Tenía que ser él

Capítulo 20

Esa confirmación de Rhett era todo lo que necesitaba para que se me fuera la inhibición al momento de escribirle por mensaje, porque yo soy de los que a quienes le tendees una mano y te agarran el brazo.

El mismo lunes por la noche ya me encontraba enviándole el primer mensaje, ya qué "intensidad" es mi segundo nombre. Aun así no podía evitar que las manos me temblaran antes de presionar la tecla de enviar.

"Apuesto a que estás armando una figura de legos, mientras te tomas una taza de café." - fue lo mejor que se me ocurrió.

Una parte de mí temía que no me respondiera, o peor, que fuera cortante. Sin embargo su respuesta no tardó en llegar, y para mi asombro no fue lo que pensaba.

"50 y 50. Tu mensaje llega tarde, hace 20 minutos atrás terminé de armar uno."

"¿Y los otros 50?".

"Si estoy tomando café. Y buscando alguna película tranquila que mirar antes de dormir."

Pude imaginarlo recostado en su sofá, con una taza en sus manos mientras me escribe con la otra, usando uno de sus pijamas limpios que huelen a jabón de ropa, con su cabello húmedo, el cual también emana una fragancia agradable. Y con su bola de pelo a su lado.

Y me llevo una sorpresa cuando por un segundo me invadió el pensamiento de que me gustaría estar con él.

"Podría recomendarte algo."

"¿Ah sí?"

Y en mi cabeza puedo oír ese tono de voz dudoso que usa cada vez que digo algo y qué lo sorprendo. No entiendo porque duda tanto de sí mismo. Es guapo, inteligente, culto, educado, con dinero y buena familia. Es todo lo que las mujeres quisieran de un hombre, y a lo que los hombres les gustaría ser.

"¿Eres de los conocedores de películas?" - me llega a los pocos minutos otro mensaje suyo, y me asombra el hecho de que haya enviado algo más ante mi falta de respuesta del anterior.

Ese pensamiento me hace sonreír.

"Mmm... no se si conocedor, pero he visto muchas (demasiadas) y me encanta recomendar cuando alguien me lo pide (o lo precisa)."

"Nunca se que mirar, por lo que me vienen bien las sugerencias."

"Has abierto una caja de pandora, porque hablar de películas es otro de mis temas favoritos. Los filtros no funcionan cuando se trata de ese tema."

Y al leer su respuesta quedo pasmado y petrificado. Lo único que se mueve es mi corazón, que empezó a latir con más fuerza.

"Conmigo no necesitas filtros."

Me doy la media vuelta y lanzo un grito con mi cara contra la almohada, mientras pataleo con emoción. Alzo la cabeza y vuelvo a apoyar mis dedos en el teclado. Y sin analizarlo escribo y le envió mi respuesta.

"A mi también me puedes decir lo que sea."

Como pasan unos minutos en lo que no tengo una respuesta de vuelta, decido enviar otro mensaje cambiando de tema.

"Hagamos un intercambio. Yo te recomiendo una película a ti, y tu una a mí. ¿Qué dices?"

"Pues teniendo en cuenta que has visto muchas (demasiadas) creo que a mi se me va a complicar más."

"¿Y eso que? Uno siempre puede rever una película." - sin respuesta por unos minutos. - "Anda." - le insisto.

"Bueno."

"Sabes, o soy muy persuasivo, o tu me consientes demasiado Rhett."

"Eres fastidioso." - responde consiguiendo que se me escape una carcajada.