Cuando me aseguré de que Fátima se había ido, llamé a Beny, estaba preocupada ya que no sabía nada de ellos y después de lo de Fátima, no tenía buena sensación.
¿Por qué coño no lo coge? Esto no me esta gustando nada.
Llamé a Morad a ver si él lo cogía, pero tampoco hubo respuesta. Salí del portal de Beny y me fui a casa, estaba algo nerviosa.
— Por fin, ¿dónde están Morad y Beny?
— Buena pregunta Jaz, me dejaron allí en la calle. Me dijo Beny que tenían que hacer unas cosas, que luego venían pero yo me quedé esperando allí donde me dejaron, hasta que vi a Fátima yendo a casa de Beny.
— ¿Cómo?
— Si, como lo oyes Julia. Apareció la puta esta otra vez, con la intención de meterse en casa de Beny, pero evidentemente no lo consiguió porque la vi. La verdad es que no tengo buena sensación, les e llamado pero ninguno de los dos da respuesta.
— Madre mía, como les haya pasado algo... — Dijo Julia algo nerviosa.
— Se las saben apañar, no creo que haya pasado nada, o por lo menos espero que no.
— No sé chicas, pero me estoy mosqueando mucho...
— Oye, ¿y Javi no puede localizar donde están?
— Buena idea Jaz, si le pillamos bien y en el hotel lo mismo si que puede localizarles.
Cogí el móvil y marqué a Javi, en pocos segundos respondió a la llamada.
— Dime Nayla.
— ¿Me puedes hacer un favor? Necesito que localices a Beny o a Morad, no sabemos nada de ellos y bueno, ha pasado una cosa.
— Si, pero tiene que ser rápido, tengo que salir ahora en un rato.
— Vale, ¿que necesitas para localizarles?
Javi me dijo lo que necesitaba para localizarles, me dijo que con el número de teléfono era suficiente. En menos de un minuto consiguió localizarles.
— Lo tengo, están en el Hospital General de L'Hospitalet.
— ¿En el hospital? — Dije asustada.
— Si...
— Muchas gracias Javi, luego nos vemos.
— Chao Nay, que no sea nada grave. — Finaliza la llamada.
— Vámonos.
Jazmín y Julia se levantaron del sofá y nos fuimos rápidamente al coche.
— Joder, ¿que coño habrá pasado?
— No lo sé Jaz, prueba a llamar a Morad, a ver si a ti te lo coge.
— Voy.
Mientras entrábamos al coche, Jazmín probó a llamar a Morad, pero seguimos sin obtener respuesta.
— Me cago en la puta. — Dijo Jazmín cabreada.
— Tranquila, ahora preguntamos por ellos en el hospital.
— Nayla, acelera.
— No puedo, ¿no ves el tráfico que hay?
— Chicas, tranquilizaros, pensar en que seguramente no haya sido nada grave.
— Julia, nunca vienen al hospital, por nada. Si han venido es porque ha sido algo grave.
Julia se quedó callada, solo quería que nos tranquilizásemos un poco. Tardamos pocos minutos en llegar, aunque tardamos algo más por el tráfico y semáforos. Cuando llegamos volvimos a llamarles, Beny no cogió la llamada pero Morad si.
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Inestabilidad mental
Ficção HistóricaA Nayla le acaba de dejar su novio después de casi dos años de relación, le puso los cuernos con una de sus mejores amigas, Noelia. De madrugada le llegó una llamada de uno de sus mejores amigos (Rafael), diciéndole a Nayla que Emilio (el narco para...