DATO CURIOSO

69 12 0
                                    




MUERTE.


Nos sientan a ambos en un par de sillas en el sótano de la casa en la que pase mi infancia y los últimos días antes de que me encerraran en la clínica.

Nos atan con cadenas en las manos y las anclan a las sillas.

El lugar sigue perfectamente acondicionado. Justo como lo recuerdo. El sitio donde vi morir a tantas personas.

—Aguarden un minuto. Siéntanse como en casa —dice con sarcasmo.

Salen todos de la habitación y Evan voltea a mirarme.

—¡¿Qué mierdas está pasando?! —pregunta en un tono frenético.

—Me pones de mal humor cuando te haces el inocente y en realidad hoy me lo quiero pasar bien —.

—Sí, es cierto que sabía que se encontraba con vida; pero eso no me hace conocedor de cada uno de sus movimientos ¡¿Por qué mierda no me dijiste nada?! —suelta un Evan histérico.

—Pues aprende a conocerlo —.

—¿Ah quién mataste si no fue a él? —pregunta con curiosidad.

Irrumpe de nuevo en la habitación con Thais agarrada del brazo.

—A su hermano —digo.

—¿Poniéndose al día? —cuestiona mi padre.

—Solo le contaba del desafortunado incidente con Eros —.

Me encojo de hombros con una sonrisa.

—Tu estupidez más grande. Eres un maldito malagradecido —sisea.

Coge por el pelo a Thais y la empuja.

—Veamos si pueden salir de aquí con su chica —rechista.

Me comienzo a reír muy fuerte.

—No creas ni por un maldito segundo que ella logra algún efecto en mí que pueda hacer que desista de lo que he planeado para hoy. Me parece de pésimo gusto que todos crean que tiene algún tipo de impacto en mis emociones—suelto aun entre risas.

Ambos tanto Thais como Evan voltean a mirarme con el ceño fruncido, pero yo mantengo mi vista clavada en él.

—Mírate hijo. Todo el tiempo odiándome y eres igual a mí. La misma forma de esconder tus sentimientos. No sabes cuánto he disfrutado ver como todo el mundo te llama muerte. Se lo sugerí a Nik para que jamás te olvidaras de mi —enuncia.

—No lo hice ni un día. Cada momento desde que me propuse deshacerme de ti fue lo único en lo que pensé. Solo meditando en todas y cada una de las formas en las que podía acabar contigo. Adoro ver correr la sangre y la tuya será mi mayor logro. Solo para que sepas estos sentimientos te juro que no los oculto —sonrío con suficiencia.

—Te voy a destrozar pequeño imbécil arrogante —.

—Me hare un bonito llavero con algún de tus dedos. Los que usaste para asfixiar a mi madre hasta morir —escupo.

Redirijo mi mirada hacia Thais.

—Dato curioso: Él es el verdadero padre de Nik —.

—¿Qué? —murmura con verdadera confusión.

Lo miro a él nuevamente y ambos sonreímos.

Llego la hora de las confesiones. Que los secretos salgan a la luz.


FLASHBACK DE MUERTE.


Llegamos a una gran mansión con todas las luces encendidas. Muchos carros están estacionados alrededor.

EL JUEGO DE LA MUERTE.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora