Un paso más

Capítulo 10

Hace ya más de una semana que empecé a trabajar con Gavi, y sinceramente me da la sensación de que ha sido muchísimo más tiempo. Y no porque se me haga pesado el trabajo con él, lo contrario, es porque como hacemos tantas cosas, y ha avanzado tanto, que me da la sensación que ha sido un periodo más largo.

También nos hemos hecho mucho más cercanos en tan poco tiempo. Tampoco le conozco a la perfección, pero si que he descubierto muchas cosas sobre él. Y mientras hacemos las sesiones de fisioterapia me habla de muchas cosas. Y eso también hace que me de la sensación de que nos conocemos desde hace más, por lo afines que nos hemos vueltos en ciertos aspectos.

Justo acabo de terminar una de las sesiones con él, y le vuelvo a recordar otra vez que debe hacer una serie de ejercicios por su cuenta, para así seguir fortaleciendo la rodilla poco a poco.

-Mira que eres pesada- pone los ojos en blanco cuando se lo digo

-Pero es lo que me han dicho los del Barça, soy una mandada- al mencionar el equipo me acuerdo algo que me comentaron ayer en un correo- Vas a ir al entrenamiento de puertas abiertos, ¿no?

-Sí- veo como se le ilumina la cara al oír esa mención

Es algo que he aprendido en estos días, que a pesar de no poder jugar, y estar "más apartado" de su equipo, sigue poniéndose muy feliz en cuanto puede hablar sobre ellos; es un tema que siempre le anima.

-Es el sábado, ¿no?- pregunto

-Sí, creo que por la mañana, aunque no sé la hora todavía- responde- ¿Vas a venir?

-¿Para?

-Para responder preguntas- dice obvio, pero luego ve mi cara de no entenderlo- Ayer hablé con Xavi y me dijo que te iba a pedir que vinieras para poder responder a algunas preguntas sobre mi recuperación

-Pues no tenía ni idea- respondo encogiéndome de hombros, aunque me he puesto un poco nerviosa- Hablaré más tarde con Jimena para ver si sabe algo

Él va a decir algo, pero justo le llega un mensaje.

-Bueno, me voy- me dice- Mi padre ya está aquí- hoy nos había tocado sesión en la clínica, mañana me toca ir a su casa

-Acuérdate de los ejercicios- le digo cuando ya va a salir por la puerta de la sala

-Que sí pesada. Hasta mañana- se despide

-Adiós- me despido yo

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-Ayer, después de que te marcharas, hablé con Jimena- le digo a Gavi mientras me quito el abrigo- Al final sí que voy a ir a lo del entrenamiento

-Vale- me responde él, pero de forma muy seca

-¿Sabes ya la hora?- pregunto ignorando su tono- Es que eso no se lo habían dicho, y he pensado que igual ya lo sabes tú

-Pues no lo sé- vale, definitivamente está borde

Me giro hacia él, y le sentado en el sofá de brazos cruzados y con cara de culo. No entiendo por qué está así, no creo haber hecho nada.

-Pues...- titubeo aún confusa- Pues si te lo dicen me avisas

Él simplemente se encoge de hombros y ni me responde; su actitud no me está gustando ni un pelo, espero que cambie durante la sesión.

Pero no lo hace, todo está siendo un verdadero desastre; y para ser sincera, me está tocando un poco la moral.

Ya sé que tiene sus días buenos, y sus días malos; pero eso no suele afectar a como hace los ejercicios, porque eso es lo que realmente le importa, pero hoy está muy raro.