Capitulo XXVII - Confesiones parte final

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Cuando la canción termina, nos acercamos al resto del grupo ellos parecen estar en su onda de risas y bromas. Matt y yo estamos tomados de la mano, es tierno estar en este punto después de años en los que solo me negaba a todo, solo espero que Matt si captara el mensaje como debía y que si me tome como una prioridad alejada de su trabajo.

Llegaron los tortolos – dice Ester –

¿tortolos? ... estaban comiendo enfrente del pobre y ...- se acerca a Matt – eso es pecado querido amigo – Hace que Matt sonría y ponga su mano sobre mi hombro, quitando el contacto de nuestras manos, por instinto la tomo nuevamente a pesar de que se encuentre en otro lugar -

Tortolos o como quieras llamarlo, Finn es un jodido mago – digo –

Gracias – dice dándose besos a sí mismo, me hace reír. Busco a Ella con la mirada, pero no está ni en la mesa ni con ellos -.

¿Y Ella? – pregunto –

La llamaron y dijo que tenía que irse... - dice con tranquilidad Finn –

Por Dios, ¿saben la hora? – les digo con algo molesta, como es posible que la dejen ir sola – como la dejan ir sola a esta hora, Dios mío... – siento como si la secuencia de mi llegada a esta ciudad se repitiera, Ella es mi amiga y no quiero que le pase nada malo – Debo irme, lo siento chicos... – A ellos pareció no importarles mucho eso solo se limitaron a despedirse - ¿Me acompañas? – Matt asiente –.

¿Dónde crees que pueda estar? – me pregunta, si soy sincera no sé y las veces que he hablado con Ella, me ha dejado en claro que no conoce a nadie en la ciudad –

No sé, pero no debe estar muy lejos – Matt me toma de la mano y así salimos del bar. Doy gracias al cielo cuando veo a Ella hablando por teléfono – Ella... - Se gira para mirarme con una sonrisa –

Hailee... - me da un abrazo, por Dios hasta ahora me doy cuenta el nivel de alcohol que tiene, está arrastrando las palabras –  mi gran amiga americana – dice a lo que me río –

Esa misma – le sonrío, aunque si tengo alcohol y el mundo parece darme un poco de vueltas estoy consciente de todo lo que pasa en mi entorno –

Y tu... eres... - dice con una sonrisa – el que hace sufrir a mi amiga americana – Matt me mira con algo de confusión, pero le modulo un "luego te explico" - ¿ya se van?

Nos vamos – le contesto, pero Ella cae desmayada sobre mí, Matt reacciona casi al instante y la toma en brazos –

Mi coche está por allá – me señala una de las esquinas en las que hay varios coches y me entrega las llaves. No voy a conducir y menos en mi estado, el parece notar la confusión – solo es para que abras la puerta –Hago lo que me pide, abro la puerta de atrás mientras veo como Matt la pone en el coche a salvo – bien – cierra la puerta y abre la de copiloto para que yo ingrese, lo hago al instante mientras me pongo el cinturón –

Ella no tomó tanto como para desmayarse... hemos estado juntas toda la noche – Digo mientras él pone el coche en marcha –

Tal vez cuando salió del bar el alcohol la golpeó... ya sabes que el viento – asiento – Haiz, ¿sabes dónde vive?

La verdad, no tengo ni la más mínima idea... - no puedo evitar mirarla – ¿y si vamos a mi departamento?, Justin no tendría problema alguno con eso – Matt asiente –

Como tú digas – Pone su mano en mi pierna y pasados algunos minutos nos encontramos afuera, él está sacando a Ella del coche mientras yo bajo de el mismo – ¿no hay ascensor? – le niego – bueno, será hacer algo de ejercicio – le abro la puerta principal dejando que la suba primero, pero algo me detiene, una camioneta negra se estaciona justo enfrente de donde vivo, dos hombres se bajan de ella y uno parece sacar un cigarro, lo noto por el humo que empieza a salir- ¿Todo bien?

Si – Entro a las residencias y cierro la puerta, ¿Justin invitaría a alguien? O debe ser de alguien más, lo curioso en todo este tiempo es primera vez que la veo. Subo los escalones hasta llegar a la puerta del departamento, la abro dejando pasar primero a Matt – dejémosla en mi cuarto – Le digo mientras abro la puerta de allí, Matt la deja cuidadosamente sobre la cama asegurándose de que esté bien, cosa que también hago –

¿Dónde dormirás? – me pregunta cuando ve que busco una sábana para ella –

En el sofá, ¿a qué viene esa pregunta? – le digo de forma burlona –

No es nada... sólo creí que dormirías acá con ella – le niego, mientras él está en el marco de la puerta mirando lo que hago –

Listo– salimos completamente del cuarto y vamos hacia el salón principal – Me parece extraño que se desmayara, como te dije no bebió tanto

Debió ser el cambio a la hora de salir o no comió antes... - lo mismo que me dijo en el coche, lo repite... y tiene sentido porque todo el tiempo estuvimos juntas y creo que cuidamos de las bebidas lo suficientemente bien. Se sienta en el sillón algo cansado - ¿Tu cómo te sientes? – me pregunta con algo de curiosidad –

Algo mareada pero consciente de todo – me hago a su lado, lo más cerca posible – ni la cerveza la tocaste – le digo mientras pongo mi cabeza sobre su hombro y el acaricia mi espalda

Te dije que cuidaría de ti – dice – Me gusta esto – me separo de él

¿Qué cosa?

El tenerte cerca, sin que me llames idiota  – dice cosa me hace reír, me giro subiendo mis pies al sofá –

Lo de idiota te lo ganaste tu solito – me sonríe – y también me gusta estar en este plan – me acerco lo suficiente para darle un corto beso en los labios, me separo casi al instante – gracias por ayudarme con Ella, lo aprecio demasiado.

No es nada, es tu amiga... - dice sin dejarme de ver – oye, fue una noche extremadamente increíble, pero debo irme...mira la hora, no quiero despertar a Justin y verlo de malhumor - Miro hacia la puerta y está completamente mente cerrada –

Entiendo, te repito gracias por lo de Ella – el asiente poniéndose de pie –

Lamento ser un patán contigo - me dice -

Patán y todo, te estoy dando la oportunidad de tener citas...- lo acompaño hasta la puerta, sale del depa y nos quedamos mirando como idiotas - entonces...

¿Te gustaría ir mañana a una carrera? - me dice con algo de timidez - si no quieres... No hay...

Claro - me dedica una leve sonrisa -

¿Enserio? - asiento - puedes invitar a tu amiga...

No creo que Ella esté en sus cinco sentidos para ir pero.... Le diré - me acerco a él poniendo mis manos en su cuello, mientras el pone sus manos en mi cintura -

Tus labios son adictivos - me dice dándome un corto beso - le diré a mi hermano que venga a recogerte - asiento mientras le sonrío - te veo mañana, descansa - me da otro beso corto y se marcha.

Peligro En Mi CieloDonde viven las historias. Descúbrelo ahora