— Que bien, primeros clientes. — Dijo Rafa emocionado.
— Ya ves, esto se lo regalamos para que lo prueben.
— Si, espero que consigamos bien de dinero.
— Seguro que si, con todo lo que tenemos vamos a ganar bien. Yo lo que quiero es deshacerme de todo lo más rápido posible. — Dije mientras abría la puerta del piso.
— ¿Ya os quedáis en el piso? — Preguntó Sofía.
— No, vamos a bajarle a unos chavales. — Dije respondiéndola.
— Genial, justo estábamos separando los kilos en gramos y en placas. — Dijo Julia.
— Vale, ¿donde los estáis guardando?
— Están en la cocina.
— Vale. —Rafa va a la cocina a por los gramos.
— ¿Y cómo es qué os habéis puesto a separar los kilos? — Pregunté.
— Nos aburríamos. — Dijo Julia respondiéndome.
— Ya los e cogido, vamos Nayla.
— En un rato subimos.
— Tener cuidado. — Dijo Sofía mientras salíamos del piso.
— Oye ¿y se han ido?
— No creo, si no ya conseguiremos clientes.
— Si, siguen allí. —Dijo Rafa después de salir del portal.
— Bien.
— He bajado para nosotros también.
— Rafa, yo no fumo porros.
— Habrá que probar lo que vendemos, ¿no?
— Bueno...
— ¿Lo habéis traído? — Preguntó Omar.
— Si, tomar. — Rafa le da los tres gramos.
— ¿Cuanto os debemos? — Preguntó Morad.
— Nada, invita la casa.
— Joder, muchas gracias. ¿Os echáis un porro con nosotros? — Preguntó Omar.
— Venga, vale. — Dijo Rafa mientras sacaba un gramo de polen.
— Por cierto, me llamo Morad y el Omar.
— Yo Nayla y él Rafa.
— Vamos a la plaza así nos sentamos. — Dijo Omar.
Nos fuimos a la plaza, la verdad es que estoy un poco incomoda, no les conozco y al principio me cuesta bastante hablar y que tampoco me fío de nadie.
— ¿Vosotros de donde sois, de Barcelona? — Preguntó Morad.
— No, venimos de Madrid. — Dijo Rafa respondiendo.
— ¿Y cómo es que os habéis venido a vivir aquí?
— Es una historia muy larga, pero resumidamente es que no estábamos a gusto allí. — Dije respondiendo a Omar.
— Si, ademas que estábamos cansados de Madrid.
— Pues a nosotros nos encanta Madrid. — Dijo Morad.
— Esta bien pero para ir de vez en cuando, en mi opinión.
— Yo para vivir la verdad es que prefiero mi barrio antes que Madrid.
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Inestabilidad mental
Historical FictionA Nayla le acaba de dejar su novio después de casi dos años de relación, le puso los cuernos con una de sus mejores amigas, Noelia. De madrugada le llegó una llamada de uno de sus mejores amigos (Rafael), diciéndole a Nayla que Emilio (el narco para...