Narrador
Poco a poco fuiste despertando, tus sentidos se activaban lentamente, entre ellos tu tacto, se sobresaltaste a sentir a alguien junto a ti.
Abriste los ojos y viste a Aizetsu quien estaba acostado a tu lado abrazándote, alzaste tu cabeza y tu mirada conectó rápidamente con la suya.–Buenas tardes Yume… –habló el susodicho con un tono suave mientras acomodaba un poco tu cabello alborotado.
–Buenas tardes… –respondiste sin apartar la mirada del demonio, tus mejillas poco a poco empezaban a enrojecerse –E-eh tu…
–Tuve que quedarme contigo por que hacía mucho frío… estabas temblando…
–¿Entonces dormimos juntos toda la noche? –preguntaste apenada.
–Bueno… la verdad los demonios no podemos dormir.
–Ay no quería molestarte así…
–No fue ninguna molestia –te acaricio la mejilla con suavidad –lo volvería a hacer sin problemas… es más… no me importaría si incluso durmieras un día entero –esto ultimo lo dijo algo sonrojado.
Ambos se miraban con mucha pena, tu seguías en los brazos de Aizetsu, sus rostros estaban cercanos y podían sentir las respiraciones del otro. El demonio de ojos tristes no podía dejar de ver tus labios, sentía que lo llamaban a gritos y su corazón estaba como loco.
De la nada Aizetsu se alejó de ti de forma brusca, pero no por su propia cuenta si no por que los otros dos demonios se aparecieron agarrándolo a la fuerza para llevárselo a rastras de allí.
–¡¡Así que aquí estabas todo este tiempo!! –gritó molesto Karaku mientras tiraba de sus pelos.
–¡¡Como te atreves a aprovecharte así de Yume!! –habló Urogi quién estaba igual de molesto tirando de su ropa. Tu te levantaste rápido a seguirlos.
–¡¡Chicos déjenlo en paz!! –dijiste tirando de su pie –¡¡No ah hecho nada malo!!.
–¡Traigan a ese traidor lo tiraremos en el sol! –gritó molesto Sekido desde el otro lado de la finca. Los dos demonios obedecieron y se dirigieron a la puerta del patio pero tu te opusiste bloqueándo el pasillo parándote al frente de ellos.
–¡¿Qué les pasa chicos?! ¡¡Ya les dije que no pasó nada!! –hablaste muy molesta y confundida.
–¡El sabe lo que pasa! –respondió Karaku mirándolo enojado.
–¡Si! Rompió el pacto, no tenía permitido cruzar esa línea! –habló Urogi.
–No me arrepiento de nada así que tírenme al sol si quieren –dijo el ojiazul con voz firme.
–¡Ya lo escucharon! ¡Hazte a un lado mujer! –gritó Sekido.
–¡No no no no no! ¡Nadie va a tirar a nadie al sol!.... Haber explíquenme de qué clase de pacto hablan? –dijiste cruzándote de brazos alzando una ceja.
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Renacida (Hantengu clones x tn)
RomanceEn ésta historia eres Yume Nishimura, una joven cazadora de 18 años que fue secuestrada por 4 demonios que dicen conocerte de tu vida pasada. Harán todo lo posible para que recuperes tus memorias. Podrás recordarlos? Descúbrelo, en esta historia ro...