Ríndete ante mi [MESSI X OCHOA]

70 Lio por Messi

Perdónenme por tanto tiempo sin publicar, pasaron cosas en mi vida✨

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Lionel despertó como en cualquier otra mañana, pero algo extraño aconteció en sus sentidos, una sensación dura y horrible lo invadía, odiaba sentirse así, vacío.

El malestar era profundo, difícil de explicar. No entendía por qué le costaba tanto desempeñar su maldito trabajo, entrenar, jugar y concentrarse en el juego.

La afición y los comentaristas notaron un cambio en él desde su regreso al juego después de ganar el campeonato mundial en Qatar. Todos hablan de su bajo rendimiento y comparan el nivel con el que jugaba cuando se convirtió en campeón del mundo.

Los rumores corrían como un río desbordado, señalando que Lionel estaba atravesando un mal momento en Francia debido a problemas internos con el club. Sin embargo, la realidad era muy diferente. La verdad era que Lio no mantenía conflictos con el PSG, al contrario, se sentía cómodo allí. Eran sus problemas personales los que estaban causando incomodidades y lo llevaban a cuestionar su continuidad en el juego.

La suspensión de dos semanas que le impusieron, y por la cual tuvo que pedir disculpas en sus redes sociales, fue la gota que colmó el vaso. La presión que sentía era infernal. Amaba a su esposa y a su familia, adoraba su trabajo, y salir a la cancha a jugar era su gran pasión. No obstante, poco a poco, esa pasión se fue desvaneciendo, y es que el amor de ese hombre mexicano de rizos había irrumpido en su vida sin que él pudiera amortiguar el torbellino de emociones que le inundaba.

Las noches se volvieron interminables, con pensamientos y dudas que lo asaltaban en la soledad de su habitación. Se cuestionaba a sí mismo, buscando respuestas que parecían esquivarse entre la bruma de la confusión. ¿Qué estaba pasando? ¿Por qué se sentía tan vacío a pesar de estar rodeado de éxito y reconocimiento?

Lio intentó en vano encontrar consuelo en su profesión, pero incluso el campo de juego, que antes era su refugio, se volvió un escenario de angustia y desesperación. Su mente divagaba mientras jugaba, cometiendo errores inusuales y sintiéndose desconectado de cada movimiento que antes fluía naturalmente.

La prensa no tardó en notar el cambio en su desempeño, y los comentarios negativos inundaron los titulares. La sombra de su antiguo yo, el campeón que conquistó el mundo, se cernía sobre él, recordándole lo que solía ser y contrastándolo con lo que era ahora.

Su familia y amigos intentaron apoyarlo, pero no podían entender completamente lo que estaba atravesando. Temían que la esencia misma del futbolista excepcional que era se perdiera para siempre.

La nostalgia se apoderó de Lio. Recordaba los días en los que cada paso en el campo lo llenaba de alegría, en los que la pelota era su mejor amiga y su pasión por el juego era la brújula que guiaba su vida. Anhelaba desesperadamente volver a sentir esa conexión, pero algo había cambiado dentro de él, y no sabía cómo recuperarlo.

Finalmente, llegó el momento de tomar una decisión. Era una encrucijada en su carrera, pero también en su vida personal. Debía enfrentarse a sí mismo y descubrir qué lo mantenía atado a un pasado que ya no existía y debía cambiar en el futuro, y cómo encontrar una nueva motivación para seguir adelante, no solo se trataba del fútbol, de trataba del amor.

La prensa y los aficionados esperaban ansiosos una declaración oficial, una explicación para el rendimiento decreciente y los altibajos emocionales del ícono futbolístico. Pero Lio sabía que no sería una tarea fácil compartir sus sentimientos más profundos con el mundo.

Y así, mientras se preparaba para lo que podría ser su confesión más importante, Lio también comprendió que el proceso de sanar y redescubrir su amor sería un viaje largo y desafiante. Sin embargo, estaba decidido a enfrentarlo y encontrar la verdadera esencia de su ser, sin importar lo que el futuro le tuviera reservado.
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Los amo💖

Besitos de vainilla para todes<3