Capitulo XII - ¿Qué?

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Número desconocido

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Recibí un mensaje de que debemos

asistir la otra semana a pruebas de vestuario,

solo me pidieron avisarte... Matthew Dalgliesh

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Es lo que contiene el mensaje de Matt, nada del otro mundo, solo trabajo y en sí, es perfecto que tengamos esta relación profesional por el bien de ambos y de las cosas que yo pueda lograr sentir por él, aunque ahora que lo pienso, estas cosas extrañas que le pasan a mi cuerpo en su presencia son solo cosas que debe sentir cualquier ser, quiero decir, supongo que le pasa a cualquier chica que se le acerca, tiene todo lo que una mujer desea físicamente, unos ojos que son tan jodidamente perfectos que pareciera como si el cielo bajara a la tierra, pero nada más que eso... si, es solo eso, un pequeño enamoramiento de niña adolecente, nada que no pueda controlar.

¿Qué dice? – Dice Justin con emoción, como si este mensaje fuera lo último que pasara en el mundo-.

Solo que la otra semana tenemos pruebas de vestuario, es todo

¿enserio?, ¿solo para eso te escribió? – Asiento – Aburrido

No, solo está siendo profesional como debe ser – Digo con cierta verdad, aunque admito que si me gustaría otro tipo de mensaje. Mientras le contesto con "OK" para luego tirar mi teléfono sobre la cama– Oye, ¿tienes planes?

Sí, tengo una cita – Dice mientras sale del mi cuarto – debo tapar estos moretones, no quiero que piense mal de mí -.

Está bien y ¿se puede saber quién es el chico? – Digo con cierto interés principalmente porque me gustaría saber quién le dejó la cara de esa manera -.

Cielo, cita de coches – Dice casi gritando mientras yo me paro en el marco de su puerta –

¡Ah!, creí que... -Niega- lo siento, no sé por qué pregunté si era cita con un chico –

Estarán chicos y coches ... - Dice con orgullo - ¿vienes?

No, creo que iré a hacer algo de deporte hoy, necesito despejar la mente – Asiente mientras me entrega las que serán mis llaves del apartamento. La verdad es que no quiero salir, pero vi que había un gimnasio a solo unas calles, tal vez sirva para despejar mi mente –

Me llamas si necesitas algo – Toma un par de cosas y sale de su cuarto – hay condones en la mesita de noche – me lanza un beso y sale de la casa, dejándome completamente sola, yo regreso a mi cuarto para cambiarme por ropa un poco más cómoda y así poder salir a ejercitarme-.

Los días han pasado y el tema de Matt se ha borrado casi de mi mente, agradezco que desde la producción nos citaran la semana siguiente así podría reponer los días que no pude dormir y enfocarme en hacer el suficiente ejercicio para mantener en forma y con la mente completamente despejada ante cualquier tormento humano que pudiera existir. Creo que esa parte la aprendí bien de papá, el ejercitarme para estar completamente en blanco y lo curioso es que así era con mi hermano, al principio lo veía como algo estúpido el tener que sudar innecesariamente, pero con el tiempo encontré cierto refugio con hacer algún tipo de ejercicio, así mi mente estaba completamente en blanco y no había tantos pensamientos intrusivos. Creo que ha llegado el momento de contextualizarlos un poco de quien soy, verán yo crecí en Tarzana un pequeño distrito en el Valle de San Fernando en Los Ángeles, aunque lo gente dude de ello, allá no creces rodeado de estrellas, al contrario, creces en un lugar en el que eres tan normal como el resto.

Peligro En Mi CieloDonde viven las historias. Descúbrelo ahora