Capitulo V - Momentos algo random

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Tú, ¿cómo sabes mi nombre? - Su cara es de sorpresa, su rostro se empieza a sonrojar un poco-.

Escuché a Justin como te llamaba - Vuelve a tirar de su cabello hacia atrás, parece tener una rara manía con hacer ese tipo de gesto - Perdón si te incomoda...yo - Niego, aunque él es molesto a mas no poder, debo trabajar con él... ¡MI SUERTE VALE ORO!

No tengo problema con eso... - mis ojos se concentran en su mirada algo desorienta - ¿todo bien? - no responde - Oye ... - paso una de mis manos frente a su rostro-.

Lo siento... ¿decías? - Hasta medio desatento salió el tipo este-.

Dios, ¿que si está todo bien? - asiente - okay, si no tienes nada más que decir... bye - me voy a girar -.

No, espera ... - su mano toma la mía, y ahí está, otra vez ese choque eléctrico, eso hace que pare casi al instante - Enserio, necesito disculparme contigo por lo del viernes – No puedo evitar sentir molestia por el solo aparecer ese choque al contacto, muevo mi cabeza mentalmente para tener toda mi atención en lo que está por decir, así que escúpelo - Tienes razón al decir que no te llevé a ningún hospital pero enserio, te veías tan mal que lo único que se me ocurrió fue llevarte a mi casa - Suspira - ¿Podrías perdonarme? - Parece sincera su disculpa, pero me niego aceptar que no abusó de mi - Te aseguro que jamás busqué aprovecharme de ti y tampoco lo haría - dice y noto una leve tranquilidad en su mirada -.

Es difícil de creer con todas las cosas que nos hacen ... - Digo a lo que el inmediatamente asiente - Mira, yo sólo quiero hacer mi trabajo, es todo... - suspiro con alivio, hay algo en mí que dice que lo mejor es creerle y la verdad, siento que hay verdad en lo que dice - Solo me gustaría saber cómo terminé en tus manos y donde estaban mis amigas, y ya, sin rodeos ...

Yo te puedo ayudar con eso... -se pone completamente recto - Conozco a alguien quien nos puede ayudar a aclarar esa noche, en tu mente - asiento, esperando que, si lo haga y en efecto, saca su teléfono y empieza a escribir en él, ¿qué?, no asentía en forma literal... bueno aunque eso es difícil de deducir, ay no... que vergüenza, solo asentí - Su nombre es Marco, es detective privado y uno de mis trabajadores, le pediré que haga una investigación referente a ello - dice mientras sus ojos están clavados en su teléfono

O...okay, muchas gracias Matthew - le digo con sinceridad, es demasiada preocupación por una desconocida, era broma lo de asentir, ay no... - pero no...

No, esta vez quiero hacer bien las cosas contigo - ¿hacer las cosas bien conmigo?, ¿que soy o qué?, sube su cabeza y nuestras miradas chocan - No me malinterpretes, es solo que hay algo en ti que me recuerda a alguien – Ya hasta alucina -.

Si, bueno... lo dudo mucho - Una mujer se acerca hasta la puerta-.

Perdonen - rueda los ojos al solo verme, le dedica una sonrisa a Matthew, la misma que hacen cuando quieren conquistar a alguien y que su deseo principal es podérselo comer con la mirada o quien sabe, tal vez Matthew sea el típico hombre que solo busca eso en chicas - No lo puedo creer, ¿me puedo tomar una foto contigo? - Matt asiente con una leve sonrisa, la chica me pasa su teléfono de forma algo brusca, casi lo dejo caer, ¡JA! Eso hubiera sido grandioso - ¿Podrías? - Mira cariño, tu trato hacia mí es un asco, no haré dicha acción, pero sé que al final termino accediendo, pues me encuentro enfocándolos con cuidado en la imagen, ¡malditos modales! - Eres el amor de mi vida - ¿eres el amor de mi vida? imito ese gesto en mi mente, ve a que te cambien los pañales, niña...a nadie le importa mugrosa rubia de ojos cafés - Gracias - me dedica una mirada de completo asco, no me provoques... no haré nada, pero no me provoques, la amenazo mentalmente. Agradece que soy una dama y que tengo principios, zorra de quinta avenida. La sigo con la mirada mientras se aleja -.

Peligro En Mi CieloDonde viven las historias. Descúbrelo ahora