Viaje

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El par de pequeños retiraron con entusiasmo, Izuku les observó con un suspiro relajado de sus labios mientras miraba la estatuilla en la palma de la mano, la resguardó en una de las alforjas colgando de su cinturón.

Siguieron caminando por las calles cubiertas en nieve que era removida por algunos aldeanos hasta reconocer a la anciana que le atendió la herida, el menor tiró de la mano de Katsuki para acercarse con la mujer, quería darle las gracias y reportarle su condición por su cuenta. Le tenía un gran respeto a esa mujer, ya sea por el gran conocimiento de herbolaria que demostró, el cuidadoso vivero que había dentro de su casa o que ella fue la que llevó la ceremonia que le casó con Katsuki.

Hizo una ligera reverencia que amplificó al darse cuenta que estaba acompañada por Mitsuki, escuchar que irían en busca de recolectar plantas y raíces llevó un indiscreto brillo en los ojos de Izuku.

—Ah, yo... ¡Yo también quiero!

Balbuceó emocionado de la idea de salir a explorar los límites de la aldea en una expedición como esa, los puños apretaron contra su vientre emocionado, incluso oír a Katsuki complementar el que ellos mismos se encargarían.

Para su inconveniente fue negado de ir ya que con ellas era más que suficiente e irían escoltadas por otro sofisticado guerrero. El omega gesticuló una mueca, pero asintió aceptando los planes que tenían al inicio.

"Está bien, no hay prisa, además Kacchan dijo que lo acompañaría todo el día en sus tareas, tal vez me necesite para algo"

Hizo un berrinche interno de que en otro momento lo haría con más calma, resopló con un ávido desánimo hasta que plasmó su atención al sentir como sus manos fueron tomadas por la pequeña anciana.

Sus cejas contrajeron conmovido de escuchar las indicaciones preocupadas de la ancianas, por lo que apretó con cuidado sus manos y asintió con una cálida sonrisa.

—Perdone por causarles problemas, voy a tener más cuidado y tomaré en cuenta sus indicaciones, pero ya no me duele.

Expresó ladeando la cabeza para notar que no presentaba incomodidad. Segundos después retrocedió para dar acceso a que las dos mujeres se retiraran, despidió agitando levemente la mano.

El ambiente templado y nublado hacía un recorrido genuino con el frío, el omega agitó con un escalofrío silencioso acercándose a Katsuki mientras iban tomados de la mano.

—Ustedes sí que hacen ver tan normal el andar por aquí sin problema.

Dijo con una risita escapando ese vaho gélido de su aliento, percibía a las personas abrigadas sin ningún inconveniente por la calle, ya sea haciendo algún trabajo o pasando por ahí como ellos.

Hacía muchos días por su incapacidad que no tuvo oportunidad de observar el entorno de no ser por el recorrido con Katsuki en Volk antes, pero ahora percibía diferente a los aldeanos de la tribu. Recordaba el día de la ceremonia o cuando volvieron a Kunnarta como le miraban con recelo como el extraño que era, pero ahora era otro tipo de miradas hacía él.

Sabía todo lo que le dijo a Momo como amenaza para que conociera su lugar ahí, sin embargo, eso no exoneraba a Izuku de sentirse un extraño también, no conocer costumbres y tradiciones de la aldea o ese particular idioma. Bajó la cabeza hacia el camino en frente escuchando algunas palabras que no entendía de los transeúntes.

—Si están enojados por lo que provoqué con la princesa lo entiendo.

Susurró inquieto de los comentarios que recibían y él descuidadamente no lograba traducir, su refugio fue meramente inclinarse para rodear uno de los brazos de Katsuki con los suyos.

Red String  [BkDk rol α/Ω]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora