En ésta historia eres Yume Nishimura, una joven cazadora de 18 años que fue secuestrada por 4 demonios que dicen conocerte de tu vida pasada.
Harán todo lo posible para que recuperes tus memorias.
Podrás recordarlos?
Descúbrelo, en esta historia ro...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Narrador
“Y-yume dijo que aguantemos el mayor tiempo posible…
Espero que llegue ra-rapido”
Pensó Hantengu, mientras temblaba sobre el techo de una casa.
“Tenemos ordenes estrictas de matar a todos…
Puedo ver como empezaron a evacuar… pero lo están haciendo de una forma calmada, como si no supieran que estamos aquí…
Aun que eso es bueno… Gyokko no sospechará de que dimos aviso a nuestro ataque…”
La orden del patrón para evacuar la villa de los herreros llegó más tarde de lo esperado, pues el viaje para hacer circular la noticia también fue extenso.
Pero se logró dar un mensaje a tiempo.
Kagaya dio la orden de mudar la villa sin dar una explicación, no quería inducir el caos.
Nadie sabía que la villa estaría bajo ataque.
Pero confiaría en los dos pilares, que por fortuna del destino se encontraban allí, sabía que sus hijos podrían derrotar a la quinta creciente.
Pero todo igual llevaría a un caos.
Hantengu decidió adentrarse a un edificio, si bien no quería matar a nadie era imposible que se quedase sin hacer nada, debía seguirle la corriente a su compañero para no levantar sospechas a su señor.
Fue así que llegó a una habitación donde se encontraba un chico ojos color menta, y cabellos azabaches con puntas del color similares a sus ojos. Otro cazador que tenia cabellos borgoña y aretes hanafuda, acompañado de una muchacha demonio.
Reconoció al instante al joven y a la chica demonio de los que su señor advirtió.
–Respiración de la niebla. Cuarta postura:corte de avección.
El chico de ojos color menta y cabellos azabaches dio un largo y fugaz ataque hacia el demonio, pero él lo esquivó saltando hacia el techo, fue así que el chico de aretes hanafuda dio una estocada con su katana en su dirección provocando que cayera al suelo y recibiera una patada por parte de la chica demonio.
Finalmente el pilar le corto la cabeza en un movimiento veloz.
Fue así que Sekido y Karaku salieron haciendo su gran entrada. Siendo Karaku que en un leve movimiento de su abanico biwa mando a volar al chico de ojos menta.
–¡Nooo, Tokitooo! –habló el chico de cabello borgoña, mientras la demonio lo sostenía para que no saliera volando.
–Jajaja Pero que divertido es esto, ese niño salió volando como sin fuera un muñeco! No te divierte Sekido? –habló Karaku, fue clara su intención de mandarlo lejos hasta a la ubicación de la quinta creciente.
