ENTRE PERROS Y DOCTORES©

Capitulo 37

POV Noah

Termino la exitosa cirugía y dejo que los otros médicos se encarguen de lo que falta, ya que me necesitan en urgencias nuevamente. Envío a una enfermera a informar las nuevas noticias a su esposa y yo aprovecho para cambiarme el uniforme y visitar al paciente de urgencias que al final no necesita nada quirúrgico.

Estoy orgulloso de mi trabajo y de Kiara también, es una chica lista y también atrevida al punto de sacarme del quirófano por dar mi opinión, no me molesté con ella, si no que todo lo contrario, eso fue caliente y sexy. Me importa una mierda la opinión de los demás que estaban presentes y que luego se armen chismes por los pasillos del Hospital, eso no me preocupa mientras no llegue a oídos de Steffano.

— ¡Noah! ¿Tienes un minuto? — Emma aparece por el pasillo con una carpeta en la mano, lleva un vestido rojo que le llega hasta las rodillas y encima tiene puesta una bata blanca.

Ahora no tengo tiempo para ella, quiero ver a Kiara antes de que se vaya pero no puedo ignorar a un colega si se trata de trabajo.

— Tengo solo un minuto, nada más. — Le respondo.

— Te he estado buscando por todo el Hospital. — comenta. — Necesito que me firmes este documento, es importante.

Chequeo rápidamente el documento que debo firmar, es un contrato para que se una un nuevo cardiólogo al equipo. Emma es quién actualmente se hace cargo de esa área.

— Asi que tu amiga, la hermana del Dr Steffano está aqui haciéndole una cirugía a un animal. — Emma rompe el silencio, por supuesto que no puede estar callada.

— Que rápido vuelan los chismes. — contesto sin mirarla a la cara, mi mirada está puesta en el contrato que me entregó.

— Todavía no entiendo que le ves a esa. — la miro a la cara y tiene una sonrisa burlona.

— Métete en tus propios asuntos, Emma. — me acerco a ella de forma intimidante. — Ya tuvimos una conversación una vez. No te quiero cerca de ella y piensa bien antes de hablar si quieres conservar tu trabajo.

— ¡Es que acaso no entiendes que me gustas! — dice quitándome el documento de mis manos y acercándose más a mí. Estamos más cerca de lo que me gustaría. — Yo estoy dispuesta a someterme a tus reglas, ella no lo hará, Noah. Es una chica inocente que busca un felices para siempre y tú no puedes darle eso, sé que eres un hombre que no se enamora.

— Emma... — advierto.

— ¡Déjame demostrártelo! Puedo ser la chica que deseas. — me interrumpe

— No eres a quién des.... — No logro terminar la frase cuando siento que agarra mi cabeza y estampa sus labios sobre los mios, no reacciono a tiempo, quedo unos segundos paralizado sin poder creer lo que acaba de hacer.

Cuando salgo de mi trance la agarro de sus manos y rompo el beso que en ningún momento se profundizó, solo sus labios alcanzaron a tocar los míos con un piquito.

Voy a enfrentar a la loca de Emma cuando miro hacia al pasillo y veo a Kiara que ha visto todo.

¡Joder!

—¡Kiara! — grito y salgo corriendo hacia su encuentro.

— ¡No te acerques! — pide haciendo un gesto con su mano y alejándose de mí para luego comenzar a correr.

Salgo detrás de ella hasta la salida del Hospital. — Ragazza, por favor. ¡Puedo explicarlo! 

Kiara ni siquiera se da vuelta para mirarme, aumenta el ritmo de sus pasos y se sube a su BMW antes de poder alcanzarla.