𝓤𝓷 𝓹𝓵𝓪𝓷 𝓪𝓻𝓻𝓾𝓲𝓷𝓪𝓭𝓸

1.3K 115 136
                                    

┏ ----------------------------------- ┓

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

┏ ----------------------------------- ┓

Thomas Holland

┗ ----------------------------------- ┛

Escuché la puerta de nuestra habitación ser azotada con violencia por parte de mi esposa. Me pasé las manos por mi cabello respirando profundo unos segundos; habría deseado ir corriendo detrás suyo y explicarle pero tenía asuntos de los cuales encargarme tan pronto como me fuera posible.

Me encaminé a la sala, al cruzar el umbral miré a Bellamy sentado en uno de los sofás, al verme se levantó cual resorte con un bolso deportivo en su hombro derecho.

—Ya está, jefe —me avisó dando un par de golpecitos a su bolso—. Lo conté, todo está aquí.

Lo miré dejar el bolso en la mesa de café y abrirlo. Me acerqué para ver el contenido, eran varios fajos de billetes, tomé uno y vi el contenido cerciorándome que fueran reales.

—Ahora esto es lo de menos, Ricci. —Mencioné llamando a Ford y esperando que contestara.

— ¿Qué? ¿Cómo que lo de menos? Literalmente mi vida dependía de ese bolso y lo que hay dentro, ¿cómo que es lo de menos? —Cuestionó ofendido.

— ¿Sí? —Contestaron del otro lado de la línea.

—Bellamy ya trajo mi encargo, avísale a su halcón.

— ¿Me estaban espiando? —Preguntó Bellamy.

—Sí, jefe, le avisaré enseguida.

— ¿Todos están en el lugar que te dije que los reunieras?

—Sí, jefe, ya estamos esperándolo.

—Bien —colgué la llamada y miré al muchacho frente a mí—. Nos vamos, apresúrate.

— ¿Nos vamos? ¿Adónde? ¿No fue suficiente el bolso? No puede ser...

—No seas estúpido, Ricci, no se trata de ti por ahora.

—Ah, menos mal —pareció más tranquilo al escucharme—. Espere, ¿por ahora?

Cerré el bolso deportivo y lo dejé detrás del sofá de tres asientos para caminar con él a la salida de casa hacia el coche donde James ya nos esperaba.

—Las cosas con el cabrón de Oswald se complicaron. Al parecer alguien más se nos adelantó con ese grandísimo hijo de perra.

— ¿Qué? ¿Por qué? ¿Ya se lo madrugaron?

—Aún no. El plan inicial era llevarlo a la antigua bodega apenas lo interceptaran de camino a su casa, ahora el plan cambió.

— ¿Por qué o qué? Oiga, no estoy entendiendo nada.

—Conformate con entender que ya no vas a terminar en una fosa común esta noche, Ricci.

James condujo hasta la nueva ubicación donde me reuniría con Ford, Yun y Dunn. Se estacionó frente al casino y bajó para abrirnos la puerta trasera.

𝓜𝓪𝓯𝓲𝓪 (+18)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora