De corazón puro.

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Siguiendo con la familia real.

Camus: Si esta bien, recuerdo que hay un alfa que estaría dispuesto a pelear por ella, así que te pido que convenzas al consejo a aceptar el intercambio, no estoy dispuesto a dejar que la reputación de Milo se vea afectada por esta estupidez... - aseguró serio.

Milo veía confundido toda la situación, por lo cual se giro a ver a su suegro, él cual al notar la mirada de su yerno únicamente sonrió de forma dulce y después tomó su mano, para darle confianza, después de todo, si lo veía mejor, tan solo era un niño que no entendía nada.

Milo: ¿de que se trata eso? - preguntó llamando la atención tanto como del Enigma como del Alfa.

Kardia: es una competencia de fuerza se hace cuando alguna parte no está satisfecho con el reciente matrimonio, por lo cual el alfa o omega en desacuerdo, pelea por quedarse con el alguno de los recién casados, el omega en el caso de que sea un alfa o el alfa, en el caso de que sea un omega, la situación es que el que pierda, tiene la obligación de separarse de su pareja y ceder su puesto al ganador, condenando así también su reputación de por vida, porque lo considerarán débil, como para poder proteger una familia, por lo cual quedará solo de por vida - confesó.

Milo: eso es horrible - susurró.

Kardia: si lo se, e intentado deshacerme de esa norma cuando tome la corona y me case con Deggie, sin embargo aun no lo e logrado, por lo cual, ahora te llevo entre las patas como dirían por ahí, perdóname yernito - se disculpó.

Camus: pero no debes temer Milo, yo tomare tú lugar - aseguró.

Milo: ¿Que? - preguntó sorprendido.

Camus: aún eres un niño como para exponerte a situaciones como esa - aseguró.

Milo: ¿pero eso no causará problemas?
- preguntó.

Kardia: claro que no, hay una cláusula que puede acepta esto, si el omega retado no acepta por algun problema, el alfa tomará su lugar así que el demandante tendrá que aceptar - explicó.

Dégel: lo mejor será que aceptes Milo, además... si Écarlate sabe que te expusimos aun evento así... puede venir a hacer que pierdas a propósito - dijo mientras Milo sonrió nervioso, eso era cierto.

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D

os días después...

La peli plateada, aburrida iban en el carruaje, no sabía porque el bobo consejo si había exigido ese matrimonio, ahora querían probarlo.

Hilda: si no les gusta porque lo obligan a hacerlo en primer lugar - susurró aburrida.

Siegfried: no comas ansias querida, haremos esto rápido y nos iremos - aseguró el alfa.

Hilda: estoy en desacuerdo que sigan haciendo cosas así - aseguró.

Siegfried: tranquila, Camus lo acepto por alguna razón ¿no? Ese omega no debe ser para nada débil, si no ¿por qué lo defendería tanto? - preguntó.

Hilda: ¿será que si le gusta? Me sorprendió bastante el hecho de que haya suplicado por el cambio en el combate, no hubiera hecho eso con cualquiera, ese omega debe ser hermoso ¿no? - preguntó, el alfa suavemente tomó su mano, para después dejar un beso suave en el dorso de la misma.

Siegfried: para mi no hay omega más hermoso y sublime que tú mi señora - le respondió mientras la peli plateada, sonrojada, únicamente le sonrió.

Mientras tanto.

Con Milo y Camus.

Sorprendido veía a su esposo practicar con el arco con su suegro, Kardia había apoyado a su hijo ayudándolo a enfrentar los juegos que se avecinaban, mientras Milo se sentía un poco mal, no tenía mucho tiempo de haber llegado y ya le había causado varios problemas a su marido y familia.

Dégel: no tendrías porque sentirte así, Camus lo está haciendo con mucho gusto - le aseguro mientras se sentaba a su lado.

Milo: ¿enserió lo cree señor? Porque aveces pienso que le doy mucho dolor de cabeza - aseguro apenado.

Dégel: claro, si no fuera así, Camus ni siquiera se hubiera ofrecido a tomar tú lugar, únicamente te desearía suerte en tú enfrentamiento - le dijo mientras Milo únicamente asintio mientras veía a su esposo y suegro, pero después de reojo y de forma no intencional, vio a su suegro omega, más precisamente dirigió su vista al espacio de su cuello, que dejaba ver perfectamente la marca de su lazo, inconsistemente dirigió su mano a su cuello propio y después algo apenado, preguntó.

Milo: ¿usted también enfrento algo así? - preguntó llamando la atención del omega mayor.

Dégel: claro que si Milo, es como una tradición que alguien se oponga al matrimonio del príncipe en turno, mi contrincante fue una vieja amiga de mi esposo, pero logre mostrarle quien mandaba - aseguro orgulloso.

Milo: ¿entonces usted fue el que peleo esa vez? - preguntó.

Dégel: claro que si... - respondió.

Milo: entonces será mal visto que Camus tomará mi lugar ¿no es cierto? - preguntó mientras Dégel sonriendo por la preocupación de su pequeño yerno únicamente negó.

Dégel: claro que no Milo, no será mal visto que tú alfa pelee por ti para conservar tu mano y tú honor - aseguro.

Milo: pero usted peleó - le dijo mientras Dégel sonriendo lo vio.

Dégel: eso fue porque yo ya estaba preparado para eso, desde que era un niño estaba en este castillo, siendo cuidado por el omega consorte de ese entonces para convertirme en el cónyuge de Kardia, por lo cual fui educado y criado para la ocasión, a diferencia de ti, que tú compromiso y ceremonia de matrimonio ocurrieron en menos de 48 horas, era imposible que te hayas enterado y preparado para esto en tan poco tiempo, te estabas concentrado en aprender a amar a mi hijo - aseguro.

Milo un poco más tranquilo suspiró al escuchar eso, sentía una enorme paz, además que... siendo sinceros, no le hubiera molestado participar en eso, después de todo, estaba dispuesto a proteger su matrimonio, uno por el honor de sus padres, dos porque se había dado cuenta de que Camus realmente era un ser bastante especial y por alguna extraña razón, tenía la gran necesidad de saber hasta donde era capaz de llegar ese Enigma, ese ser mitológico por el.

Continuará...

Él Enigma (Camus x Milo) (Omegaverse)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora