CAPÍTULO 13

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Alexia

Desperté más temprano de lo normal con la intención de tener todo fríamente calculado.

Desayuné en el tiempo acordado y me duché a la hora y en el tiempo establecido.

Sin embargo, llevaba largos minutos sentada en el borde de la cama, con las puertas del armario abiertas, inspeccionando cada una de las prendas que se encontraban almacenadas en él.

Bajé la mirada hacia la cama para ver las posibles opciones que había elegido para vestir el día de hoy, pero no me terminaban por convencer del todo.

Era miércoles y mi indecisión se debía completamente a los planes que tenía con Andrew por la tarde. No me preguntes por qué me encontraba tan estresada, pensando analíticamente lo que debo usar el día de hoy, porque ni siquiera yo lo sabía.

Tomé entre mis manos las dos opciones y me acerqué al espejo para sobreponerlos en mi cuerpo y así finalmente decidirme por uno.

Arrugué la nariz al probar las dos opciones y suspiré. Seguían sin agradarme por completo.

Miré el reloj y me reprendí por estar perdiendo el tiempo. Cada minuto contaba, se hacía tarde y aun me faltaba ver qué hacía con mi cabello.

Solté una carcajada mientras mi mente volaba pensando lo ridícula que era la situación en la que me encontraba justo ahora.

Definitivamente no debería estar preocupándome por como lucir cuando estoy con él, pero es algo que no puedo evitar.

Me aterra darme cuenta de que los sentimientos tan platónicos que según yo ya tenía enterrados y superados hacia él, se están encendiendo de nuevo cada que me permito conocerlo más y no deberían estar ahí, porque sé que él no está disponible. No para mí.

Dejé caer los dos conjuntos de ropa sobre la cama nuevamente y me dirigí hacia el baño para arreglar mi cabello y maquillarme un poco, reprendiéndome nuevamente por importarme tanto lucir bien. Y todo porque saldré con él.

Una vez lista, regresé a mi habitación y decidí guardar los dos conjuntos que yacían en mi cama, para elegir rápidamente otro.

Después de quedarme de pie frente al armario por largos segundos, analizando nuevamente todas las prendas que había dentro del él, opté por vestir unos jeans oscuros, junto con una camisa adornada con flores rosas y pequeños destellos negros regados en su totalidad, terminando con unos tenis blancos y un abrigo negro. Un conjunto bastante básico, claro está, pero al final, el resultado terminó convenciéndome.

No sé a dónde tenga planeado llevarme, pero considero que el abrigo le da un toque formal en caso de que sea necesario. Sin embargo, lo dudo. Andrew es una persona muy sencilla a pesar de la cantidad de dinero que seguramente tiene resguardado en sus cuentas bancarias.

💡💡💡

El día en la editorial estuvo tranquilo, muy tranquilo.

Estuve traduciendo hasta cansarme, pero gracias a eso puedo restar un libro pendiente menos de los tres que me quedan.

Aunque también, estuve a punto de regarla y a lo grande.

Estuve a nada de mandarle a Ryan el libro de Andrew completamente traducido, pero milagrosamente recordé que se supone, las reuniones que me restan con él son acerca de este y que, obviamente, debería aprovecharlas para hacerle mejorías.

Aun cuando sé que le dejé saber a Ryan que ya había terminado de traducirlo y que no necesitaba las reuniones, no puedo solo omitirlas, aunque es lo que básicamente estoy haciendo. Pero eso nadie tiene porqué saberlo.

Bajo la luzDonde viven las historias. Descúbrelo ahora