18

11.5K 993 57
                                        

Agosto

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Agosto. Año 2006.

En estos últimos días han pasado varias cosas: envíe mi respuesta, revisé mis papeles de viaje, empaqué mis maletas y dejé todo listo para partir. Desde aquella tarde, no he hablado ni visto a Nora. No he recibido alguna llamada, mensaje o correo, ni tampoco lo he hecho yo. Luego de decirle que me iba, me fui y ella no me siguió.

Supongo que es mejor así, no aguantaría despedirme ni enojada, feliz o triste de ella.

He pensado en que, si estoy lejos de ella, pueda hacer que mis sentimientos se calmen y... desaparezcan. Por fin entendí que Nora jamás me verá como quiero y tampoco tengo valor para decirle. Soy cobarde, sí. Prefiero alejarme y callarme, a contarle y perderla.

Al menos, de esta forma, sé que será feliz y al menos podrá recordarme con nostalgia, no con odio y desprecio.

Ahora estoy en el aeropuerto, con mis padres que me acompañan hasta la puerta para abordar el avión. Mi madre está llorando, pero me desea toda la suerte del mundo. Papá es igual, pero trata de mantenerse firme. Los voy a extrañar muchísimo.

Luego de caminar por el pasillo y una vez adentro, antes de que despegara, miro por última vez mis mensajes. No hay nada. ¿Por qué, incluso ahora, me aferro a la idea de que ella aparezca? Gracias a Nora, me di cuenta de algo.

Una sola persona te puede hacer sentir las más maravillosas cosas del mundo como a la vez las más dolorosas.

Entonces... así... termina esta historia de un amor no correspondido.

...

...

... No. No quiero esto.

No puedo acabar con seis años de mi vida de esta manera. No quiero irme hasta decirle una última cosa. Quizás sea el enojo o la adrenalina del momento la que me da fuerza, pero no me importa. Entonces, comienzo a escribir un mensaje antes de que la azafata me pida que apague mi celular. Con el último acto de valentía hacia este amor que he sentido por ella, mando mi último adiós.

Para: Nora Sanders

Perdóname, amiga.

Te amo.

-Final de Parte I-

-Final de Parte I-

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.



Perdóname, AmigaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora