Un paso más

Capítulo 41

Gavi:

Siento como el corazón me martillea en el pecho, tan fuerte que en cualquier momento me atraviesa las costillas. Sus labios en los míos. Mis manos sobre su piel. Ella moviéndose sobre mi. Sus dedos recorriéndome la mandíbula.

Necesito seguir besándola, pero me estoy quedando si aire. Cuando ya no puedo más me separo tan solo unos instantes, cojo una bocanada de aire y me vuelvo a pegar a ella como si mi vida dependiera de eso.

De repente se escuchan unos golpes en la puerta

-No me jodas...- murmuro dejando caer mi cabeza hacia atrás

-Habrá que dejarlo para otro momento- Lucía intenta bromear, pero noto como su voz tiembla

Me paso las manos por la cara mientras ella va hacia la puerta. No me creo que nos hayan interrumpido. No me lo creo. Escucho como Lucía habla con alguien antes de cerrar la puerta y volver conmigo.

-La cena- canturrea dándome un plato

-Sinceramente, se me ha quitado todo el hambre- murmuro

-Mentira- me dice ella, y claro que tiene razón

Así que, como siempre que la tiene, me acerco a ella para darle un beso. Sé que le encanta eso, así que siempre lo hago

-Pero que quede claro- le digo antes de empezar a comer- que esto no se va a quedar así

-¿El qué?- pregunta haciéndose la inocente

-Lo sabes perfectamente

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La luz me deslumbra aun con los ojos cerrados, así que cuando los abro tardo varios segundos en acostumbrarme.

Miro un poco hacia mi lado y no puedo evitar sonreír cuando veo a Lucía a mi lado. Tumbada boca a bajo, todavía desnuda.

Los recuerdos de anoche inundan mi cabeza y mi sonrisa se ensancha.

Después de cenar nos pusimos a hacer el tonto, Lucía empezó a chincharme, a intentar picarme, a intentar calentarme... Y lo consiguió, vaya si lo consiguió. Desde ese momento todo empezó a escalar. Nuestros movimientos se volvieron torpes, las respiraciones agitadas, el ambiente denso.

Repaso la habitación con la mirada. Veo nuestra ropa tirada por todos lados y vuelvo a sonreír. Toda la noche fue demasiado... No hay palabras para describirla. Fue especial, fue bonita, fue... Intensa, eso seguro.

Tengo que admitir, aunque suene un poco mal, que ya me había imaginado ese momento muchas veces. Me había imaginado nuestra primera vez y con muchas expectativas. Pero lo de anoche superó con creces cualquier cosa que me hubiera imaginado.

A mi lado siento como Lucía se mueve

-Buenos días preciosa- murmuro cuando abre los ojos

-Hola- susurra ella y no me puedo evitar fijar en la forma en la que sus ojos brillan y en lo preciosa que está aun recién levantada

-¿Qué tal has dormido?- le pregunto apartando el pelo de su cara con delicadeza

-Bien- Lucía me vuelve a sonreír, y automáticamente yo también lo hago- Aunque poco

-Eso no es solo mi culpa- digo entre risas

Vale, puede que lo hiciéramos más de una vez

Y más de dos también