Un paso más

Capítulo 61

Lucía:

-Sigo sin entender por qué no vas- repito viendo como Pablo da vueltas por la cocina buscando un bol

-Porque me quiero quedar contigo- responde lo mismo que todo el rato

-Puedes ver partidos conmigo otros días

-Y también puedo ver partidos en el campo otros días- contraataca echando las palomitas que acaba de sacar del microondas al bol- Y me apetece quedarme en casa con mi novia, ¿algún problema con eso?

-No, pero...

-Sin peros- me corta- Me quedo en casa y ya está, además ya he pedido comida para cenar y no me daría tiempo a llegar al estadio

-¿Qué has pedido?- pregunto sorprendida porque no me ha avisado

-McDonald's- sonríe como un niño pequeño, como siempre que pide comida- Una vez al año no hace daño

No puedo evitar reírme cuando me mira con esa sonrisa y me termino acercando a darle un beso.

Han pasado varios días desde que Pablo subió nuestra foto, y han sido unos días moviditos en nuestra vida. No han sido malos, ni mucho menos, pero han sido unos días intensos.

La foto no tardó más de unos segundos en empezar a recibir likes y comentarios. Y para mi sorpresa, y mi alivio, la gran mayoría de los comentarios eran positivos. Mucha gente comentó apoyando a Pablo por lo que dijo del acoso. Aún así sí que hubo algunos comentarios no tan amables y que Pablo borró; aunque siguieron llegando y siguen estando en el post.

Estos días han estado saliendo muchos artículos nuestros con titulares como "La pareja del momento" o "El amor más allá del acoso de los periodistas". Tengo que admitir que me he reído con algunos titulares, aunque no he leído más allá de ahí. Ni quiero hacerlo ni tengo la necesidad de saber lo que dicen de nosotros. Sobre todo porque me conozco a mi misma y sé que no me haría ningún bien comerme la cabeza con lo que la gente piensa de mí. Pablo y yo estamos juntos y felices, y eso es lo que importa. De tantas veces que Pablo me dice eso lo tengo tatuado en la mente.

A quien más ilusión le hizo que la relación se hiciera pública es, aparte de a Izaro, a mi prima Clara, que no ha perdido ni un segundo para contárselo a toda la familia. Mi primo pequeño Ian flipó y le tuvieron que enseñar la foto un millón de veces para que se lo creyera; y luego me llamó desde el teléfono de su madre para echarme la bronca. Mis otros primos, los mellizos, tampoco se lo creyeron cuando vieron la foto en Instagram y me escribieron preguntándome si Pablo se había equivocado al etiquetarme.

Mis padres también se alegraron muchísimo y me han "obligado" a llevar a Pablo de vuelta a Madrid para volver a verle. Porque la última vez que se vieron fue por todo lo del accidente y no eran muy buenas circunstancias que se diga...

También han sido unos días movidos en todo el tema de mis fisios. He tenido varias sesiones realmente duras, pero para mi alegría ya solo tengo que usar una muleta, y no creo que tarde mucho en volver a andar normal. Eso significa que también podré volver a trabajar dentro de poco.

Y eso seguramente implique volver a mi piso. No quiero seguir aprovechándome de Pablo, pero llevo tanto tiempo en su casa que hasta ya la considero un poco la mía. No quiero pensar en esto ahora, y simplemente voy a disfrutar de cada segundo.

-¿Me estás escuchando?- Pablo me pasa las manos por delante la cara intentando llamar mi atención

-¿Qué?- me he quedado perdida en mis pensamientos- No, lo siento, ¿qué me decías cariño?