32. El Paredón

17 4 5
                                    

- ¿Por qué tenés esa cara de mula? Mas de lo habitual pues - se burló, sin ninguna respuesta de parte de Julio.

Muy curioso, se encaminó a la par de Julio dando un sorbo a su bebida.

El líquido que bebió no logró pasar por la garganta regresando todo el contenido y tosiendo fuertemente por algunos segundos, hasta que consiguió estabilizarse.

La vista que tenía enfrente de Miranda pudo haberlo matado.

- UTA - murmuró Luis Felipe recorriendo de pies a cabeza a Miranda.

- mj - musitó Julio con la mirada fija hacia las sillas.

- Dijiste que no te gustaba -

- Me encanta - confirmó Julio sin mover la vista, como hipnotizado.

- ¿Y Sofía?- preguntó irritado Luis Felipe -dijiste que te gustaba ella -

Julio lo volvió a ver con el ceño muy fruncido.

- Si, como te acabo de decir, me encanta - respondió volviéndolo a ver sin comprender de que hablaba.

- ¿Entonces? - señaló molesto Luis Felipe a Miranda.

- ¡Ah¡ Ahí está Millie -

- ¡Aja! Entonces ¿Por qué la estás viendo así? - preguntó con un tinte amenazante en su voz.

Julio entrecerró los ojos, empujó su rostro hacia la derecha cambiando su campo de visión y ahí pudo ver a Sofía acostada en las sillas haraganas.

Pudo comprender porque Julio estaba tan interesado observando.

Las modelos de los trajes de baño quitaban el aliento.

- ¿No habías visto a Millie? - preguntó casual Luis Felipe. - Ah bueeeenooooooo, si estas colgado entonceeeeeesss -

- Vos tampoco habías visto a Sofía - volviendo a ver, se mofó -Por lo menos yo no lo niego -

- Yo no estoy colgado - dijo tomando un trago de su bebida - peeeeroooo, la cosa se pone dura - bromeó Luis Felipe sin quitar la vista de ella - LITERAL-

Ambos rieron.

Mas tarde: a Laura se le ocurrió retar a los chicos a un partido de voleibol - mujeres contra hombres - dijo determinada.

Aceptaron el trato y los perdedores tendrían que preparar todo el asado.

Cuando estaban perdiendo las chicas, Miranda se ofuscó un poco porque la salida de baño le estorbaba. En un momentito que tuvo se deshizo de ella y la dejó tirada fuera del área de juego. La distracción de Luis Felipe fue evidente cuando se le pasó una pelota totalmente por la cara.

- Eso es jugar sucio - advirtió

- ¿Por qué? - preguntó Miranda genuinamente inocente.

Laura comprendió a que se refería Luis Felipe y quitándose la playera que la cubría, guiño el ojo a sus compañeras, quienes se fueron quitando las salidas de baño.

La estrategia dio el resultado esperado y las mujeres ganaron con 10 puntos de diferencia.

- Es que así, no se vale - gruñó Luis Felipe

- Todos ustedes estaban sin camisa - atacó Miranda

- Acepten su derrota y avísennos cuando esté listo el asado - dijo Laura divertida.

A media tarde, empezaron a prender el fuego para el asado, mientras las chicas disfrutaban la piscina.

Luego de un rato los chicos anunciaron que en corto tiempo estaría listo el asado por lo que salieron de la piscina para cambiarse.
Al regresar de cambiarse, Miranda encontró una chica muy bonita platicando en la parrilla con los muchachos.

Remiéndame el almaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora