LO MEJOR ES CALLAR: Deseo de Justicia [4to BORRADOR]

Capítulo 51: ¡Feliz Navidad!

La tensión terminó por colapsar a todos en la familia Smith, estando en lo que debía ser un grato desayuno navideño. Los únicos que parecían tener algo que agregar, eran los obvios. La madre de Angela, aún habiendo hecho un comentario tan mordaz, el blues de su voz era perfecto. Otro aspecto que había adoptado Angela de su madre.

-¡Por favor, Jenny! -pidió Mark a su ex esposa.

-Permites que esta mujer me trate de esta forma -chilló la abuela ante su hijo.

Unió Jenny sus risas al absurdo comentario de Meredith. -Es que usted no tiene pudor, Señora. Su hijo y yo, ya hace mucho que estamos separados. Aún así permito que realicemos estas ¡Estúpida cena! -engrueso el tono de su voz- ¡En mi casa! ¡Mi mesa! ¿Y usted tiene el descaro de insultarme?

-Nunca en mi vida había sido humillada de tal forma -pareció que Meredith sufriría un infarto-. A estas estancias no tendría un absorto de que esa niña no llegara virgen al matrimonio -sonó horrorizada.

El silencio de la contraparte se volvió aún más intrépido. Todos con la cabeza agachada ante sus platos, sin saber como reaccionar

-¡No te preocupes por eso, abuela! Hace mucho que mi virginal alma se esfumó -disfrutó Angela tanto decir tal cosa.

-¡Ya cállate! -Pareció que su padre saltaría a golpearla.

-¿Para qué callarme? ¿Para que sigas inventando patrañas? -El tono que utilizaba era igual de fuerte que el de su madre, o hasta más.

Su padre se levantó de una vez por todas. Tomó a Angela del brazo e iba a sacarla del comedor.

-¡Suéltala! -Su madre se dirigió a Mark.

-¡Suéltame! -quitó Angela su brazo jalando hacia un lado-. No prefieres escuchar la verdad -dijo-. Solo para que todos estén claros. El buen muchacho del que mi padre habla, mi difundo ex novio, que no sólo me deshonró quitándome lo más preciado de mi ser. ¡Mi virginidad! -Le causaba risa el término-. También me utilizó para complacer a su padre. Enamorarme para consolidar la relación con mi querido padre. Funcionó. Horas antes de su muerte, me confesó todo luego de descubrir que se revolcaba con cuanta chica se le aparecía en el camino. Ese buen muchacho como mi propio padre lo describe. ¡Era un completo imbécil! -el tema de Santiago aún arremetía a sus sentimientos-. Su padre, un depravado que consumía la pornografía infantil que un grupo de adolescentes del "Integrity" lideraba. -Todos en la mesa terminaron más asombrados-. Estos, se grababan a escondidas teniendo sexo con chicas, y luego comercializaban esos videos sin que las pobres lo supieran. Mis dos mejores amigos a los que tanto amo y yo, desmantelamos esa red de enfermos depravados -apoyó su mano sobre la mesa-. Entonces sí, tuve mucho que lidiar todo este año, como para preocuparme de no estar en un ¡maldito cuadro honor!

Se volvió hacia su padre a un lado de ella. -Pensé que habías cambiado un poco -decepcionó-. Pero sigues siendo igual de poco hombre...

-¡Mark! -gritó Jenny junto al Tío George, pero ya era tarde. Él ya había hecho sangrar el labio de su hija con un tan grotesco bofetón.

-¡Perfecto! -colocó Angela su mano en su mejilla, pero no le regaló las lágrimas a su padre-. Siempre supe que tú postura como hombre era tan limitada. El típico adúltero que engañaba a su esposa, la madre de sus hijos, con jovencitas casi de la edad de su propia hija.

Mas mentiras al descubierto. El tema no era de conocimiento para ninguno de los presentes. Tanto Jenny como Mark, prefirieron hacer de su ruptura una desconformidad de parejas que los llevó hasta la separación. Lo cierto era que la madre Angela se había cansado de las infidelidades de su esposo. Ambos eran ingenuos al creer que sus hijos nunca se enteraron de las verdaderas razones de su ruptura. Angela y Jason le guardaban a su padre recelos internos, no pudieron llegar a odiarlo, si ni su madre lo hacía; así ellos hubieran querido, no lo lograrían, era vuestro padre después de todo.