" Si, si eres tú " / IAGS

31: La remplazaste por esa vieja 🐚

Al día siguiente 🌤️
Iván
Desperté como a las once de la mañana, anoche me estuve como hasta las cuatro allá afuera, pensé muchísimo, no debí hacerlo. Me levante y me di un baño rápido, Vanessa seguía dormida, salí de la habitación y fui directo a la de Fernando, ya estaba despierto, miraba por la ventana.

—Buenos días hijo— Me acerqué.

—Hola pa— Se giro hacia mi.

—Primero que nada perdóname por lo de ayer, sabes que no soy así— Trate de hablar calmado.

—Está bien— Me sonrió.

—Gracias— Sentí un alivio invadir mi cuerpo de nuevo —Metete a bañar, le dire a tu tío Víctor que venga para que los lleve a Culiacán— Me di la vuelta y salí de la habitación, entre a la de María, aún seguía bien dormida, me senté a un costado de ella y me quede mirándola unos segundos —Me recuerdas tanto a ella mi niña— Sonreí a medias.

—Papi— Abrió sus ojos.

—Hola princesa— Sonreí —Levántate en lo que voy por Vanessa para que te ayude a bañarte— La cargué y luego la puse en el suelo.

—No papi, no me gusta que ella me bañe— Abrazo mi pierna.

—Hija, vamos, tú tío Víctor vendrá para que vayan a Culiacán— Reí.

—Es que ella... ella, no me gusta papi— Hizo un puchero.

—Mi niña— Suspire —Deja le digo a doña Rosario que te bañe pues—

—Si papi, ella si me trata bien— Tapo su boca rápido con una de sus manos.

—Como que si te trata bien—

Me agache, ella se dio la vuelta y entró al baño, no quise hacer muy largo el rollo, esto lo tengo que hablar con Vanessa no con mi hija, salí de la habitación y baje a la sala, supuse que ahí estaría Doña Rosario, que es quien me ayuda con la limpieza y algunas otras cosas aquí en la casa

—Buen día señor, quiere que le sirva el desayuno—

—No, no se apure, puedo pedirle un favor— Pregunté.

—Claro, dígame—

—Puede ayudarme a bañar a la Maria, anda de chipil y no quiere que la bañe Vanessa—

—Por supuesto señor, ahorita mismo voy—

Me dio una sonrisa rápida y luego subió al cuarto de María, agradezco tanto que esté aquí, me ayudado mucho con todo desde que ya no está...mi. Me senté en la sala y luego tome mi teléfono, le llame al Víctor, duro para contestar pero lo hizo, me dijo que si venía por ellos, se que soy un idiota pero no puedo, no puedo ir.

Una hora más tarde ⏳
—Que hubo wey— Entró a la casa Víctor —¿Como estas?— Me abrazo rápido.

—Aquí andamos pues, tú wey—

—Igual, andamos bien ¿y los plebes?— Pregunto mientras se sentaba en el sillón.

—Ya no tardan en bajar, ya tiene rato que los levante— Me senté frente a él.

—Porque me pediste que viniera yo wey, no tengo ningún problema y lo sabes pero ¿no vas a ir tú o que? Ya tiene rato que no te paras por la casa— Me miro molesto, pude notarlo.

—Tengo unos pendientes wey— Desvíe mi mirada —He andado bien ocupado con unos pedos— Lo mire.

—No la chingues Ivan, dime la neta cabron, di que la vieja que te conseguiste no te deja y ya— Se levantó.