Remiéndame el alma

45. No hacen falta las palabras

Miranda tragó saliva sin saber que decir, no le gustaba ser pesada pero tampoco podía darle alas.

- ¡Millie! – apareció Julio – ¡Vamos! – dijo entusiasmado. Luego le susurró al oído - Si no queres que tu amigo muera –

Ella frunció el ceño y siguió la dirección de la mirada de Julio que la llevó directo a los ojos enfurecidos de Luis Felipe.

- Ya va a empezar – anunció Laura llegando a traer también a Miranda.

- ¿Qué cosa? – preguntó Miranda intrigada

- KARAOKE – dijeron al unísono

- Qué buena onda -respondió Miranda entrando con ellos e invitando a Jorge a entrar también.

Guillermo fue el primero en saltar al escenario y cantó Tu amor me hace bien de Marc Anthony.

Los aplausos rompían los tímpanos y además puso un ambiente de lo mejor en todo el pasaje, porque el karaoke se estaba haciendo afuera de los restaurantes.

Guillermo llamó a Luis Felipe al escenario y este subió muy convencido. Cantaron a dueto ¨Despacito¨ de Fonsi, y la locura se formó.

Entonces empezó la intro de ¨La Bicicleta¨ y Luis Felipe guiñó el ojo a Miranda y la invitó al escenario, sin pensarlo mucho subió y cantaron y bailaron, así sonó luego ¨Nunca es suficiente¨ en donde dejaron a Miranda en el escenario.

Siguió Luis Felipe con ¨Pégate¨ de Ricky Martin, entonces las mujeres se enloquecieron.
Literal: voló un sostén al escenario.

Invitó a Miranda al escenario a bailar

– Voy a aparecer muerta en una cuneta. Estas mujeres me van a matar – le dijo mientras solo sonaba música y bailaban, entonces él le dio un beso en la mejilla.

– ¿Queres que me maten? – preguntó Miranda con los ojos como plato.

- Nadie te va a poner un dedo encima mientras yo viva – dijo guiñando un ojo
- Dale con los coros - le dijo pasándole un micrófono y sonriendo pícaramente.

-♫♫♪PÉGATE UN POCO MAS, PEGAO A LOS TAMBORES, OLVIDA LOS TEMORES QUE EL TIEMPO SE NOS VA♫♫♪ –

Subió Guillermo para cantar ¨Canción Bonita¨ con Luis Felipe y Julio remató con dos más de Marc Anthony y con eso bajaron del escenario e hicieron una pausa, los aplausos y vítores del público estallaron al final del karaoke.

Luis Felipe fue ¨abducido¨ por un grupo de chicas que lo invitaron a sentarse y a un trago.

Frente a Miranda, un mesero apareció con una sangría – Yo no pedí nada. Gracias – dijo educadamente.

- Salud – dijo Jorge chocando el vaso con su copa. Miranda sonrió sorprendida mientras Jorge se sentaba en su mesa.

Desde su lugar, observaba a Luis Felipe dos mesas al frente, mientras trataba de sostener una conversación con Jorge.

Rodeado de mujeres, muy contento.
Ese era su mundo y ella no pertenecía ahí. No había espacio para ella.

Le dolía horrible que todo lo que le había dicho fuera mentira.
Solo confirmaba que, como era de esperarse, luego que se enteró de la realidad de Miranda, la veía como la mercancía dañada que era.

Aceptó la invitación de Jorge para bailar y luego de dos canciones decidió que no hacía nada en ese lugar revolcándose en su miseria.

Bailar con Jorge solo la hacía extrañar bailar con Luis Felipe. No podía seguir observando como todo lo que temió pasaba como una película delante de ella.