4

89 9 0
                                    

Se quedo mirándolo fijamente para después quitar su mirada y centrarla en el tapete del auto aunque no se espero que le respondiera.

- Muchas gracias por el cumplido, pero no soy tan fabuloso, a decir verdad soy adormecedor para muchas personas.

- Que va profesor! Con lo poco que vi de usted puedo decirle que tiene una metodología excelente y cuando imparte sus clases capta la atención de los estudiantes, en pocas palabras usted saber hacer su trabajo.- Dai paro el auto al ver una casa como ella se lo habia descrito antes, esperando que fuera la de su estudiante, para después voltear a mirarla un momento y sonreírle.

- Que agradable escucharlo de mi alumna, daré lo mejor de mi para su formación superior, ojala usted también haga lo mismo.- se quito el cinturón de seguridad al paso que se abría el abrigo. Hellen distraída por su acción no le respondía al instante pero se dio cuenta del silencio así que le respondió.

-  I will do my best for my teacher. I promise.

- Bien dicho.- se quedo mirándolo un poco más tratando de guardar a detalle osos ojos inusuales en su mente, el volteo la mirada para preguntarle si esa era su casa pero se sorprendió al sentir la mano de la chica sobre la suya en el timón, este la miro confundido incluso la propia Hellen no entendía lo que había echo, quito rápidamente su mano y quiso disculparse, pero salto del susto cuando escucho un golpe en la ventana de Dai, este volteo a ver quien habia golpeado su auto y se encontró con una señora rubia con un gesto de aversión que lo miraba desde afuera. 

Elena al ver a su prima en un auto con un desconocido empezó a golpearlo con fuerza asustando a Hellen y perturbando a Dai en el proceso.

- Quien rayos eres! Que haces con mi prima!.- gritaba desde afuera al desconocido en medio de la lluvia torrencial de la noche, Hellen bajo rápidamente para explicarle la situación a Elena.

- Espera prima, no es lo que parece.- la detuvo cuando esta quiso tomar unas piedras del suelo para lanzárselas al coche.- El es mi profesor de literatura, Dai Hederson.

- Que, tu profesor?.- lo señalo confundida ya que de lejos no se veía como uno, más bien parecía tener la misma edad que su prima.

- Si, olvide el paraguas así que el amablemente me ayudo a llegar menos empapada de lo que ya estoy.- le explico rápido al mismo tiempo que Dai bajaba del coche con su paraguas para confirmar las palabras de Hellen.

- Es correcto señora.- se acerco lentamente para aclararle el asunto.- disculpe mi atrevimiento pero dejar sola a una alumna en medio de esta lluvia no me pareció acertado, por lo que tomé el atrevimiento de llevarla hasta su casa.- Elena lo miro un momento para tener la certeza de que no le mentía, al ver la sinceridad en su mirada se disculpo con él avergonzada por su accionar.

- Por favor señor discúlpeme, es que mi prima acaba de llegar y me da temor que algo le pase estando aquí, ella es extranjera.- le explico apenada indicándole a Hellen que entrara a la casa a lo que esta acepto.

- Acepto sus disculpas, pero por favor le sugeriría que no arroje piedras a cualquier vehículo aparcado en frente de su hogar.- esta se puso roja como tomate ante su declaración.

I'm sorry sir. It will not happen again.- agito las manos para no parecer nerviosa pero más la dejo en evidencia, este le sonrió divertido y se despidió de ella entrando a su coche para seguir su camino. Elena se sorprendió por la actitud del hombre a pesar de querer atentar contra su coche este no se molesto con ella, en su lugar esta quizás le habría cantado las 40 por impulsiva. Entro a la casa porque ya sentía calambres de estar parada en medio de esa lluvia, en cuanto entro vio a Jhon esperándola con una toalla para que se secara, le enterneció el gesto así que tomo la toalla y como regalo iba a darle un beso hasta que este le hizo una pregunta que la desencajo.

- Quién era ese hombre cariño?

- Eh ... era el profesor de literatura de Hellen.- le explico un tanto confundida por la pregunta.

- En serio? No te parece sospechoso que la haya traído a casa en su auto.- le cuestiono con una expresión sería a lo que esta pensó un poco en esa posibilidad.

- Yo creo que no, además me explico que la encontró en medio de la lluvia empapada y tuvo el buen gesto de traerla a casa, es todo.¿Debería molestarme por eso?.- se le hacía raro ya que este en un punto de la noche se le hacia sentido que quisiera ayudar a su prima.

- Claro que no, pero de todas formas habla con tu prima sobre él, imagínate si ese profesor tiene fama de un Don Juan que se involucre con sus alumnas, después de todo es tu prima y mi prima hermana, no?

-*suspiro* si tienes razón perdón pero es un poco complicado estar atenta todo el tiempo, pero gracias por tu preocupación que bueno que le vayas tomando cariño a mi prima.- lo abrazo, a pesar de estar mojada esta le correspondió el abrazo con ternura y le pidió amablemente que se cambiara así no pegaría un resfriado que se transformaría en una gripe. 

Elena mientras se cambiaba pensaba en lo que dijo su marido y tenia cierta razón porque a pesar de lo formal que podría haber sido con ella, no lo conocía lo suficiente por lo que no podía asegurar si sus únicas intenciones eran ayudar a Hellen o en el peor caso seducirla, agito la cabeza y decidió despejar sus dudas con su prima así que fue a buscarla a su habitación encontrándola sentada en su cama a lo que esta se sentó a su lado. 

Come stai cugino? Ti sei già asciugato?

Sì cugino. Solo me hablas en italiano cuando estas preocupada. De que se trata prima?

- Si es cierto, verás me quede un poco inquieta por tu profesor. ¿Te sentiste incomoda por su invitación?

- Eh! a que viene eso Elena.- se levanto un poco ofuscada por lo que insinuaba su pregunta.- Me sentí incomoda por mojar su costoso auto es todo, si piensas que tendría unas doble intensiones conmigo pues te equivocas.

- Esta bien tranquila, solo quiero cuidarte además recuerda que tu madre me encargo tu seguridad.- Hellen la miro y se tranquilo ya que estaba siendo un poco ruda con su prima, tenia razón en preocuparse pero de solo pensar en que calumnien a Dai le surgía un sentimiento de odio, no entendía porque, pero no podía evitarlo. 

- Perdonami cugino, estoy cansada es todo porque no te vas a descansar mañana tienes que irte a la oficina.

- Sii! es cierto vaya mi martirio, bueno al menos Jhon preparará la cena así que prepárate para probar su sazón.- se levanto de la cama y abrazo a su prima indicándole que bajara a cenar, esta asintió, pero antes quería hacer algo primero por lo que Elena bajo antes. 

Hellen sentía algo extraño en su interior no solo por su nueva vida y amigos que hizo, también por el hecho de cruzar su camino con un profesor tan cortes como lo era Dai, además de guapo era todo un caballero eso le hacia brincos al corazón pero lo dejo como un sentimiento de admiración, eso hasta que puso su mano izquierda en la cara para olerla, la mano con la que había tocado la del profesor Dai.

Según el planDonde viven las historias. Descúbrelo ahora