13.

5.5K 393 79
                                    

Anteriormente.

A veces soltaba pequeñas risas a causa de qué Vee se quejaba constantemente por el ardor del waffle a la hora de sacarlo. Dato importante de ella, siempre se está lastimando.

° × °

Venus.

Me iba a comer el waffle sin nada encima, no estaba cómo para comer azúcares en exceso, si Adrian me cachaba, nada saldría bien. Pero noté cómo Tom se levantaba, abría el refrigerador y sacaba una canasta de fresas y una botella chocolate derretido. Me maldije internamente por decirle lo fanática qué era del chocolate... Sobre todo cuándo le ponen fresas.

Yo comencé a negar rápidamente con la cabeza, mientras que Tom asentía de igual forma.

—No puedo —bajé la mirada, sintiendo cómo Tom volvía a tomar asiento a mi lado, rozando su brazo con el mío.

—Sí puedes.

Voltee a verlo, al notar que él ya se había servido chocolate derretido en sus waffles y lo había decorado con fresas encimas, me motivé mentalmente para poder vaciar aquel líquido obscuro y dulsoso en mi desayuno.

Mis ojos mostraron un brillo blanco al meter un bocado de comida en mi boca, soltando varios gemidos por lo delicioso qué estaba. Cerraba los ojos saboreando lo dulce y la frutilla jugosa. Era lo mejor, no había comido esto en mucho tiempo, y aunque me sintiera culpable después, no me arrepentía por el momento.
Tom a mi lado comía de manera lenta, fruncí mi ceño al notar que por cada pedazo que cortaba con el tenedor, se le quedaba mirando de manera fija, pensando en si comerlo o no, y cuando lo hacía, tragaba de manera desesperada, cómo si quisiera evitar masticar lo menos posible.
Evité preguntar el porqué de aquellas acciones y me limité a terminar de desayunar.

Mi plato quedó completamente vacío después de varios minutos. Pronto me levanté y recogí mis trastes dejándolos en el lava-platos, iba a levantar también los de Tom, pero él me detuvo.

—Está bien, yo los lavo, tu deberías descansar —tomó mi mano con cuidado y lo alejó de su traste, brindándome una sonrisa que me dejó paralizada.

Respira Venus, respira.

¿Pero de dónde salió este hombre? Como siga así yo le propongo matrimonio, con eso de qué hasta los platos lava, no' más digo.

Me aparté de él cuando se levantó de su silla, caminando hacia el fregadero. Me quedé estática en mi lugar pensando muy bien si mi siguiente movimiento iba a ser prudente y no iba a espantarlo o a ocasionarle algún tipo de incomodidad. Pero bueeeeno, vida solo hay una, y a mi me vale madres todo, ¿no?

Caminé unos pasos hasta llegar a su lado, me puse de puntillas y pegué mis labios a su mejilla, acto que pareció sobresaltarlo, pero no lo suficiente cómo para apartarme, y tampoco hizo algo para detenerme, probablemente era porqué tenía los platos con jabón en sus manos, aunque si quería me estrellaba uno en la cabeza y ya está, eh.

—Gracias, de verdad —notaba cómo sus ojos me penetraban completamente. En ese momento lo único que se escuchaba era la presión del agua cayendo, y cómo él no dejara de mirarme así, mi presión sería la próxima en caer. En un dote nervioso lo golpee en el hombro, y creo que me pasé de fuerza, porque pude percatarme de la mueca de dolor en su rostro —. Cómo sigas así, podrías ser el primero en la fila.

Solté risas que demostraban lo nerviosa que estaba, mientras daba media vuelta y me retiraba de ahí con un suspiro largo saliendo de mis labios.

Un estruendo hizo que me detuviera rápidamente, asomando mi cabeza desde las escaleras para poder ver la cocina, dónde Tom se encontraba. Ladee la cabeza ante eso.

𝐒𝐄𝐗 𝐖𝐈𝐓𝐇 𝐆𝐈𝐑𝐋𝐒  -ᴛᴏᴍ ᴋᴀᴜʟɪᴛᴢ-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora