Advertencia: Capítulo un poco picante.
La playa se ha vuelto uno de mis lugares favoritos: adoro la brisa, la arena en mis pies y color del océano. Me recuerda a...
No, ¿Por qué debería pensar en ella?
Incluso hoy en la mañana, siquiera me dirigió la palabra. Seguía molesta con lo de anoche y siendo sincera, yo también.
Seguramente ahora debe estar feliz en alguna cita con el comandante y cuando yo regrese, a lo mejor y me dan la noticia de que oficialmente son pareja.
Y otra vez... el ciclo interminable de estar enamorada de alguien que no es como yo seguirá.
Aunque algo me dice que no será como otras veces.
De pronto, a mi mente viene la imagen de Nora con un anillo de bodas y un vestido blanco, luciendo tan hermosa y feliz a punto de caminar al altar para reunirse con lo que siempre había esperado. Mientras yo estoy atrás, en la multitud y, lo más posible, siendo la madrina.
Muchas veces me dije a mí misma que estaría bien conmigo misma viéndola feliz, pero es cierto.
Soy mentirosa, egoísta y codiciosa.
Odiaría ese escenario.
No estoy dispuesta a que sea haga realidad, o al menos, no acepto estar ahí.
Primero huiría antes que ver eso con mis propios ojos.
—¿Jennifer, estás bien? —La mano de uno de mis colegas en el set de fotografía me hace volver a la realidad—. Te estamos hablando y solo te quedas mirando al horizonte.
Estamos en una de las piscinas más cerca de la playa, en un hermoso hotel de lujo. Por lo que escuché, es propiedad de uno de los colegas del padre de Saiko. En verdad cada vez sorprendo de la influencia que tiene ese hombre.
—Sí, sí. Ya voy.
Camino detrás de mi colega hacia las cámaras y el equipo. Solo estamos esperando a que Saiko salga. La colección que ella lucirá serán varias ropas que se usarán para este verano: desde vestidos de playa, ropa cómoda para tomar una copa, hasta...
—¡La modelo ya está lista! —grita alguien del equipo.
Al lugar llega Saiko con una bata puesta y un maquillaje perfecto para la playa, además de unas increíbles gafas de sol. Con la ayuda de equipo de vestuario, ella se quita la bata y deja ver que está usando un bikini de dos piezas de color naranja. Es muy similar al que ella me regaló, solo que una talla más pequeña que la mía.
En verdad que ella luce tan confiada y segura de su cuerpo, me da un poco de envidia. Todavía no llego a ese nivel de confianza y no creo llegarlo.
—Señorita Park, estamos esperando indicaciones.
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Perdóname, Amiga
RomanceJennifer Park y Nora Sanders han sido mejores amigas desde el último año de preparatoria, pero Nora no está consciente de que Jenny siente más que amistad por ella y tampoco Jenny quiere decírselo debido a que todos los intereses y parejas de su ami...