Un leve sonido proveniente de la puerta nos hizo voltear a Hoseok y a mí, nos miramos entre nosotros con los controles de los videojuegos aún en las manos.
—Hoseok, ya casi es hora —dijo la otra voz detrás de la puerta, que pude reconocer como la del padre de Hobi.
Los hombros de Hobi bajaron con decepción y resopló algo molesto. —Sí, papá, ya sé —rodó sus ojos para después poner pausa al juego y mirarme—. Yoongi, creo que tienes que irte.
Dejé el control en un lugar cercano y miré a Hoseok confundido. —¿En serio? ¿Por qué?
Miró a su alrededor, como si hubiera alguien más en la habitación quien le dijera las palabras que estaba buscando, su mirada se puso en el suelo y después en mí, apenado. Yo no entendía por qué tenía que irme si Hoseok me había invitado esa misma mañana, hasta donde yo sabía, era la fiesta de cumpleaños de su hermana mayor y por eso me había invitado. No es que me preocupara no estar presente en la dichosa fiesta, pero definitivamente quería pasar más horas a su lado.
—Yo... Lo siento... —respondió el castaño, pasando su mano derecha por su barbilla—. Yo sé que yo te invité, pero hace un rato que bajé a la sala, mi mamá me dijo que te pidiera que te fueras.
Asentí lentamente, tratando de poner mi mejor gesto para no preocuparlo, sonreí a medias y me encogí de hombros. —Oh, está bien. No te preocupes, Hobi.
Sus bonitos labios se abrieron muy poco, creí que iba a decirme algo, pero pareciera que se le escaparon las palabras, así que sólo se limitó a mirarme compasivamente. La opinión de la familia de Hoseok sobre mí no me importaba ni una mierda, pero no podía negar que me dolía que lo hicieran apartarse de mí de esta forma. Y ni siquiera era por el hecho de que estaba enamorado de él, sino porque, antes que nada, era mi mejor amigo.
Miré a mi alrededor para buscar la mochila que había traído conmigo, pero también para evitar que Hoseok viera el gesto sombrío que se había plasmado en mi cara y que no me podía quitar. Hobi sólo me miraba, probablemente estaba sintiendo lástima por mí, así como lo hacía toda su familia. Ya hace tanto tiempo que pasó lo de mi padre, pero todos los que vivían por ahí nos seguían conociendo como "los hijos del borracho", o "los niños huérfanos". Eso incluía también a la mamá de Hobi.
—De verdad perdóname, Yoongi, yo no sabía que...
—Te digo que está bien, Hoseokkie, en serio —dije—. Por favor diviértete mucho y deséale feliz cumpleaños a tu hermana de mi parte.
—Voy a acompañarte a la salida.
Asentí sin mucho interés y me colgué la mochila al hombro, caminé lentamente hasta que estuve en la puerta, con Hobi caminando detrás de mí. Bajamos las escaleras sin hacer ruido y cuando llegamos a la planta baja ahí estaban el padre de Hoseok y algunos familiares que yo ya había visto antes.
—Buenas tardes, con permiso —dije sin mucha voz, aunque eso no importaba, de todas formas, nadie respondió a mi saludo.
Cuando estuvimos finalmente en la puerta principal, Hoseok me miró con esos bonitos y grandes ojos llenos de culpa. Incluso si yo me sentía mal, lo que menos quería en el mundo era que Hobi se sintiera triste por algo. Puse una mano en su hombro y le sonreí sinceramente para hacerle saber que todo estaba bien, entonces abrí la puerta y me encontré con una chica: era alta y con una piel nívea que resplandecía de una forma muy bonita, su sedoso y largo cabello castaño estaba acomodado de una manera sencilla y adorable, y ella sostenía una caja en su mano mientras que la otra estaba levantada, como si hubiera estado a punto de tocar a la puerta. En la cajita había una nota, donde se podía leer: "Feliz cumpleaños".
Era Mijoo.
Al darse cuenta de que alguien había abierto la puerta antes de que ella siquiera tuviera la oportunidad de tocar, sonrió alegremente. —¡Yoongi! Hola, no sabía que estabas aquí, justo iba a llamar a la puerta.
—No te preocupes, ya me iba —respondí con simpleza. Pasé al lado de ella y crucé el umbral de la puerta. Ella, por su parte, se dio la vuelta para mirarme.
—¿Por qué? ¿No piensas quedarte a la fiesta? —preguntó. Cuando terminó de pronunciar esas palabras entró a la casa, tomando "su lugar" al lado de su novio, quien sólo estaba parado ahí como una estatua—. Hola, bebé —dijo ella, dirigiéndose a Hobi.
—No, no puedo quedarme —respondí—. Tengo cosas que hacer... Espero que se diviertan.
Y ahí estaba él, con una expresión tan dolida que me dieron ganas de hacer a Mijoo a un lado y abrazarme a su alta figura para no soltarlo nunca más. Él solo me miró por última vez y cerró la puerta.
Me quedé ahí sin moverme por unos segundos, hasta que me di cuenta de que no podía permanecer toda la tarde, empecé a caminar por el patio delantero para dirigirme a mi casa, cuando un alegre conjunto de voces, proveniente de la casa de Hobi, llamó mi atención. Me di la vuelta y pude verlo todo desde una ventana.
Mijoo. Ella combinaba perfectamente con el escenario, su delicado vestido rosa y su cabello café, su sonrisa blanca y su voz finita, todo se veía muy bien al lado de Hoseok. Todo se veía muy bien dentro de la clásica casa y del típico retrato familiar. Los familiares de Hobi la recibieron con felicidad, besos y abrazos. Yo nunca podría pertenecer a su lado por más que lo intentara, yo jamás sería la persona que sostendría la mano de Hobi en medio de la gente, ni tampoco sería aquel a quien llevaría a las fiestas familiares.
—¿Ahora ves que no perteneces aquí, al lado de Hoseok?
Me di la vuelta rápidamente y me encontré con la mamá de Hobi, traía algunas cosas en sus manos y ya estaba vestida para la ocasión, al parecer acababa de llegar. Su expresión no era de burla ni mucho menos, sólo estaba parada ahí, su rostro me decía que ella estaba convencida de que tenía la razón.
Yo, como el gran cobarde que siempre fui, sólo agaché mi cabeza y jugué con la tela de mi camiseta entre los dedos.
—Te lo digo por tu bien, Yoongi —ella volvió a decir—. No quiero hacerte sentir mal, pero tú y yo sabemos que no encajas aquí, nunca lo has hecho y jamás lo harás.
—Con permiso, señora.
Caminé, alejándome paso a paso de la casa, alejándome paso a paso de esa señora.
Y alejándome paso a paso de Hoseok.