Katie Chan Jary—Deberías tener cuidado, hermanita —burlón, le dijo Kim a su hermana. Ella le dedicó una mirada por encima de su hombro y continuó con su labor, sin prestarle mucha atención a su advertencia—. Haste a un lado, deja espacio para tu superior.
Ella giró su cabeza para dedicarle una mirada desafiante, levantando una ceja, —¿Superior?
—Sí. Soy tu jefe, y el jefe manda, señorita.
La chica giró los ojos ante la ocurrencia de su hermano, —No vas a sacarme, aunque sea a patadas —aclaró, amenazante—. Sabes perfectamente que soy mil veces mejor cocinera que tú.
Él rió exageradamente, —Claro que no —le quitó el cuchillo de las manos a la rubia y de un empujón empezó a imitar la antigua acción de ella, solo que mejor.
La velocidad con la que terminó de picar la carne fue de tres segundos contado, puso otro trozo igual al que ya estaba listo sobre la tabla de cortar para prepararlo igual de rápido, y siguió en esa misma labor hasta que estuvieron picados los suficientes.
El muchacho hizo un truco con el cuchillo que, para mí, pareció peligroso, pero él se lo tomó como si fuera algo completamente normal. Le dedicó una mirada de orgullo a su hermana, ella giró los ojos, tomó el sartén por el agarre y con ayuda de una espátula removió la carne. Le agregó góticas de vinagre, el delicioso aroma llegó hasta mis fosas nasales.
Mientras que los hermanos seguían en su competencia de cocina, yo me mantuve en mi lugar tratando de ver desde mi ángulo lo que hacían, pero lo que percibían mis ojos eran sus espaldas. Tras un suspiro, apoyé uno de mis hombros contra la pared, entregándole a este todo mi peso corporal. Cerré mis ojos en el intento de descansar mi vista un poco.
Transcurrieron unos minutos hasta que, por fin, estuvo lista la comida. El almuerzo transcurrió tranquilo, Kim y yo hablamos mientras que Lia solo se disponía a terminar su plato lo antes posible, supongo que para librarse de mí. No me gustó para nada que mi presencia le impidiera comer tranquila, así que poco a poco perdí el apetito.
Empecé a jugar con mi comida, apoyando mi mejilla en mi mano. De toda la vida, que yo esté presente causa todo tipo de emociones menos las negativas. Nunca me había pasado que alguien ni siquiera me soportara en la mesa.—¿Jary? —me preguntó Kim.
Lo miré, su rostro estaba inexpresivo.
—Dime.
—¿Hoy no me vas a pedir comida? —dice con burla, a lo que yo giré los ojos con cierta gracia.
—Hoy no. No tengo mucha hambre, que digamos.
—¿Por qué? ¿No te gusta este platillo?
Negué con la cabeza, —Me gusta, solo es que mi apetito no es muy bueno hoy. Solo eso.
Sonrió, alzando las comisuras de sus labios, —Jary, sé que no es eso —admitió. Abrí mis ojos como platos, no quería que malinterpretara todo.
La rubia empujó bruscamente su silla hacia atrás, tomó su plato y su vaso de agua y se retiró con ellos en las manos, captando la atención mía y del peli negro.
Kim suspiró con profundidad.
Formé una sonrisa a medias, pero esta desapareció al instante.
Recogí mi plato y mis cosas y las llevé a la cocina, Kim imitó mi acción. Dejamos todo en el fregadero, haciendo a un lado a Lia, la cual ya había empezado a lavarlos. Bajé la mirada cuando me di la vuelta, para que mis ojos no se encontraran con la expresión de desprecio de parte de ella.
Se escuchó por toda la casa un sonido rechinante, ayudo. Era el timbre, alguien estaba en la puerta y parecía que no tenía mucha paciencia ya que el sonido se repetía una vez cada dos segundos. El muchacho y yo intercambiamos miradas, preguntándonos quién abriría esta vez. Señalé a Kim y él asintió para luego dar pasos hacia la puerta.
La puerta se abrió y Kim se mantuvo quieto.
Estella Byeon
Toqué varias veces el timbre, con mi paciencia hasta el tope. Al cabo de poco tiempo me abrieron la puerta. Quedé cara a cara con el supuesto novio de mi chica. Parece que le sorprendió mi inesperada visita pues se quedó inmóvil.
Sonreí, mi sonrisa especial, —Te alegras de verme, ¿verdad? —jugué con él. Esa sonrisa no desaparecía de mi magnífico rostro, me crucé de brazos, esperando su respuesta.
—¿Estella?
Asentí, pasé mi mano por mi cabello lacio para ponerlo hacia atrás, —La única y original —presumí.
Un suspiro de su parte fue la señal perfecta para aclarar el objetivo en mi mente.
—Vienes a buscar a Jary, ¿cierto? —me pregunta, en una voz baja y entristecida.
—No siempre soy la mala de la película, ¿sabes? —admití, eliminando toda burla de mi rostro—. Vengo a decirle algo importante a tu peli roja, y te apuesto a que no se lo querrá perder.
—¿Qué tan importante?
Ante su duda me puse aún más seria, dejando caer mis brazos a los lados de mis caderas, —No te importa, es asunto de negocios. Solo traéla a ella y ya.
El tal Kim no tardó mucho en girar sobre su propio eje y entrar al apartamento a buscar a Katie.
¿Qué? De verdad que NO soy la mala en esta historia, es solo que trabajo es trabajo. Toda mi vida mis padres me enseñaron a ser así, luchadora e independiente, así que como mi amiga no tiene a sus papás a su lado, me toca cumplir en su vida el papel de madre responsable. Además, tampoco quiero que le vaya mal en el amor... Tal y como me fue a mí.
Katie Chan Jary
Me puse de pie al ver a Kim dirigirse hacia mí con prisa y una expresión facial que no me gustó.
—Es tu mánager —fueron sus únicas palabras, pues dio pasos grandes hacia su habitación y se fue.
Me disgusté, a veces Estella podía ser gruñona y muy presumida, ¿qué podía hacer? Esa es su forma de ser, pero si había llegado a maltratar a Kim, se las vería conmigo.
Nota de la autora:
¡Hola, lind@! Muchísimas gracias por llegar hasta aquí, pero no pares porque aún nos faltan bastantes cosas para acabar. Recuerda votar y comentar en cada episodio para así saber si te gusta la historia que, por cierto, estoy invirtiendo muchísimo tiempo en ella.Solo te pido que no seas lector/a fantasma y me regales uno de tus lindos votitos y comentarios, ya sabes que es gratis ✨💗
➷Besitos cariñositos y... NOS VEMOS!!!!!
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UNIQUE LOVE✔ (#1SAGA: PRIMEROS AMORES)
Fiksi Remaja🔥🔥🔥 Cuando somos pequeños lo único que nos importa es jugar, jugar, y jugar. Pero a medida que vamos creciendo nos preocupan cosas más importantes, entre ellas, el amor. Muchas personas creen que este sentimiento tan hermoso, y algunas veces do...