas sobre la mesa, girar su silla y mirar directamente  al comisario.

—No entiendo a qué viene ésto, comisario Kim.

Namjoon se rascó la frente y se lamió los labios, tratando de encontrar las palabras justas para zanjar el tema de inmediato.

—Sé lo que pasó con Song y tu hermano en la adolescencia, Jeon, sé que Park y tú pusisteis el grito en el cielo cuando entró a ésta comisaria y sé que al anterior comisario le costó bastante que el ambiente llegase a ser como es ahora.—Tomó aire y lo miró, uniendo sus dedos entre sí.—Ya sé que es una situación difícil de olvidar y me gustaría que siguieses alimentando la paciencia de tu amigo y su tolerancia con vuestro compañero.

🚔Irrompible🚔 (JIKOOKMIN)-Completada.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora