Cap. 56
Valentina Pov
Me estoy casando con mi princesa, es un evento que traerá muchos precedentes a la nación, la hija del presidente se casó con una mujer.
A mí lo único que me interesa es estar al lado de mi chica preciosa y ser feliz a su lado.
La ceremonia fue muy hermosa, verla entrar al lugar fue maravilloso, cuando la ví mi mundo se iluminó.
Cuando me dijo que si, me dijo que si, me dijo que si. Soy la señora de ella, soy suya. Bailamos, comimos, nos tomaron miles de fotos, nos divertimos, Naomi, mi hermana Juliana y yo disfrutamos mucho la fiesta haciendo un divertido baile, mi mamá trato de guardar la compostura, pero moría de risa.
- Te amo. Me decía mi esposa a mi lado ahora que vamos a despegar en este vuelo a nuestra luna de miel. La observé y tome su labio con mis labios dejando un suave beso. Le susurré
- Te amo esposa mía.
- Solo tuya. Ella volvió a besarme.
- Te amo mucho princesa. Te amo y seremos una hermosa familia.
Una azafata se nos acercó
- ¿Desean algo de tomar?
- Mi esposa no me deja. Respondió Juliana
- Puedes tomar si quieres. Le respondí
- Tenemos soda, agua, vino, jugo natural.
- Le trae a mi esposa un jugo natural. Ella se tiene que cuidar ya que será una corredora profesional.
- Desde luego, ya se lo traigo y ¿Usted tomará algo también?
- Me trae un jugo de naranja natural y sin azúcar.
- Ya se lo traigo.
Mi morena hermosa estaba demasiado pegada a mi, sus manos inquietas por tomarme y ya con muchas ganas de tenerla también.
- Amor siempre serás una mimada.
- ¿Por qué lo dices?
- Porque; un jugo de naranja sin azúcar.
- Amor sabes que me gusta cuidar mi salud y tú salud también. Eres mi princesa hermosa y te voy a cuidar y ¿Qué me ves? Ella tenía su mirada fija en mi.
- Te veo lo hermosa que eres y lo fascinante que eres cuando te pones mimada.
- Princesa hermosa te amo.
- Te amo mucho Valentina
Nos dimos un beso, suave, amo este momento y disfruto poder estar a su lado, simplemente verla a los ojos y ver nuestras manos entrelazadas.
***
Llegamos a nuestra luna de miel el cual tuvo varias paradas una de ellas fue París, debo reconocer que venir a París con el amor de tu vida no tiene precio, es una experiencia única, caminar tomadas de las manos.
Desayunar en esos restaurantes a su lado, disfruto mucho poder cuidar de ella, y ella de mi, tenerla entre mis brazos, tener su cuerpo entre mis brazos, sus labios hermosos y llenos de pasión. Morena, mi esposa.
Ahora estamos en Hawaii, un maravilloso lugar, dónde mi princesa tiene ese traje de baño y solo quiero hacerle el amor a cada instante del día.
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La hija del presidente (ACTUALIZANDO)
Romance¿Te imaginas enamorarte de la hija del presidente cuando tú papá es el contrincante en las próximas elecciones electorales? Juliana es un poco descomplicada, hija del presidente de Estados Unidos y una noche es secuestrada junto a la hija del contr...