Cap.33🍭

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Maratón 7/?

Casi se cumplía un mes desde el primer celo de Sungie, los lobos de los dos Alfas podían presentirlo y se mostraban algo inquietos.

Se volvían más agresivos cuando Sungie salía con los Alfas a pasear o a la oficina, no querían a ningún Alfa ni beta cerca de Sungie, la marca temporal que le habían hecho ya la habían renovado una vez más, pero esta no era suficiente. Debían marcarlo en el próximo celo.

Por ello los alfas insistieron tanto en llevar a Sungie al médico y hacerle un historial médico, querían tener todo listo por si a Sungie se le presentaba algún malestar por haber estado con dos Alfas a la vez y es que hasta eso sonaba doloroso.

Minho había hablado con su madre, ella tenía experiencia en eso, su abuela le explicó que cuando habían casos así de Alfas Destinados a un solo Omega debían tener el sumo cuidado de marcar al omega al mismo tiempo porque si uno de los dos lo marcaba antes el lobo del omega iba a rechazar al otro Alfa al ya tener una marca y los alfas también se rechazarían el uno al otro por tener el control y el lazo también podía quedar incompleto, además de hacerlo durante el celo del omega porque en ese momento es cuando el omega pediría estar con sus dos Alfas.

Lee know y Minho habían hablado muy bien sobre todo eso y esperaban estar preparados cuando el momento llegara.

Por otro lado, los exámenes de Sungie también habían llegado ya y no revelaban ninguna anomalía ni nada por el estilo, estaba en perfecto estado.

Aunque por el examen neurológico que habían hecho ellos pudieron finalmente saber más de cerca de la condición que Sungie tenía.

Era algo congénito, Sungie había nacido así y no fue porque haya tenido ningún accidente como ellos pensaron.

También el médico les dijo que si llevaban a Sungie al psicólogo con regularidad podía desaparecer un poco esa extraña afección mental que poseía no del todo, pero algo ayudaría, porque era imposible que desaparezca por completo ya que los tratamientos debieron iniciar cuando Sungie apenas presentó los primeros signos de infantilismo a temprana edad.

A decir verdad, Sungie debió ir con regularidad al psicólogo y tomar un medicamento que le ayudaría a regular las neurotóxicas que manipulan partes de las neuronas, un sustituto químico el cual personas como Jisung no tenían mucho en su sistema neuronal, un químico que recurría con una sustancia grasa llamada mielina que era el que ayuda a los neurotransmisores a enviar mensajes rápidamente a su cerebro y daba la capacidad al individuo de crecer mentalmente e ir aprendiendo y desarrollando el habla, los movimientos etc.

El médico explicó a los Alfas que Sungie era afortunado porque habían individuos que desarrollaban el infantilismo Agudo-cronico que es cuando el individuo se queda en estado "Infante" de una vez por todas es decir, ellos son prácticamente un bebé, toman biberón, comen solo papillas y usan pañales, chupetines y hasta piden de "amamantar"

El caso de Sungie su cerebro se quedó en edad de entre 10 a 12 años, pero no logró desarrollar el leguaje porque no recibió la terapia adecuada desde el inicio, ya que hay que recordar que su aprendizaje era más lento que los niños normales.

Sungie había dicho su primera palabra cuando tenía 7 años y solamente había logrado decir "Ma" y por ello su padre lo había golpeado hasta el cansancio cuando no sabía pedir las cosas como debía ser.

Su madre hizo todo lo posible por ayudarlo, lo había puesto en la escuela para que aprendiera, pero solo recibió abusos de parte de los maestros y otros niños, por eso no fue más a la escuela. También trató de llevarlo a centros de ayuda gratuitos, pero le quedaba en otra ciudad y no podía perder el poco trabajo que tenía, además del abuso que recibía de parte de su Alfa el cual le pegaba a ella porque ella le rogaba "pégame a mí y deja a mi bebe" así que ella terminaba molida en el suelo con un muy aterrado Sungie a su lado abrazándola. Sin contar la de veces que había escapado con Sungie de casa y el Alfa iba por ellos y en casa les iba peor por haberse escapado.

En fin, Sungie jamás tuvo la oportunidad, nunca se la dieron hasta ahora. Sus alfas no sabían todo eso que sufrió Sungie, quizá un día él mismo les pueda contar como fue su vida antes. Pero por el momento eran felices de tener a su bebé ahí con ellos.

En ese momento corría feliz mientras jugaba con Jinnie su conejito como solía llamarle, aunque sus Alfas morían de ganas por hacer a Jinnie polvo de galleta por jugar con su omega.

—¡Hey Sungie mira esto! —Gritaba Jinnie transformándose en lobo y corriendo lejos de su alcance.

Sungie reía y corría tras es para jalar sus orejas.

—Ahhg Lino trae la escopeta hay un conejo que cazar. —Murmuró Lee know apretando sus puños. Toda la atención de Sungie estaba puesta en Hyunjin y eso los tenía mal.

—Tranquilos hombres, solo es Jinnie saben que no hará nada para dañar a su Omega.

Minho miró como Jinnie se metía entre los matorrales para así sorprender a Sungie.

—Pero es un Alfa tonto y muy joven, los Alfas jóvenes no logran controlar bien a su lobo. —Opinó Minho.

—Si, tiene 20 y ya es todo un policía ejemplar en la Academia. No lo subestimes. —Puntualizó Bang Chan tomando más carne.

La comida era amena, aunque los alfas estaban alertas pues no les era para nada fácil ver a su Omega jugar divertido con otro Alfa.

Luego de comer se habían recostado en el césped del gran jardín de la casa de los Alfas Lee. Miraban como Sungie se echaba al suelo con Jinnie agotados de tanto correr.

Minho estaba tenso y Lee know se podía decir que igual, pero en general el más calmado era Minho.

—¡Ahhh No, duele!

Los tres alfas restantes se alarmaron, el lobo joven de Jinnie estaba sobre Sungie y el omega se cubría el cuello con una mano.

Un Lobo blanco de gran tamaño había saltado sobre el joven lobo haciéndolo volar por el aire.

—¡Sungie!

Minho había corrido a su lado y trataba de ver a su Omega, el cuello... tenía marcas de dientes en su cuello y no eran de ninguno de sus dos alfas.

El lobo de Minho también salió a flote y entre el lobo Blanco y el lobo gris acorralaron al lobito de Hyunjin listos para atacarlo. El lobo de Hyunjin temblaba y tenía su cola entre las patitas.

Un cuarto lobo enorme de color café se interpuso entre los tres lobos y hubo un intercambio de gruñidos feroces, el lobo café gruñía muy alto y poco a poco Lee know y Minho se fueron calmando cambiando a su forma humana.

—¡Te dije que un Alfa joven es muy testarudo! —Riño Minho.

Bang Chan también cambió.

—Son marcas superficiales, revise a Sungie y los dientes de Hyunjin solo lo rasgaron cuando Sungie quiso alejarse. Por favor cálmense.

—¡Es nuestro Omega y estuvo a punto de ser marcado por otro Alfa! —Gritó Lee know.

—Perdón lo s-siento mucho... e-es que Sungie... s-su aroma.

Los demás Alfas voltearon a ver a Sungie y el omega yacía sobre el suelo, temblaba.

—¡Sungie! —Minho y Lee know corrieron hacia él y una oleada repentina y potente de feromonas los penetró en sus fosas nasales.

Finalmente, el celo le había llegado y Jinnie no pudo controlar a su lobito.

—B-Bang Chan vete, llévate a J-Jinnie ahora mismo.

Bang Chan obedeció mirando como al pequeño Sungie se le ponían los ojos color azul eléctrico. Debía dejar a los Alfas solos con su Omega.

El Bebe De Los Alfas LeeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora