El nido del águila// Traducción. Dramione

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La tercera ley de Golpalott

(Hay diálogos que deberían estar en cursivas, pero por obvias razones, no los puse. Lean con cuidado para que se pueda entender) 

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El miércoles, Hermione hizo algo muy parecido a Hermione y se saltó el almuerzo por completo para poder pasar un tiempo en la biblioteca antes de Pociones. Sus esfuerzos fueron recompensados cuando descubrió un libro de aspecto modesto titulado Venenos, antídotos y tú.

A pesar del título sin sentido, el libro contenía exactamente lo que había estado tratando de articular a Theo en la biblioteca el domingo anterior: que teóricamente era posible descomponer los sueros de la misma manera que lo era para los antídotos, aplicando la Tercera Ley de Golpalott.

Todavía necesito algo de Veritaserum, se lamentó. Debería preguntarle a Draco si sabe cómo conseguir alguno, la próxima oportunidad que tenga. Si no es él, tal vez Harry. Mientras tanto, puedo comenzar a tratar de desmontar el polvo convincente de la verdad. Una vez que lo divido en sus partes más básicas y hago lo mismo con un poco de Veritaserum, teóricamente puedo averiguar qué actuaría como un antídoto para ambos.

Sonó la primera campana de advertencia para las clases de la tarde, tomándola por sorpresa. Sin darse cuenta de que había estado tanto tiempo en la biblioteca, cerró el libro con un chasquido y se apresuró hacia el escritorio de Madam Pince para ver Venenos, antídotos y tú.

Lo que planeaba lograr nunca se había hecho antes, eso lo sabía. Si tuviera éxito, no solo estaría un paso más cerca de encontrar una respuesta al enigma de sus vidas y las de Draco ... Ella podría aceptar un lugar en la historia de Potioneering . Incluso si solo encontrara un antídoto para Veritaserum (no importa llevar la teoría detrás de él más allá para responder a la perplejidad que era su mandala que se había ido mal), estaría descubriendo algo que el mundo mágico nunca había podido crear antes.

"Un pie delante del otro, Hermione", murmuró para sí misma en su camino a las mazmorras.

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Las pociones parecían pasar en grandes cantidades de tiempo, a pesar de ser un bloque doble. Hermione estaba lo suficientemente distraída como para casi no darse cuenta cuando Harry agregó las púas de puercoespín a su Desilusión Borrador demasiado pronto. Afortunadamente, ella atrapó el paso en falso antes de que ocurriera un desastre real.

"Bollocks", maldijo Harry en voz baja, luciendo aliviado de que ella hubiera intervenido. "Creo que este es uno que también necesito saber para el entrenamiento de Auror. Nunca lo lograré si ni siquiera puedo hacer esto".

"Relájate, Harry", tranquilizó, dejando caer una ramita de lavanda en el caldero. "Es por eso que estás en la escuela: para aprender estas cosas. En cualquier caso, lo más probable es que el programa Auror te promueva solo en función del mérito pasado. Después de todo, eres el mago que derrotó a Voldemort".

"Pero no quiero ser promovido por eso", murmuró en voz baja.

Ron, mientras tanto, había dejado el calor demasiado alto en su poción y la de Daphne. Había burbujeado y derretido una parte de su estación de trabajo en el breve tiempo que ella se había alejado para hurgar en el armario de suministros. Presa del pánico, había tratado de desaparecer el desastre, pero dada la naturaleza de la poción, esto solo lo había empeorado.

Después de la clase, Hermione arrinconó al profesor Slughorn y lo interrogó con preguntas sobre sueros hasta que se vio obligado a inventar una excusa para mostrarla. Para no ser disuadida de su propósito, se dirigió directamente a la suite matrimonial y reunió un laboratorio de pociones en miniatura.