No sé por qué acepté que entrara a la habitación y que acostara en la misma cama que yo, me es imposible cerrar los ojos ahora. Sé que ya me he dormido varias veces junto a ella desde hace años, pero esta es la primera vez que siento que mi corazón está por reventar. Tal vez sea por el hecho de que ella está consciente de mis sentimientos. Aunque estamos espalda contra espalda y en una cama bastante amplia, no puedo evitar sentir ambiente muy pesado. ¿Debería decir algo?
—Jenny, ¿Puedes dormir? —Nora pregunta con una voz suave.
—No —murmuro.
—¿Podrías voltearte?
Entonces, giro y me encuentro con sus ojos azules nuevamente. Tantas ideas y sentimientos se me vienen a la mente ahora, más cuando ni ella ni yo apartamos la mirada hacia la otra.
—Al parecer tú tampoco puedes dormir, Nora.
—Siento que ya me he acostumbrado a dormir tarde o no dormir. —Suspira.
¿Quizás... puedo... acercarme? No lo sé, tengo dudas. De repente, ella me acaricia la mejilla. Me estremezco tanto que me quedo inmóvil, disfrutando su toque.
—Tu piel están suave, Jenny —susurra.
¿Estoy imaginando? ¿No es un sueño?
No tengo idea, pero... tal vez así pueda yo... aprovecharme un poco.
Me acerco, bastante, para abrazarla con fuerza y rodearla con mis brazos. Coloco su cabeza cerca de mi pecho y apoyo mi barbilla en su cabeza.
—¿Qué tal así? Tal vez yo te pueda ayudar.
Su respiración está muy cerca de mí. Tal vez hacer esto es una pésima idea.
—Me gusta lo cálida que siempre eres, Jennifer.
—No digas esas... cosas.
—¿Por qué?
Me dice cosas que me sonrojan, teniéndola tan cerca de mí... me es imposible controlar mi corazón.
—Mañana te llevaré también que te corten bien ese cabello. Me gusta tu estilo corto, pero está hecho un desastre —menciono mientras acaricio su cabello.
—¿Te gustan las chicas de cabello corto? Como Saiko.
No esperaba que la... mencionara.
—No me fijo en eso, Nora. —Suspiro.
—Por tu suspiro, supongo que no terminaste bien con ella.
—Luego te contaré bien esa parte, pero, en resumen, fue mitad y mitad.
—Ya veo.
—¿Fuiste feliz con ella en Japón?
—Las primeras semanas fueron las mejores, luego... fue pesado. Me sentí muy sola.
—¿Sola?
—Sí, me sentía como esos días en la preparatoria. No digo que la quería siempre junto a mí, pero... las cosas resultaron ser muy distantes para mi gusto y aunque había momentos en los que podíamos estar juntas, luego los días separadas no lo podían compensar. Yo quiero que sea feliz en su trabajo, pero también quiero ser feliz yo. También por eso me fui con ella y me alejé de ti.
—Lo siento.
—¿Tú fuiste feliz con Ray?
—Él es... todo lo que una vez soñé, el príncipe que siempre quise y un gran hombre, pero... algo en mi corazón decía que no podía tener a alguien más que a ti.
No puedo evitar abrazarla más.
—... En verdad, ¿Me amas tanto, Jennifer?
—No tienes idea de cuánto.
Nora se queda callada unos segundos. No puedo ver su rostro ahora, pero... deseo hacerlo tanto.
—Hay tanto que debo contarte, Jennifer —murmura.
—Soy toda oídos, Nora.
—... Lo haré, pero por ahora... quiero quedarme así, en paz y a tu lado.
Me muero por escuchar todo lo que no sé de ella. Lo quiero todo, quiero conocer cada cosa, por más pequeña que sea, pero será cuando ella lo decida. No la presionaré, solo... me quedaré a su lado y estaré listo cuando esté lista.
—Bien.
Luego de eso, no decimos palabra alguna. La respiración de Nora y su calor me hace que me quede durmiendo lentamente.
No es lo que imaginaba, es cien veces mejor.
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Perdóname, Amiga
RomanceJennifer Park y Nora Sanders han sido mejores amigas desde el último año de preparatoria, pero Nora no está consciente de que Jenny siente más que amistad por ella y tampoco Jenny quiere decírselo debido a que todos los intereses y parejas de su ami...