10 de octubre 2016
Este no es un día que quisiera recordar nunca pero, tengo la necesidad de contártelo puesto que para eso son los amigos ¿no? Para escuchar...
Todo comenzó bien, pide volver a la escuela y Mérida se quedo a dormir conmigo y de todas forma la desperté con "Buenos días princesa" ella se movió un poco y me abrazó comencé a jugar con su cabello hasta que se levantó. Los dos nos vestimos y fuimos a la cocina por algo de desayunar y después ir a la universidad. Al llegar Jack corrió hacia mi y me abrazó muy fuerte.
-Tranquilo, ya estoy bien- Jack se preocupa mucho cuando me enfermo... bueno mas bien me tiene miedo, una vez dice que me desmayé en medio del parque, no había nadie y tuvo que llevarme cargando tres cuadras hasta que una señora lo vio y nos ayudó. Desde ahí, Jack tiene miedo a que vuelva a pasar.
-Te cuidaron bien- se separó de mi y miro a Mérida, y sonreí. Pw sabia que el sabia que se habían arreglado las cosas entre nosotros.
-Bastante bien- dije sin dejar de sonreír. Minutos después llegó Rapinzel y al verme se le formó una gran sonrisa y me abrazó fuertemente.
-¿Como estas?- preguntó separándose del abrazo.
-Mucho mejor, tuve a la mejor enfermera- tomé a Mérida de la mano, ella cada vez se ponía mas roja. Mérida y Rapunzel se quedaron viendo un tiempo hasta que Jack volvió a hablar.
-Punz y yo pensábamos que podrías ir a comer pizza los cuatro juntos.
-Me parece una gran idea, ¿tu que opinas princesa?- miré a Mérida y dejo de mirar a Rapunzel.
-No tengo planes en la tarde- me sonrió.
-Bien, saliendo de aquí nos vamos- dijo Rapunzel abrazando a Jack.
Todo el día pasó normal. En la hora del almuerzo nos sentamos los cuatro debajo de un árbol. Siempre creí que entre Jack y Punzie su amor seria mas tranquilo y tierno, pero no es amor mapache. Son tiernos de vez en cuando, se la pasan peleando y al final de la pelea termina en un beso. Lo se porque eso pasó durante todo el almuerzo. Mérida y yo decidimos comer en paz, riéndonos un poco de ellos y luego nos besamos.
Acabando las clases, como propuso Jack, fuimos a comer pizza. Fue genial porque todos la pasamos increíble contando chistes y anécdotas. Incluso hicimos bromas de cada uno de nosotros.
Rapunzel sacó su celular y comenzamos a tomarnos fotos los cuatro juntos. Eran unas muy bonitas fotos que le dije a Punzie que mas tarde me las pasara. Al terminar el día nos despedimos y nos fuimos cada quien a su casa, oh algo parecido.
Le dije a Mérida que yo iría a su habitación mas tarde, porque tenía algo importante que hacer con mi madre. Ella aceptó y me dio un largo y dulce beso antes de entrar a su casa.
-Te amo- se despidió.
Debí de quedarme con ella desde un principio, porque después de dejarla y regresar a casa la pesadilla comenzó.
Abrí la puerta de mi casa, pensé que mi madre me daría alguna noticia sobre algún tema pero lo que me encontré fue diferente. Mi mamá, estaba sentada a lado de un hombre, hablando muy animadamente y extremadamente cerca. Cuando oyeron que abrí la puerta se separon.
-Hiccup- mi madre me abraza antes de proseguir- Que bueno que llegaste.
-¿Quién es el?- pregunté orando a aquel extraño.
-El es Drago, lo conocí en el trabajo... es mi novio Hicc.
Esas ultimas palabras me destruyeron. Mi mayor miedo desde que mis padres se separaron fue que ellos encontraran a otra pareja y fueran felices. Porque sabia en el muy en fondo que ellos se seguían amando.
El extraño se levantó del sillón y me brindó una sonrisa, estrechando mi mano.
-Que gusto conocerte Hiccup, tu madre habla mucho de ti- intenté sonreírle y estreché mi mano.
-Lo invité a cenar para que nos conozcamos mejor los tres- dijo mi madre minutos después. Sabia que estaba nerviosa en como me lo tomaría. Solo asentí y me dirigí a la mesa.
No quería estropearle la noche a ni madre. No me agradaba para nada ese señor, era raro estar en la mesa con un miembro más que no fuera mi padre oh algún familiar de mi madre, o Mérida.
Parece ser un gran hombre. Pero no como mi papá. El tiene el pelo negro y un poco largo, mi padre lo tiene rojo y mas largo. El no tiene barba pero tiene algunas cicatrices en su cara, mi papá tiene mucha barba y ninguna cicatriz. El tiene una nariz rara, mi papá la tiene en forma de gota igual que yo. Toda la noche comparé al extraño con mi padre. Intenté seguir la conversación y responder a todas las preguntas que el me hacia o a mamá lo mas educado posible.
Cuando por fin se fue mi madre soltó un suspiro y me abrazó.
-Gracias- me susurró- Por aceptarlo.
No dije nada, no quería decir nada. Solo le sonreí y avise que iría a mi habitación.
Tomé mi celular y le mande un mensaje a Mérida, diciéndole que no podía ir a su casa, si ella podía ver ni nuevamente a la mía. Aceptó y en cinco montos estaba en mi puerta. Nos acostamos en mi cama, le pedí que no preguntara nada hasta mañana oh pasado.
Es un fuerte golpe, y tengo que digerir todo lo que ha pasado. Tal vez mañana tenga la mente más clara.
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Mericcup: Daily of Hiccup
RomanceCreo que es nuestra decisión como contar historias tristes. Por un lado, puedes suavisarlas y nada esta tan mal que no pueda arreglarse con una canción de Peter Gabriel. Esta versión me gusta tanto como a cualquier chica... pero no es la verdad. H...