Kaito KimConducía mi auto por la calle principal con el fin de llegar a casa a media noche. Algo que me pareció muy extraño fue que no habían otros vehículos a mi lado, y es que a estas horas suele haber mucho tráfico por donde yo vivo. Desvíe mi mirada hacia la ventanilla a mi lado por un segundo y luego volví a mirar al frente, pero, cuando hice esto, alcancé a notar una silueta femenina parada en el medio del camino, como si quisiera que la atropellara. Rápidamente giré el volante con fuerza, consiguiendo esquivarla por completo. Estacioné el auto y abrí la puerta a mi lado para bajarme mediante esta; tenía que regañar a esa muchacha por la locura que había hecho.
—Oye, ¿qué te pasa? Por si no te habías dado cuenta, ¡casi te matas! —le dije, dirigiéndome hacia su dirección.
Ella vestía unos pantalones negros y una sudadera del mismo color, con la capucha puesta, la cual cubría una buena parte de su frente y llenaba de sombras sus ojos, evitando que yo pudiera verlos. Su cabello estaba suelto, dividido en dos mechones a los lados de su cuello, pude notar que era pelirroja.
De repente, la chica giró sobre su propio eje y empezó a correr hacia un tenebroso bosque, colmado por la oscuridad.
—¡Espera!
Decidido a evitar que escapara, corrí tras ella lo más rápido que podía. La muchacha se adentró rápido al bosque, y yo también. Debía tener mucho cuidado para no chocar con las ramas de los árboles que dificultaban el camino, o para no tropezar con algunas raíces, rocas, pequeñas madrigueras, entre otros. Por mucho que aumentara la velocidad de mi recorrido, no conseguía superar la de esta chica, la que, por cierto, se movía tan rápido cómo una pantera. La vi desaparecer entre unos arbustos, así que supuse que allí era donde se terminaba la arbolada. Con ayuda de mis manos, aparté algunos tallos y conseguí salir de ese oscuro lugar.
Frente a mis ojos había una especie de acantilado y, si observaba a la distancia, podía ver el mar y todas sus constantes olas. Definitivamente este era un lugar hermoso, pero, al mismo tiempo, súper peligroso, ya que una caída desde aquí acabaría con la vida de cualquier persona gracias a las grandes y puntiagudas rocas que están en la orilla.
Mi mirada recayó de nuevo en aquella chica, la cual estaba situada a unos pocos centímetros del borde de la superficie, de espaldas al mar y a unos tres o cuatro metros delante de mí. La primera razón que se me vino a la mente sobre por qué estaba allí, es que se iba a lanzar con intenciones suicidas. Aún no podía ver bien su rostro por causa de las sombras que lo envolvían.
—No lo hagas —le ordené, negando con un movimiento de mi cabeza.
Ella alzó la mirada, dejándome libre la opción de verla a los ojos. Mi pulso se aceleró de una manera sorprendente y un escalofrío recorrió mi cuerpo al ver de quién se trataba todo este tiempo, Jary.
—¿Por qué no me amas? —me pregunta. Su voz se escuchaba suave y muy triste.
—Jary, ¿por qué dices eso? Bueno, en realid, te amo porque eres única y asombrosa, con todas las fuerzas de mi corazón.
Su pálido rostro no expresaba sentimiento alguno, y sus labios formaban una línea recta. Tras una fría brisa, que desordenó un poco su cabello, me dijo:
—Es fácil decirlo, pero no hacerlo —le dedica una ojeada al fondo del acantilado por un momento, y luego esta regresa a mí—. Si en realidad me amaras, si ves que me he lanzado al vacío, harías todo lo que esté a tu alcance para rescatarme. Y, si no hay forma de evitar que me lance, te lanzarías conmigo.
Fruncí el ceño ante sus palabras, pues no entendí lo que quería decirme. Entonces soy capaz de contemplar como su cuerpo se empieza a inclinar hacia atrás mientras abre sus brazos de par en par, dejándose caer.
En el intento de evitar que mi amada padeciera una muerte segura, me abalancé hacia ella a toda velocidad.
—¡No!
Fue demasiado tarde, ya sus pies habían abandonado la superficie. Cuando iba a sostener su mano, la parte del acantilado en la que estaba parado se derrumbó.
Al instante, me senté del susto en mi cama, con los ojos bien abiertos. Mi pecho subía y bajaba con agresividad y me costaba mucho respirar con normalidad, el sudor recorría mi piel. Bajé la mirada hacia mi regazo y encontré sobre este mi frazada blanca, con la que duermo todas las noches.
Suspiré hondo, —Solo fue un sueño.
Examiné desde mi lugar mis alrededores, pero no se podía ver nada con claridad. Decidí levantarme, pues me encontraba un poco mareado a causa del anterior pensamiento. Coloqué primero las plantas de mis pies en el piso de mi habitación, y luego me paré por completo. Tras haber abierto mi puerta, caminé por los pasillos de la sala de estar con el fin de llegar a la cocina.
Una vez allí, me preparé un vaso de agua mineral y le di el primer trago. No pude evitar pensar en lo que había sucedido hace unas horas, la discusión que tuve con Jary. Desde otro punto de vista, ella fue muy injusta conmigo, pues ni siquiera me dejó explicarle. A pesar de eso... No está a mi alcance enfadarme con ella, simplemente no puedo. Y es que lo que siento por esa tontita evita que llegue a odiarla. Una sonrisa de boca cerrada invadió mi rostro.
Al cabo de algunos segundos, cuando hube terminado de beber toda el agua, me recosté al mostrador, apoyando mis codos en él. Cierta cuestión surgió en mi mente, ¿qué es lo que haré ahora para recuperarla?
Después de haber analizado los hechos por un momento, me fijé en un pequeño detalle el cual anteriormente no fui capaz de comprender: las palabras de la pelirroja en mi sueño.
—"Es fácil decirlo, pero no hacerlo (...) ".
¡Eso es! «pensé.
Justamente ese es el problema: le dije a Jary cuánto la amaba pero no se lo demostré. Por lo tanto, demostrarle mi amor es "la solución". Ahora la gran pregunta: ¿cómo lo hago?
Nota de la autora:
¡Hola! Les traje hoy este capítulo nuevo aprovechando que es —al menos en mi país— "semana de receso" y pues, como no hay clases durante este corto período, saqué un tiempito para escribir esta parte. Quiero que sepan que me estoy esforzando mucho por mejorar en lo que hago, así que, si quieren, pueden comentar sobre cómo está yendo la historia —sin miedo, ya que NO juzgaré a nadie que diga lo que en realidad piensa.Y, por cierto, GRACIAS POR LEER😊. Mucho cariñito para todos. ¡Nos vemos!
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UNIQUE LOVE✔ (#1SAGA: PRIMEROS AMORES)
Jugendliteratur🔥🔥🔥 Cuando somos pequeños lo único que nos importa es jugar, jugar, y jugar. Pero a medida que vamos creciendo nos preocupan cosas más importantes, entre ellas, el amor. Muchas personas creen que este sentimiento tan hermoso, y algunas veces do...