ENTRE PERROS Y DOCTORES©

Capitulo 32

La noche fue larga con Noah, no dormimos más de tres horas y ahora estoy en modo zombie en su cocina con un vaso de leche que es mi única compañía por el momento, si el doctor no despierta pronto tendré que hacerlo yo, debe llevarme a mi casa para poder alistarme e ir a trabajar, mis perros menos mal que tienen sus dispensadores de comida y agua y envié anoche un mensaje a mi vecina para que estuviera pendiente de ellos.

Dos voces se escuchan hablando en español acercándose al lugar donde estoy sentada, es la voz de una mujer regañando a alguien en voz baja, imagino que debe ser el personal de Noah. ¿Cuánta gente se necesita para mantener esta casa? . Las voces comienzan a oírse mucho más fuerte y entra una señora de unos casi sesenta años junto con James. Ahora entiendo, la señora estaba regañandolo a él en español al igual como mi madre lo hacía cuando éramos pequeños y además acabo de salir de mi duda del porqué le encontraba un ligero acento al chef, es latino definitivamente.

— No quiero que estés más de chismos... — la señora se calla, me ve sorprendida y cambia al inglés para hablarme. — Oh, hola linda.

— Hola, soy Kiara. — le digo con un poco de incomodidad y luego miro al chef a su lado. — Buenos días James.

— Yo soy Grace, encantada de conocerla. — dice dándome una sonrisa tierna. — ¿Quiere que le preparemos algo para comer?

— Estoy bien, voy a esperar a Noah.

— Me pondré a cocinar enseguida un buen desayuno para ambos para que pueda comer con el Señor más tarde. — dice James agarrando distintos utensilios de la cocina.

Le doy una sonrisa de agradecimiento y me levanto de mi asiento para dejar tranquilamente al chef hacer su trabajo y comienzo a recorrer la gran cocina y a mirar un par de cuadros.

— ¿Por qué no me dijiste que teníamos visitas? — dice Grace hablando español.

— Llegaron tarde ayer, mamá. Tu ya estabas durmiendo. — le responde James en el mismo idioma.

Ambos están hablando en voz baja pero logro escucharlos, además no creo que sepan que les estoy entendiendo lo que están diciendo. Me quedo estática cerca de la mesa de desayuno alejada de ellos, saco mi móvil y hago como que estoy haciendo algo importante en el para que piensen que no estoy interesada en su conversación y que no les entiendo.

— ¿Es la nueva conquista de Noah? Es hermosa y él nunca trae a mujeres a casa.

¿Nueva conquista? Si lo dice así no sé cómo sentirme, no conozco todo el pasado del doctor y menos sé con cuantas mujeres se ha acostado. Imagino que muchas, estoy segura que mujeres no le faltan con lo guapo que es pero por lo menos ya me quedó claro que no trae a cualquier chica a casa. Algo debo de importarle.

— Madre, después me tratas a mí de chismoso. Debes mantener la boca cerrada porque ella es la hermana del Señor Steffano. — chismosea James y Grace abre mucho los ojos sorprendida.

— ¡Madre mía! Estoy segura qué él no lo sabe, se va a armar tremendo lío y mi niño Noah se quedará sin amigo.

— Eso no es asunto de nosotros. — responde James mientras limpia la cocina con un trapo.

— Hay tantas mujeres en el mundo y Noah se fija en la hermana de su amigo. — Grace niega con la cabeza. — Siempre le ha gustado lo complicado y ama meterse en problemas, pero en fin, quienes somos nosotros para juzgar.

— Madre ya basta de hablar de nuestro jefe, además ella está aquí presente y es de mala educación estar hablando en otro idioma cuando ella no nos entiende.