Un séptimo hijo
Independientemente de todo lo que había sucedido en Hogwarts, tanto bueno como malo, la biblioteca seguía siendo, sin lugar a dudas, el lugar favorito de Hermione. Decidida a mantener su buena relación con Ron, lo invitó a acompañarla allí después de que terminaran sus clases de la tarde, prometiendo ayudarlo con su ensayo Transfiguración.
"Ahora esto se siente como en los viejos tiempos", sonrió, dejando caer su mochila en una silla. "¿Recuerdas cuando nos colamos nuestras comidas aquí mientras intentábamos encontrar una manera de que Harry pudiera respirar bajo el agua?"
"Madame Pince habría estado tan enojada si se hubiera enterado", se estremeció Hermione. Todos los estudiantes habían escuchado al bibliotecario gritar sobre migajas en un momento u otro.
"¿Y todo ese tiempo buscando información sobre Nicholas Flamel, y ya habías revisado el libro que necesitábamos?"
"¿Cómo podría olvidarlo?"
"Luego hubo un momento en que no había nada en absoluto sobre la Cámara de los Secretos-"
"Creo que fue una falta de información histórica en general", se defendió Hermione rápidamente. "No es culpa de la biblioteca".
"Tampoco pudimos encontrar qué eran los horrocruxes".
"¿Quién en su sano juicio querría leer sobre ellos?"
Ron le sonrió y Hermione se dio cuenta tardíamente de que estaba siendo molestada.
"¡Oh, a veces eres un git, Ronald Weasley!" Pero ella lo dijo con una amplia sonrisa y ambos sabían que lo decía cariñosamente.
Era como en los viejos tiempos, de hecho. Ron estaba trabajando en otro ensayo que no podría terminar sin la ayuda de Hermione. Muchas veces había protestado por este comportamiento ("¿Cómo aprenderás?") pero esta vez, lo extrañaba tanto que estaba feliz de complacerlo.
Mientras inclinaba ociosamente su silla, especuló: "¿Te preguntas cómo les va a Harry y Ginny en las pruebas de Quidditch?"
Hermione levantó la vista de su papel. "¿Es ahí donde están?"
"Sí. Quiero decir, ambos son voladores brillantes ..."
"Estoy segura de que a ambos les irá bastante bien", le aseguró, haciendo la última corrección en su pergamino y deslizándolo de nuevo sobre la mesa. "Aquí hay algunas cosas en las que debes trabajar".
"Gracias." Tomó el pergamino y continuó pensativo: "Aún así, no estoy seguro de querer usar verde Slytherin para Quidditch, ¿sabes?"
Comenzó a buscar en su bolso su propio ensayo de Transfiguración. "¿No tuviste tus propias pruebas de casa la otra noche?"
"¡Oh, claro! No te lo dije. Hice Keeper para Hufflepuff".
"Eso es genial, Ron". No había encontrado su ensayo, pero su mano había gravitado hacia Hogwarts: Una historia en su bolso y lo sacó.
"Gracias."
"Aunque te das cuenta de que esto significa que probablemente tendrás que jugar contra Harry en algún momento, ¿verdad?"
Parecía resignado. Claramente este pensamiento ya se le había ocurrido. "Lo sé."
Ron comenzó a trabajar en las correcciones de su ensayo, mientras Hermione hojeaba su libro favorito a la parte que más le interesaba: Rowena Ravenclaw. Tras el descubrimiento del estudio de Ravenclaw la noche anterior, esperaba que el libro pudiera darle más información. Ella leyó:
Rowena Ravenclaw fue responsable del nombre y la ubicación de la escuela Hogwarts, alegando que la información le había llegado en un sueño. En el sueño, un cerdo muy verrugoso la había llevado a la cima de un acantilado que daba a un lago. También podemos agradecer a Ravenclaw por el plano de planta siempre cambiante de Hogwarts.
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El nido del águila// Traducción. Dramione
FanfictionResumen: El octavo año de Hermione en Hogwarts ya va a ser difícil después de la guerra, pero se ve aún más perturbado cuando la directora McGonagall ordena una reclasificación de todos los estudiantes para promover la unidad entre las casas. Pero...