Capítulo 50: " Extraño" .

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Un brillo incandescente me daba directo en los ojos, sentía mi estómago revuelto y un molesto dolor de cabeza prensaba en mis sienes. Y si, esta no era la parte linda de tomar alcohol. Con una dificultad pasmosa fui abriendo mis ojos gracias a la luminosidad que había en la habitación. Y por cierto ¿Dónde rayos estamos? Lo último que recuerdo es que estábamos en el auto de Lisa haciendo relajo mientras ella manejaba .

Confirmo una vez más ,no nos pueden dejar libres de tomar Soju porque de seguro hacemos un desastre.

Y Dios, que señor de cabeza tengo.

Me restregue los ojos con mi mano para unos segundos después observar la habitación dónde estaba. Las persianas estaban corridas y esa era la razón de porque estaba tan iluminado, el sol estaba puesto en una posición en la que podía presumir que era cerca del mediodía.

Y ¡Oh! Conozco esas cortinas ví a un costado la mesita con un hermoso bonsai y el oscuro piso de madera, solo faltó ver una de las paredes de cristal que daba a un pequeño porche ,para confirmar que estaba en el loft de Lisa.

Y quise reír cuando ví a las chicas, pues Rosé yacía dormida sobre la mesa de centro, con la boca abierta y la mejilla con un extraño garabato mientras que Jisoo estaba permanecía igual solo que debajo de la mesa, y estaba ¿Abrazando un zapato?.

Ahí fue donde tuve el impulso de tomarles una foto para enseñársela después, pero un peso en mi pecho me detuvo por completo, por inercia mire hacia abajo y me topé con que Lisa, estaba dormida sobre mí.

¿Cómo es que no la sentí? ¿y ahora que hago? Si me levanto la despierto, ya que ella tiene el sueño ligero, a demás luego me sentiría culpable ya que probablemente ellas nos cuido de regreso a casa, en el camino y posteriormente el resto de la noche.

Debe estar demasiado cansada, porque ciertamente yo lo estaría en su lugar.

Su respiración era tan calma que le traía serenidad a cualquier que la mirase, justo como yo ahora.

Me sentí incapaz de perturbar su sueño, sus párpados caían tranquilamente como tersas persianas de seda y una de sus mejillas quedó plana contra mi pecho, tenía el maquillaje corrido pero de alguna forma no se le notaba tanto.

Todo en su expresión transmitía paz, una que me envolvió con ella. Sus facciones lucían tan relajadas que hasta te daba envidia y desearías tener la misma tranquilidad a plenitud así como ella, de vez en cuando fruncía el ceño ligeramente entre el sueño que si lo vieras te daba curiosidad de saber que era lo que estuviera soñando.

Sus labios estaban abultados y si no fuera porque estaba tan absorta durmiendo, juraría que estaba haciendo uno de sus lindos pucheros. Y no , no fui capaz de dañar eso.

De la nada sentí mi corazón latir alegre y fuerte, cosa que no me supe explicar, sentí su brazo tomar más fuerte de mi cintura y, pues me estaba abrazando. Eso solo hizo que mis pulsaciones aumentarán. El dolor de cabeza y mis otros malestares permanecían ,pero yo no podía dejar de mirarla no sé lo que estaba buscando pero parecía mi cura. Mis ojos se ensancharon cuando de pronto me encontré acariciando su rostro, y si, no sé de donde surgía esto, yo solo quería hacerlo, fue impulso que mi cuerpo siguió y no podía pararlo.

Con la punta de mi dedo sentí lo suave de su piel, delinee el contorno de su mejilla y continúe trazando su perfilada mandíbula, sentía mis latido en mis tímpanos pero aún así no me detuve y sé que aunque debería asustarme el hecho de no saber lo que sea que me estaba pasando, no pasó así solo tenía el incontenible deseo de seguir explorando. Dibujé líneas imaginarias subiendo hasta sus cejas y las trace cuidadosamente hasta que me detuve un segundo para deshacer su ceño fruncido y lograrlo sin que eso la perturbara y se despertara, esa noción no me detuvo tampoco.

¿Cómo decirle que la amo? Donde viven las historias. Descúbrelo ahora