CAPITULO 93.

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-Sí, sí, sí, mil veces sí.

-Idiota, no te he hecho la pregunta todavía.

-Me da igual, mi respuesta va a ser sí -digo mientras me abalanzo sobre él y me pongo de puntillas para poder pasar mis brazos alrededor de su cuello y apoyar mi frente en su cuello, porque es hasta allí hasta donde le llego a Calum aun estando de puntillas.

-Te quiero -me dice mientras rodea mi cintura y me empuja hacia su cuerpo.

-Yo también Calum, te quiero -y me besa el pelo.

A lo que yo contesto con un beso en el cuello.

Besos cortos y sencillos.

Se queja de que en el cuello le hacen cosquillas y eso me tienta a darle más besos en él.

Intenta apartarme, pero como no lo consigue, me coge de los muslos y me sienta en el capo de la furgoneta en la que he venido.

Ahora es él quien me besa el cuello y soy yo quien se queja y le intenta apartar. Se aleja tras 139 besos y puede que tenga hasta chupetones. Me pone una mirada de corderito y levanta el labio inferior tapando prácticamente el superior.

-Jo, yo te quería besar -me dice con una voz de niño.

Antes de que pueda tirar de su camiseta y que por fin nuestros labios se vuelvan a encontrar, me empieza a vibrar el móvil.

-No lo cojas -me susurra Calum en el oído mientras vuelve a mi cuello.

-Calum, puede ser importante -digo sacando el móvil del bolsillo trasero.

Descuelgo mientras me alejo un poco de Calum. No he mirado quién es, pero sé exactamente quién es  y mentiría si dijera que no me esperaba esta llamada.

-Te vuelvo a repetir, ¿sabes lo que es despertarse y ver que la persona que quieres ha huido de ti? Sé que lo de anoche no estuvo bien, pero que me abandonaras a la mañana tampoco lo estuvo.

-Michael, lo de anoche...

-Lo recuerdo a diferencia de ti.

-Sí que me acuerdo Michael, es diferente que no quiera hacerlo.

-¿Tan malo fue?

-No, es decir, tampoco te quiero decir que fue un gran beso ni que fue uno malo, simplemente, nos besamos, aunque técnicamente lo hicieras tú.

-Tú me seguiste.

-Por eso no quiero recordarlo, porque sé exactamente lo que hice.

-Y Calum...

-Exactamente, y Calum.

-¿Se lo vas a contar?

-Debería.

-Siento lo de anoche.

-No lo sientas, ya está hecho.

-Si hubiese sabido controlarme...

-No te eches la culpa sólo a ti Michael.

-¿Entonces?

-Entonces...

-Tú y yo, seguimos siendo amigos, ¿verdad?

-Sí, supongo que sí. No podemos decir que vamos a olvidar la noche, quieras o no, no fue solo un beso, o al menos para ti Michael, según lo que sentías.

-Sinceramente, creo que no sentí nada al besarte, ¿y tú?

-Tampoco.

-Al igual que te besé a ti, besé a otras 3 chicas.

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