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Llegaron a su casa a lo que Hellen se bajó y le agradeció amablemente por haberla traído después se despidió e ingresó a su hogar. Dai se despidió igual encendió el motor de su auto y se fue a su casa, sin darse cuenta que a través de la ventana del hogar de la señorita Moretti, un hombre mayor lo observaba irse. Hellen al entrar vio a su primo hermano en la sala observando unas revistas al pie de la ventana a lo que esta lo saludó y él le sonrió con ternura. 

Esta subió a su habitación dejando a Jhon en la sala, cuando escucho cerrar la puerta de su habitación este se sentó en el sofá pensativo, otra vez ese hombre había traído a su prima hermana a casa, cosa que se le hacía sospechoso, sin embargo iba a actuar con cuidado para poder entender a la perfección lo que está sucediendo. Después de todo estaba protegiéndola o quizás solo queria algo con que entretenerse, su vida se había vuelto muy monótona así que porque no ver que podía descubrir de su querida prima hermana, esos últimos días esta se había vuelto una "pelicula", de la cual sería un espectador.

...

Hellen conversaba alegremente con su madre por teléfono, esta le contaba los últimos acontecimientos excepto por el profesor de literatura quiso guardárselo para ella, solo por esta vez claro después se lo comentaría a sus padres, aunque tendría que ver como hacerlo.
Poder hablar con su madre la desestreso mucho sobre todo le pidió consejos para "llevarse mejor" con sus amigos ... y el profesor. En todo momento guardo el secreto de su prima, hablando con cuidado sobre ella así me mantenía a raya de que se le podría salir mencionar que estaba casada y con un hombre de la edad de su hermano.

- Mi manchi figlia, me hizo bien hablar contigo.- le comentó jovial su madre por teléfono.

- A mi también madre, espero me llames con más regularidad, aspetterò la tua chiamata.- se despidió de ella risueña y colgó la llamada para dedicarse a sus tareas. 

Estar en la universidad no fue muy pesado como creyó solo tenia que saber dividir sus tiempos así no se cansaría rápido, además podría darse tiempo para explorar los alrededores de la ciudad ya que aún no había salido más a allá de la universidad. Estaba deseosa de visitar el puerto de Boston, solo lo había visto en fotos pero pisarlo sería otra experiencia, se decidió que iría así que trato de terminas sus deberes y poder salir con el permiso de su prima, aunque ella no estaba en casa al menos estaba Jhon para que la autorice a salir.

- Quieres ir al puerto?.- pregunto curioso sentado en el sofá mientras que Hellen estaba parada a su costado.

- Si así es... solo e estado en la universidad y en casa, creo que necesito airarme un poco, no crees?.- trato de convencer a Jhon para que le dejara salir, sentía que necesitaba despegarse un poco.

- Bueno hagamos algo.- le pidió que se acercara a lo que este un poco despistada lo hizo, acto siguiente Jhon le susurro en la oreja.- Regresa antes de la 6 pm, así Elena no te aturdirá con preguntas ni me regañara, te parece?

- Esta bien, entonces será nuestro secretito.- puso su dedo en la boca en señal de su acuerdo a lo que él la imito, entonces Hellen tomó su abrigo y se fue de la casa al muelle, pero antes Jhon le dio un poco de dinero para que se comprara algo, vaya que empezaba a agradarle cada dia más su primo hermano. 

Fue a pie a la estación para tomar el tren que la llevaría hasta el muelle, durante el tiempo que estuvo sentada se dedico a ver con detenimiento las nubes que se formaban en el cielo, aunque estuviera nublado no se veía mal de echo comparo las nubes con las de Italia, se río al pensar que estas se enojarian por ser comparadas.

Llego a su parada así que bajo del tren y se fue al muelle para observar el puerto marítimo, el más grande Massachusetts, era asombroso haber llegado hasta ahí, la vista era extraordinaria sobre todo los barcos que zarpaban le daban ganas de meterse a uno de ellos y saber donde iba a parar, aunque eso sonaba extraño si se lo comentabas a cualquiera. Saco su cámara de fotos y tomo algunas del mar y de los barcos, luego se saco una selfie a si misma. La revisó para saber si hizo una buena cara para el recuerdo y al momento de verla se congelo al ver que detrás de ella salía Dai, no podía ser estaba el también en el muelle. Se encogió de hombros por la gran coincidencia, para no ser reconocida tomo su bufanda y la subio hasta su boca, entonces tomo otra foto a  escondidas para saber si seguía detrás de ella, pero ya no estaba. Volteo la mirada y vio que estaba caminando a espaldas de ella junto a un joven que se parecía mucho a él. Recordó entonces que Megan le había comentado que él se había casado pero su esposa había fallecido, entonces supuso que se trataba de su hijo. 

Miro bien al muchacho y se dio con la sorpresa que era posiblemente de la misma edad que ella, entonces supuso que Dai era mayor, pero no tanto como Jhon de eso estaba segura. No pudo evitar la curiosidad y los siguió sigilosamente para que no se percataran de su presencia, estos caminaron por todo el muelle observando los cargamentos, será que además de profesor era dueño de una naviera, eso sería demasiado genial pero no estaba segura. 

Merus trajo a su padre con el al muelle para que se distrajera un rato de sus deberes ya que el trabajo en exceso podía hacerle daño a su salud. Ambos caminaron por el muelle y se quedaron en un lado para observar el mar recordando las buenas y malas experiencias.

- Padre en que piensa?.- lo miro de costado curioso al ver su mirada en los botes, este volteo y le sonrió. 

- En el ultimo viaje alrededor del mundo y de lo rápido que paso desde aquella vez, parece que no he cambiado casi nada a excepción de ti.

- You think that? nunca pensé que algún día se mofara de su apariencia.- rio por lo bajo pero dejo eso al ver la expresión sería de su padre, iba disculparse pero este también rio a lo que ambos comenzaron a hacerlo.

- Con el tiempo uno aprende a reírse de si mismo.

- Si creo que tienes razón.- ambos retomaron su andar al auto para regresar a casa, en lo que Merus seguía a su padre de repente se encontró con una señorita de pelo trenzado en un moño con un abrigo gris que tenía su mirada fija en ellos aunque no era desamasado evidente, igual se preocupo un poco y le aviso a su padre que alguien los observaba. 

- Padre, conoce a esa chica?.- le señalo con sutileza la dirección donde se encontraba la chica pero al voltear esta ya no estaba, por lo que pensó que se había dado cuanta que la descubrió así que huyo.- Padre le aseguró que había alguien ahí.

- Tal vez tengas razón, pero ya no esta, quizás te confundiste y no te observaba.- abrió el auto a lo que Merus fue a la parte del copiloto.

- No padre a mi no me miraba, creo que era a ti.- le menciono entrando en el coche a lo que Dai lo miro confuso para responderle con ironía.

- A mi? Un hombre de unos 40 años siendo observado por una señorita, estaría de acuerdo si hubiera sido una mujer mayor.- Merus puso un puchero por la burla que le hizo pero de cierto modo tenia razón, es decir, una chica de su edad mirando a su padre bueno quizá por curiosidad por la apariencia única que ambos tenían, quizás solo había sido eso, por lo que dejo de lado el asunto.

...

Literalmente Hellen tomo el primer tren para alejarse del muelle, casi había sido descubierta por su profesor, bueno por su hijo ya que este la había visto primero. Se acomodó en el asiento hasta que le llego una idea repentina, algo como realizar el primer acercamiento a Dai, o al menos a sus seres más allegados a él por lo que quizas el primer paso, podría ser hacerse "amiga" de su hijo. Si se hacia su amiga ella podría acercarse más al ambiente familiar de su profesor y por ende sería más cercana a él. Esa idea resonó en su cabeza con fuerza por ello se formo una sonrisa en sus labios de tan solo pensar que podría estar más cerca de él, todo por ser la amiga de su hijo, podría resultar ya que casi eran de la misma edad, entonces supuso que se llevarían bien.

Cerro su abrigo y miro a la ventana con una mirada soñadora pensando en todo lo que le estaba pasado, sobre todo con su profesor de literatura, nunca pensó que entre toda esa gente de la que se rodearia iba a encontrar a una persona que le dejaria tal facinacion, al mismo tiempo que estaría dispuesta a hacer lo necesario para que no se alejara de su lado.

Previno que llegara antes de las 6 y justo faltaban solo 5 minutos así que entro corriendo a la casa. En la sala como era costumbre vio a Jhon así que lo saludo y se retiro a su habitación para tirarse en su cama boca abajo.

Saco su cámara del bolsillo de su abrigo y abrió la galería para ver una vez más la foto donde sin querer salía Dai, aunque estuviera de espaldas le gustaba mucho, con el tiempo esperaba tomarse otra foto, pero esta vez abrazados en el muelle sonriendo juntos, eso sería como un sueño para ella, que según tomara ciertos pasos y decisiones podría cumplirse. Todo según el plan.

Según el planDonde viven las historias. Descúbrelo ahora